Aquella era la primera vez que caminaba desde la casa de Jack hacia la mía, pero no me dí cuenta que estaban tan lejos. Mientras andaba, intentaba no pensar en nada, sobre todo en lo que acababa de hacer. Pero no podía.
El vínculo que me unía a Peter tiraba de mí, instándome a volver junto a él. Mi corazón se sumó a esa súplica, y me tambaleé.
Hube de agarrarme a un árbol que estaba próximo a mi, pues me sentía muy mal, como descompuesta. Me detuve unos momentos e inspiré el fresco aire nocturno, y eso me ayudó mucho.
Aceleré el paso, ya que necesitaba estar en mi casa. Quería llegar, tumbarme en mi cama y llorar. Debía asimilar que todos ellos ya no formaban parte de mi vida. Ni Ezra, ni Mae, ni Jack, ni Milo, ni... Peter. Un dolor aplastante se instaló en mi pecho al pensar que no lo volvería a ver. Era realmente irónico pensar que había pasado tanto tiempo luchando contra lo que sentía por él, y cuando lo reconocía, debía desaparecer de su vida.
Pero lo que más me dolía, era pensar en cómo lo iba a llevar él. Terminaría odiándome por arruinarle la vida, y no lo culpaba.
Llegué a mi apartamento, me senté en el sillón y respiré hondo, pero terminé quebrándome y el llanto que había estado conteniendo, salió. No sé cuánto tiempo estuve así, pero de pronto unos cálidos brazos me rodearon. Me quedé helada, y me dí cuenta de que yo conocía muy bien esos brazos.
-Alice...-murmuró Jack contra mi pelo, estrechándome más fuerte contra su pecho.
Me permití disfrutar de su abrazo sólo unos momentos, pero luego me aparté. Sequé mis lagrimas y lo miré. Sus ojos azules me miraban con ansias y sus brazos aún estaban extendidos para mi, invitándome a acurrucarme en ellos.
-Jack...-comencé a hablar-, ¿qué haces aquí?
El me miró confundido, supongo que esperaba otra reacción de mí. Tardó un rato en responder, pero al final bajó sus brazos.
-Alice, yo... Yo no te podía dejar ir-me dijo, en forma supicante, con los ojos húmedos-. No importa Peter, ni nadie más. Eres lo más importante para mí, eres lo que más quiero.
Y se inclinó para besarme. Yo quedé estática, pues ya no sabía cómo reaccionar.
Pero un portazo y un terrible gruñido nos sobresaltó. Yo sabía quién era. Mi corazón palpitó más fuerte, feliz ante su proximidad, y de pronto quise correr hacia él para mirarlo.
-Aléjate de ella... ¡Ahora!-dijo Peter, escupiendo las palabras.
ESTÁS LEYENDO
Atracción Eterna
FanfictionLa historia pertenece a la saga de libros Lazos de Sangre. En esta versión, Alice elige a Peter sobre Jack, ya que no puede ni quiere luchar contra lo que su cuerpo y ahora también su corazón, le pide, que es Peter. Pero Jack no se va a dar por venc...