Vida entre callejones.

XIII

Dwayne llega junto con Jessica al departamento en donde esta se aloja, se tardaron alrededor de 15 minutos caminando desde Prince hasta allá. El lugar es pequeño, cuenta con una modesta cocina a la derecha de la puerta principal, una sala con un juego desgastado de muebles y una habitación con una cama, un closet y un baño.

Al entrar, Jessica le dice al chico que se siente en los muebles porque ella se va a cambiar de ropa. Al cabo de unos 15 minutos suena la puerta junto con una fuerte voz de hombre diciendo: «¡JESSICA!» Al escuchar esto, la mexicana sale rápidamente de la habitación, abre la puerta y sale.

- ¡Dame la cuota de tu noviecito! Llevas 3 días sin trabajar por andar con ese pandillero pobreton.

- No tengo el dinero, mañana te lo entrego. - Dice la mexicana.

- ¡SERÁ MEJOR QUE TE APURES, AUN ERES MIA JESSICA, MIA!

- ¡Oiga, oiga. Esperese un momentico, usted es mi jefe, más no mi dueño, asi que vamos viendo si nos ubicamos!

De pronto se escucha un fuerte golpe y posteriormente la voz del tipo gritando.

- ¡APARTE DE PERRA, INSOLENTE! ¡QUE NO SE TE OLVIDE QUE FUI YO EL QUE TE SACÓ DE LA MIERDA DE TU PAIS PARA VENIR HASTA ACÁ! ¡RECUERDA QUIEN TE DA DE COMER Y QUIEN PAGA TU DEPARTAMENTO! ¡MAÑANA QUIERO MI DINERO, PERRA!

Jessica entra llorando, con la mano en la boca debido al golpe que recibió por parte del tipo.

- ¿Quien es el? - Pregunta Dwayne.

- El es mi jefe - Responde Jessica.

- ¿En que trabajas?

- ¡Carajo, déjame en paz y anda vete a dormir! - Exclama Jessica.

Dwayne frunce las cejas, se da la vuelta y se acuesta en el mueble.

A pocos metros de el estaba Jessica, se siente mal, no sabe que hacer, no quiere seguir siendo prostituta, pero es indocumentada y no sabe hacer más nada.

Jessica nació en Monterrey, vivía en un pueblo alejado del centro de la ciudad, nació y creció en una familia disfuncional, con un padre ludópata y una madre alcohólica. A los 21 años dio a luz a su hijo, el cual fue producto de una violación llevada a cabo para saldar una deuda que había contraído su padre. Todo ocurrió gracias a que su papá, en medio de una apuesta de peleas de gallos, lo perdió todo, inclusive su casa. Él no quería pagar pero dadas las circunstacias y al ver que iba a perder su casa, el padre ofreció la virginidad de Jessica como pago de la deuda. El tipo, un viejo de 49 años, aceptó, ya que llevaba cerca de 1 año y medio tratando de conquistarla, pero ella nunca lo tomó en cuenta.

Jessica como pudo mantuvo a su hijo, le dio estudios, casa y comida, todo marchaba bien, hasta que en una fecha oscura una de sus vecinas llegó corriendo a su casa, tocó la puerta y le gritó desde afuera: «¡JESSICA! Acaban de atropellar a Teodoro, está en el hospital del pueblo».

Jessica tomó sus cosas y se fue hasta allá, sin resultado alguno, ya que cuando preguntó por Teodoro a uno de los enfermeros, le dijeron que el chico de 13 años había recibido un golpe muy fuerte en la cabeza y murió prácticamente en el acto.

A partir de allí Jessica se fue de su casa y del pueblo para ir a la ciudad, ahí fue en donde conoció a Matthew, el tipo que había ido hace un rato a reclamarle por el dinero que le debía.

Luego de haberle dicho eso a Dwayne y de limpiarse la herida de la boca, la mexicana se va hasta la cocina, abre uno de los gabinetes de la cocina, saca una botella de tequila, se echa un trago y le dice a Dwayne: «Hey, chamaco ¿Estas despierto? Disculpa por la respuesta que te di, pero es que ando en muchos problemas».

- ¿En que trabajas? - Le pregunta Dwayne mientras se levanta.

- Eres terco ¿Eh? ¿Para que quieres saber o que? ¿Me vas buscar otra chamba o me vas a dar lana para irme de aqui?

Dwayne se le queda viendo insistentemente.

- Hijole buey, esta bien, tu ganas. Trabajo de prostituta. ¿Acaso sabes lo que es eso?

- No.

- Mejor que no lo sepas, estas muy pequeño para esas cosas

- ¿Porque me haz tratado tan bien y te preocupas por mi? - Pregunta Dwayne.

- No lo sé - Jessica responde así, pero internamente sabe que lo hace porque Dwayne le recuerda a su hijo.

- ¿Y tu? ¿Por qué me salvaste hace un rato de ese viejo asqueroso? - Le pregunta a Dwayne

- Porque me caes bien y...

- ¿Y que?

- Nada.

- A ver Dwayne, si me vas a decir algo me lo dices y ya

- Porque me caes bien y porque me recuerdas a una de mis familias adoptivas.

- ¿Ah si? ¿Eran mexicanos o es que eran muy guapos como yo?

- Si, eran mexicanos.

- ¿Y que pasó con ellos o que?

- Los asesinaron.

- Hijo de la chingada, no me digas que esa fue la familia que murió por los extremistas raciales.

- Si.

- Waoh, que fuerte.- Dice Jessica.

Seguidamente agrega:

- Bueno chamaco, ya vamos a dormir, mañana va a ser un día muy largo.