Jet

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Lee

Habían pasado un par de semanas desde que Jin y yo nos conocimos, cada día la conocía más y más, me agradaba su forma de ser, pero aún me inquietaba saber qué era lo que le había pasado, ¿Por qué tanto dolor?. Hoy le quería dar una sorpresa, ya casi iba a anochecer, fui a la florería en donde trabajaba en las tardes y la esperé un rato afuera, la podía ver desde la ventana, estaba preparando sus cosas para salir, estaba a punto de salir cuando un chico entró a la florería, Jin mostró un gesto de desagrado al ver al chico, el chico se acercó demasiado a ella, Jin lo empujó para que se alejara pero el chico seguía acercandose demasiado a ella. En eso el chico la comenzó a besar en el cuello, Jin intentaba quitárselo de encima. Sentí una furia enorme, entré a la florería muy enojado, intenté abrir la puerta, pero al parecer el maldito la había cerrado con seguro, Jin me vió por la ventana, el chico aún no lo notaba.

Tomé una varilla de metal que estaba tirada en el suelo y comencé a golpear la chapa hasta que la puerta finalmente se abrió, el chico se volteó hacia mi y me lanzó una mirada de enojo.

-¡Déjala en paz!-Grité con enojo

-Obligame-dijo el chico con un tono desafiante

Cerré mis puños con mucha fuerza. "No puedo hacer esto"

Me dije a mi mismo, nadie de este lugar sabía que era un maestro fuego y mucho menos el hijo de Ozai. No puedo usar fuego control, pero no dejaré que se vuelva a aprovechar de Jin. Cuando me acerqué a él para tirar el primer golpe, el sacó unas espadas gancho que traía colgando en su espalda. Me di cuenta que aún tenía en la mano la varilla que utilicé para abrir la puerta así que me cubrí con ella cuando intentó el primer ataque con su espada, el chico jaló mi varilla y salió volando hacia otro lado.

-¡Jet, Por favor cálmate!-gritó Jin

El chico me había acorralado y clavó sus espadas contra la pared, pero por suerte logré agacharme a tiempo. Salí a toda prisa en busca de la varilla de metal para cubrirme del chico, cuando sacó sus espadas de la pared me lanzó una mirada de furia, se dirigía lentamente a mi. Pero Jin se interpuso en su camino.

-Jet, Por favor cálmate-suplicó Jin, sin quitarme la vista de encima solo retrocedió

-Esto no termina aquí, te lo advierto-sin nada más que salir salió de la florería, había varia gente siendo testigos de la pelea que recientemente habíamos tenido, habíamos roto varias cosas a la hora de que el chico clavó sus espadas en la pared, habíamos roto algunos floreros de cerámica que estaban cerca. La señora Ying entró furiosa a la florería y fue directamente hacia mi.

-¡¿Quién te crees que eres?! ¿Acaso crees que puedes venir y destrozar mi negocio?-gritó

-Disculpe Señora Ying, vine a defender a Jin y...-Ying me interrumpió

-No me importa lo que haya pasado entre ustedes, ¿Ahora cómo piensas pagarme todo lo que destruiste?

-Señora Ying, tranquila, si de verdad a usted lo que le importa es que su negocio esté bien, vendré mañana a pagarle por los daños, le doy mi palabra-me pareció muy triste que la Señora Ying solo se hubiera preocupado por su negocio y no por saber si Jin se encontraba bien.

-Mañana al amanecer; sé puntual

-Hasta mañana entonces

-Ya váyanse de aquí

Jin y yo salimos de la florería, ya no había tanta gente afuera de la florería.

-Gracias-dijo Jin y me abrazó

Podía oler su suave aroma a flores, nunca antes la había tenido cerca de mi lo cual hizo que mi corazón palpitara a mayor velocidad.

-De nada-dije esbozando una gran sonrisa



Jin

-No quiero ser grosera, pero ya me tengo que ir-aún me faltaba ir a trabajar al bar, seguía sin entender por qué Lee estaba aquí-Pero antes de eso...¿Qué hacías aquí?-Lee sacó 500 Yuans de su bolsillo

-¡Por favor, no de nuevo!-cuando Lee me pagaba era porque quería que fuera con el a algún lado, di un profundo suspiro-¿A dónde?

-Te prometí que te enseñaría a usar las espadas duales Dao-Lee me lanzó una mirada de suplica, mi conciencia me decía no dentro de mi, pero a veces era imposible decir no

-Esta bien, pero esta será la ultima vez-dije lo más serio posible y tomé el dinero

-No prometo nada-dijo entre risas

-¿No crees que es algo peligroso practicar en la ciudad? Podemos lastimar a alguien

-No te preocupes, iremos a las afueras de Ba Sing Se, ahí no lastimaremos a nadie

-¿Las afueras?-dije nerviosa

-¿Algún problema?-en realidad si pero todo lo que logré decir fue:

-No, ninguno-dije esbozando una sonrisa fingida


Nota de la autora:

Hola guapuras, espero que hayan tenido una buena semana y estoy pensando en publicar varios capítulos en un sólo día ustedes que piensan....? dejen su comentario, gracias por todos sus votos, y aunque no lo hagan, de todos modos, gracias :D



Love is a mystery (zutara)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora