-Pro Normal-
- ¿Qué es la muerte? Según a mi prejuicio es cuando la vida llega a su fin y nuestra alma abandona nuestro cuerpo, pero realmente nadie sabe con certeza que es. Mi maestro de literatura solía contarnos fantásticas historia de la vida después de la muerte, todas y cada una de ellas eran fascinantes, pero una vez me pregunte ¿Podre olvidar mi antigua vida después de que muera y empezar otra? Una infinidad de preguntas vinieron después de esa, demasiadas veces el darle vueltas a aquello robaba mi sueño. Cuando cumplí veinte y dos años conocí el amor, aquella joven entro fácilmente en mi corazón, pero la vida me la arrebato en un incendio en el cual no hubo sobreviviente alguno, poco después de eso---
- ¡Que aburrido! - Aquella joven que se encontraba sentada junto con el peli-azul grito logrando captar la atención de algunos pacientes y enfermeras -
-Carla-san por favor no interrumpas la lectura - pidió de manera amable mientras que con su vista trataba de localizar el capítulo en el que se había quedado -
-Déjame decirte algo, ¡esa historia es deprimente! - Nuevamente protesto poniéndose de pie de aquella mesa en la cual estaba sentada junto con aquel chico -
-...Tu me pediste que te lo leyera - suspiro pesadamente para serrar aquel libro - ¿Qué es lo quieres hacer?
-Quiero salir e ir a un museo!! - una sonrisa se formo en sus labios - Ne Tet-chan! Me acompañarías?
-Solo si el hospital lo permite - agrego cruzándose de brazos - No quiero que trates de escapar... otra vez.
- ¡Que aburrido! - tranquilamente comenzó a caminar de un lado a otro observando el paisaje que se lograba ver por aquella venta de la cafetería -
-Tetsuya, Carla! - la voz de una mujer logro captar la atención de ambos jóvenes - Es hora de administrarles el goteo intravenoso a ambos.
-un leve escalofrió paso por la espalda del peli-azul después de todo aun no lograba acostumbrarse a aquello - Si - de pronto una mano tomo su hombro, por acto de reflejo volteo a ver aquella persona -
-Vamos, aun podemos huir - susurro aquella chica de largos cabellos castaños -
-Oh no, no lo harás~ - una cantaría voz se escucho detrás de la joven - Esta vez tome precauciones~
-...Cuanto los odio... - una leve risa salió de los labios de Kuroko el cual trato de disimularla para que su vecina de cuarto no lograra escucharla -
-Tetsuya - nuevamente la voz de la enfermera lo llamo -
-Sí.
Aquel día, bueno para ser exactos Sábado siete de la mañana era uno de los más tranquilos en el hospital, bueno solo hasta las diez de la mañana que era cuando comenzaba el horario de visitas, normalmente era aquel día cuando el hospital estaba más lleno.
Por otra parte Kuroko se estaba adaptando al estar en aquel lugar, después de todo el tener que usar aquella ropa que indicaba que era un paciente que consistía en un pants color verde azuloso y una camisa del mismo color y el caminar por los pasillos con aquello era incomodo, algunos dirían "Es invisible" pero aun así la incomodidad estaba presente.
La primer noche que paso en aquel lugar fue de alguna manera incomoda, después de todo fue esa noche cuando conoció a Carla la cual soltó un enorme grito al verlo, desde ese día ella no se separa de él, no era porque le gustase, si no porque se sentía cómoda con su presencia aunque fuera nula.
Los grandes pasillos de aquel lugar ya los conocía como la palma de su mano, Carla se los había mostrado detalladamente, según ella "No hay nada más interesante que hacer más que explorar"