Capítulo 6: Familia Humboldt
Cat
Los minutos pasan y la paciencia se me está agotando.
Mi padre lleva más de veinte minutos intentando tocar la puerta, y mi madre aún se encuentra en el auto negándose a entrar.
La familia Humboldt y la De La Rosa nunca se han llevado bien, y por años se han encargado de mantener ningún tipo de unión entre ellos, pero mis padres hicieron todo lo contrario, por lo que detrás de esa puerta nos espera felicitaciones, ni abrazos, posiblemente una muerte segura, pero no lo sabremos si seguimos parados frente a la puerta.
—Deja que yo lo hago —hago que mi padre se quite de en medio y doy un fuerte golpe en la robusta puerta de madera.
No transcurre mucho tiempo para quesea abierta y emerja un hombre alto y flaco, con la pie arrugada y los ojos saltones.
El hombre me mira con disgusto, luego se da cuenta de que no estoy sola. Ve a mi padre y a mi madre aun en el auto, y dramáticamente su rostro pasa a la consternación.
—¿Camilo que significa esto? —su voz salió más fuerte de lo que imagine.
Nadie responde. Mi padre se ha quedado mudo ante la presencia del señor. Mi paciencia a cruzados los limites, así que aparto al hombre de la puerta y entro.
En el interior no había mucha luz, un amplio salón se abre con extravagancias por doquier, caras pinturas decoran lo alto de las paredes. Un juego de muebles cubre gran parte del espacio y una anciana me miraba sorprendida.
—¿Quién eres? —exige la señora.
—Camila —respondo.
Ella es una mujer poderosa, puedo sentir su aura moviéndose a su alrededor. Lo que me hace añorar mi magia, esa otra mitad a la que tuve que renunciar. Un sentimiento de pérdida me regocija para lastimarme.
—Señora su hijo está en la puerta —anuncia el señor que nos abrió la puerta.
—Hazlo pasar—sus bonitos ojos celestes se llenan de dureza con una mezcla de nostalgia.
Escucho detenidamente cada paso que se acerca, lento y determinado, como no querer llegar nunca a su destino. Mi padre aparece a mi lado y esta pálido como un papel, en cambio mi madre se oculta detrás de mí del rosto frívolo de la señora.
—Tomen asiento —dice la señora con fingida empatía.
Me acomoda en el acolchado mueble frente a la señora, mi madre se acomoda a mi lado. Como si yo fuera su escudo. En cambio mí padre se queda de pie en el mismo lugar.
—Cordelia —la señora pronuncio el nombre con amargura.
Realmente fue mala idea venir, aquí como que va a correr sangre. Deslizo la mirada entre mis padres y la señora, y la tensión es aterradora.
—Francisca —escucho decir a mi madre con el cuerpo pegado al sofá, tieso como muñeco de yeso.
La abuela se llama Francisca. Su cabello es completamente blanco recogido en un elegante moño.
—¿Quién va a comenzar a explicarme lo que sucede aquí? —pregunta con la mirada fija en su hijo. A la espera de una explicación que no termina de llegar.
—Yo soy Camila... —comienzo a decir pero mis palabras se ven interrumpidas.
—Ya eso lo dijiste —sus palabras son filosas y me encolerizan. Alzo una ceja en una mirada cargada de la misma frialdad que ella desprende.
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Secreto de la Rosa. Guardianes 5. Gato Mágico
Fantasy¿Qué pasaría si todo lo que alguna vez creíste saber de tu propia vida, de repente se convierte en una buena mascara para ocultar la verdad? Cat, es acusada por un crimen del cual desconoce, todas las pruebas indican que fue ella, quien mato a un ga...