Imaginas de Magcon

23. Sammy Wilk (@-Ivanna-Linaje-)

Tras un día agotador de trabajo llegaste a tu casa y te tiraste en el sofá.

-¡Cariño! - escuchaste como alguien gritaba desde otro lugar de la casa. No respondiste, pues estabas muy cansada para gritar. Oíste los pasos de alguien corriendo por el pasillo -. Hola, guapísima - dijo depositando un beso en tu frente y después bajar a tus labios, sonreíste -. ¿Cómo te ha ido hoy? - preguntó, él sabía cuán cansado era tu trabajo. Bajo ahora sus labios a tu, ya algo notoria barriga y dejó otro beso ahí.

-Necesito dormirme, estoy agotada. - Sammy se tumbó a tu lado y te acurrucaste a su lado mientras él te acariciaba el brazo relajándote. Tras estar unos minutos más así, te quedaste dormida.

Poco después de una hora, Sammy te despertó con otro beso en la frente.

-Tienes que ir a prepararte para esta noche - susurró con los ojos cerrados. Esa noche ibas a tocar el violín en un restaurante junto a algunos antiguos compañeros tuyos de la orquesta a la que ibas antes.

-Es verdad - susurraste adormilada aún, te desperezaste y le diste un beso en los labios a un Sammy perezoso. - Tú también te tienes que arreglar, vago - dijiste divertida dándole otro beso, él sonrió divertido y puso morritos para que le dieras otro, volviste a juntar tus labios con los suyos.

-Vale, ahora ya puedes irte - te levantaste del sofá y te dio una palmadita en el culo, haciendo que te volvieras a él con una mueca rara, Sammy siempre hacía eso pero no te acababas de acostumbrar.

Fuiste a tu habitación, cogiste algo de ropa negra para ponerte y te dirigiste al baño para darte una ducha. Dejaste que el agua caliente relajara tus músculos durante unos minutos.

Cuando saliste de la ducha te pusiste los pantalones negros que tanto te gustaban, con una camisa negra y unos tacones negros preciosos. Peinaste tu cabello y te maquillaste un poco, pero no demasiado. Cuando saliste de allí te encontraste en el comedor a Sammy durmiendo en el sofá todavía, te parecía tan adorable que no querías despertarlo así que dejaste un beso en su frente y te marchaste al restaurante que quedaba a dos manzanas de tu casa. Caminabas pensando en lo enamorada que estabas de aquel vago idiota, de lo pesado que a veces se podía poner y de cuánto le amabas. Cada vez que habría la boca te sacaba una sonrisa, cada vez que hacía algo reías y cada vez que te basaba te derretías bajo su toque. No sabías cómo había conseguido aquello, pues cuando lo conociste no le podías soportar, una amiga que teníais en común os presentó en la fiesta de su cumpleaños y nada más verte te dijo que estabas buena, y claro tú le respondiste que te contara algo que no supieses, y así comenzó todo... Peleas y más peleas que se convirtieron en besos y más besos.

No te habías dado cuenta de que ya habías llegado a tu destino hasta que uno de tus compañeros te saludó.

-Hey, Ivanna - saludó otro. - ¿Cómo te va el embarazo?

-Bastante bien, la verdad - sonreíste agradecida. - Dentro de unos días me dirán qué es.

-¡Eso es genial! - asentiste contenta, sabías que él estaba pasando por lo mismo y era muy emocionante.

-Hola a todos - saludó la "jefa", ella era la que organizaba todos esos eventos, aunque nadie le pagaba por ello, ni os pagaba a vosotros por tocar, era como un hobby -. Preparad lo que tengáis que preparad, en diez minutos comenzará a llegar la gente.

Todos os sentasteis en vuestro lugar cuando la gente llegó y esperaba atento a que comenzara la función. Sammy no iba a ir ese día, pues tenía una importante reunión de trabajo, pero siempre venía a verte.

Empezasteis a tocar alguna canción más de ambiente, por así decirlo que conocidas para que la gente cenara tranquilamente.

Ese día estabas algo nerviosa, pues ibas a hacer un solo con una canción bastante difícil pero que te encantaba.

-Ahora, con un magnífico solo, ¡nos deleitará Ivanna! - presentó la chica, le sonreí y me dirigí al centro del pequeño escenario para comenzar a tocar aquella complicada melodía. Inhalaste y exhalaste varias veces y comenzaste a mover tus dedos por el instrumento que tocabas desde pequeña. La gente aplaudió cuando acabaste y sonreíste mientras hacías una reverencia al público, te retiraste y fuiste a guardar tu violín en su funda pero algo pequeño y brillante hizo que fruncieras el ceño extrañada y cogieras ese objeto, era un precioso anillo con una piedra hermosa que brillaba. Miraste a todas partes para ver si se le había caído a alguien, cuando se te formó una sonrisa al ver a un chico al que conocías muy bien apoyado en la entrada del local mirándote con una enorme sonrisa, llevaba unos pantalones negros y una camisa blanca. Se acercó pasando por en medio del local formulando una pregunta, a la que no dudarías en responder:

-Ivanna, ¿te casarías conmigo haciéndome el hombre con más suerte del universo? - corriste a sus brazos, la gente que cenaba allí se encontraba mirando la escena maravillada.

-Por supuesto que sí, - puso el anillo en tu mano - te amo - pegaste tus labios a los suyos, la gente estalló en aplausos y alguna que otra mujer estaba llorando de emoción.

-Yo te amo más, mucho más que tú - sonrió juguetón.

-No creo que sea más que yo...

🌈🌈🌈

Bueno, bueno... Mirad quién se ha dignado a escribir algo. Sé que hacía tiempo que no actualizaba y es por lo mismo de siempre, si queréis que suba más a menudo, echarle la culpa a los profesores que se creen que solo estudiamos su asignatura... Bueno @-Ivann-Linaje- espero que te haya gustado.

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