Promesas y mentiras

Soneto 4to.

Dominic se sentó en el mueble, con aquella carpeta que contenía la historia de su vida entre las manos. La sensación de desasosiego era profunda, toda vez que sentía la mirada de franco sobre él, fría, acusadora.

— ¿Co...cómo...conseguiste esto?

No quería levantar la mirada, no quería ver el reproche en los ojos de su amor.

— ¡Tu padre te ha estado buscando maldita sea! ¡Lleva casi dos años buscándote! ¿Cómo pudiste hacer esto Dominic? ¿Cómo pudiste ser tan inconsciente?

Dominic estaba demasiado impresionado como para reaccionar a la furia o a los gritos de Franco. Su padre lo había buscado, llevaba todo ese tiempo buscándolo ¿Por qué? ¿acaso sentía culpa? No, Dimitri Kiev jamás sentiría culpa por nada.

Dominic se estremeció con temor ¿acaso lo buscaba su padre para obligarlo a cumplir su voluntad? Ya lo había hecho con Nicolai, lo había obligado a abandonar su escritura, lo había forzado a hacerse cargo de la compañía, había hecho que Nicolai negara todo lo que era. Si lo había buscado a él, solo había una razón, obligarlo también a hacer su voluntad.

Dominic abrió la carpeta con las manos temblorosas, dentro estaba su vida. Fotos, documentos que relataban todo lo que había hecho hasta el último día que estuvo en su casa, entrevistas hechas a sus amigos. De pronto sintió un terrible dolor, al tomar entre sus manos un papel que relataba su nacimiento.

"Fue encontrado en las escaleras de un centro comercial. Según la evaluación médica que se le hizo apenas contaba con unas semanas de nacido. No presentaba signos de maltrato físico, pero si desnutrición. Después de unos días en los servicios sociales fue llevado a un orfanato en la zona de Brooklyn, donde los Kiev le adoptaron cuando contaba con dieciocho meses de edad. Nunca encontraron quien o porque le habían abandonado."

Dominic arrugó el papel entre sus manos, aquello era tan cruel. Enfrentarse a su realidad de aquella forma. Lo habían dejado en una escalera, como si se tratara de un objeto inservible, de una bolsa de basura ¿cómo podría alguien haber hecho algo así? Y, cuando se suponía que la vida le había dado otra oportunidad, que una familia le había acogido para hacerlo sentir protegido, feliz, solo había conseguido un padre intolerante que lo odiaba por lo que era, que lo despreciaba.

Franco, que había permanecido callado tratando de calmar su ira lo miró con furia.

—Todo este tiempo pensando que eras un desamparado, uno de esos muchos jóvenes que han tenido una vida miserable, que no les ha quedado más remedio que vivir en las calles y resultaste ser todo lo contrario.

Dominic alzó su mirada confundido por las crueles palabras de Franco.

—¿Todo lo contrario?

—¡Si Dominic! —Le gritó Franco, levantándolo por un brazo con toda su fuerza— .Dimitri Kiev es el dueño de una de las más grandes industrias petroleras del país y eso es solo una de las muchas empresas que posee el gran magnate ruso de los negocios y tú eres su hijo.

La ira en la cara de Franco era tan palpable que Dominic sintió miedo, no entendía su furia.

—Franco yo...

— ¿Tú que, Dominic? —Le espetó Franco molesto, soltándolo con rabia, como si le diera asco tocarlo.

—Eres el hijo de uno de los hombres más ricos del país y vivías en la calle, pasaste todo lo que pasaste ¿por qué Dominic? ¿Acaso tu padre no te quiso complacer alguna majadería? ¿No te compraron el carro último modelo? ¿No te regalaron el viajecito a la ciudad de moda? ¿Qué te llevó a comer basura, Dominic, a dormir en las calles? ¡Maldita sea! ¿Cómo pudiste ser tan egoísta, tan estúpido? Tus padres llevan dos años buscándote ¿tienes idea del dolor que debes haberles causado con tu insensatez?