Capitulo 10.

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Comencé a amarlo por simple pureza e inocencia. Me sentía finalmente conectada completamente a el, como anclada, porque me di cuenta que él también me quería, aunque no fuera tanto como yo a el, y aunque el no viera su vida reflejada en mi.

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Nuestros últimos tres días de clases, y yo me preguntaba que haríamos cuando saldáramos de clases. Pero me importaba mas verlo hoy, que pensar si terminaría este año estando con él, o sin el.

Estaba bajando las escaleras, pero a Elliot lo habían cambiado de salón y la mayoría del tiempo no coincidíamos en los recesos. A veces yo bajaba y me sentaba con Evelyn, pero ella ya no iba a la escuela desde hace una semana, se fue de viaje a no se donde... Estaba pensando donde mi iba a sentar, si con mis amigos que ya todos se iban con los de su salón, o me sentaba sola.

Iba en camino a guardar mis libros, y estaba alguien en mi casillero, pero la puerta del casillero estaba abierta, y cubría la cara de la persona que tenía mi casillero abierto.
-Disculpa...- le dije a unos 5 metros del casillero, mientras caminaba.
Pero la persona no se detuvo.
-Oye...- le dije de nuevo -Que o...- le dije mientras me asomaba a mi casillero. Para mi sorpresa era Elliot, ¡qué fregados estaba haciendo ahi!
-¿Elliot?-
-Espero te guste.- se volteó hacia mi y pude ver unos tallos de flores en el casillero.
Se movió del casillero y se colocó atrás de mi, pude ver 4 claveles, y en cada uno de ellos estaban marcados con estampas, con los meses de Septiembre, Octubre, Noviembre y Diciembre y fotos de nosotros. Probablemente la mamada más grande en la vida que me han dado, bueno, al menos no era tanto una mamada, ya que me regalo 4 claveles, mis favoritos.

¿Me gusta la romántico? les resuelvo su duda. Sí. Sí, me gusta, me gusta, al parecer es lo que más me encanta. Pero hay diferentes tipos de "romántico". Yo me inclino por el conocer a alguien de la manera mas arrogante del mundo. Como en un bar, como en una fiesta donde todo mundo está drogado y ebrio, tanto que les atraigo por mi pinche culo, probablemente, y que en el momento estén con todos los sentidos bajos, sólo queriendo tener sexo. Quiero que me admiren por ser una niña bien hecha, aunque sea cabrona. Y tal vez no conocí a Elliot, de esta manera, pero realmente era arrogante.

-No mames.- le sonreí mirandolo.

Palabras de autora:
Lamento mucho el no publicar, y lamentó mucho este pequeño capítulo, pero mis ideas volvieron, les tengo muchas sorpresas.

Un amor en prosas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora