Amor ? ( leeteuk y tu ) [EDITANDO]

Propuesta

Mis ojos estaban abiertos al tope y mi boca entre abierta por la sorpresa. Mi pulso se aceleró y mi sangre subió a mi rostro haciendo que se enrojeciera.
-Q-que haces Le-leeteuk-. Dije intentando llamar su adormilado subconsciente. Me movía un poco entre sus brazos para poder "escapar", aunque extrañamente quería quedarme ahí, mi corazón estaba emocionado también.
- Quédate, quédate conmigo-. Dijo este apegándome mas a su cuerpo, apretándome mas a su cuerpo entre sus brazos. Coloco su cabeza encima de la mía, donde pude sentir como aspiraba el aroma de mi cabello-Solo esta noche.
Lentamente alce mi rostro, para poder encontrarme con el suyo. Y así fue, sus ojos chocolate me miraban, algo adormilados pero consientes de lo que estaba pasando. Asentí levemente para responder a su propuesta. La verdad era que yo también deseaba quedarme esa noche junto a el.
Baje la mirada y acomode mi cabeza lentamente en su pecho. Este me afirmo mas a su abrazo y cuerpo.
-Buenas noches Caramelo-. Dijo con voz adormilada.
-Buenas noches Leeteuk-. Dije suavemente. Cerré mis ojos lentamente para que el sueño me atrapase. Y así fue, me quede dormida en sus brazos lentamente, sintiéndome segura bajo su calor y aroma.
***********
El sol que traspasaba la ventana, pegaba a mi rostro, haciendo que despierte por la molestia que este causaba. Fruncí mi ceño eh intente moverme para estirarme como frecuentemente lo hago en las mañanas, pero me vi atrapada por algo fuerte que lo impedía. Abrí mis ojos para ver lo que me lo impedía, pero el rostro de Leeteuk dormido a pocos centímetros del mío me sorprendió. Las imágenes de los sucesos de la noche anterior llegaron a mi mente, como si de un ebrio después de una noche de fiesta se tratase, haciendo que me enrojeciera de la vergüenza. Había pasado la noche con el!
-Dios!-dije sorprendida y avergonzada.
Me removí un poco en sus brazos para poder escapar de su abrazo, pero este lo sintió y gimió por mis movimientos. Deje de moverme y me quede quieta, solo me limité a observarle.
Lentamente el abrió los ojos despertando de su sueño.
Yo no podía dejar de mirarle, aún seguía sorprendida. El ya mas despierto se dio cuenta de que mis ojos estaban puestos en los suyos, por lo que también se limitó a observarme. Al ver que sus ojos permanecían aún en los míos, mi corazón comenzó a acelerarse.
-buenos días Caramelo-. Hablo con tono adormilado y ronco, y su hermosa sonrisa reapareció un día más en su rostro.
-Bu-buenos días-. Dije en un hilo de voz desviando la mirada de la suya.
El aun me tenía en sus brazos y me observaba con una sonrisa en su rostro. Yo miraba a otro punto de la habitación para evitar ponerme mas nerviosa de lo que ya estaba.
-Son las 6:30, si queremos llegar al instituto a tiempo tenemos que levantarnos ya-. Dijo soltando su brazo de mi cuerpo que segundos antes se encontraba abrazándome, para poder tomar su celular de la mesita de noche que se encontraba a su lado de la cama.
Yo en un movimiento ágil, salte fuera de su agarre y me senté en la orilla de la cama.
-Tienes razón! Debemos darnos prisa.-dije de espaldas a el, algo nerviosa.-iré al baño a lavar mi ca...-no pude seguir la oración. La viva imagen de su torso desnudo se volvió a encontrar con mi mirada.
Esperen un momento, el se estaba colocando su camisa por lo que antes no lo usaba, entonces no había dormido con ella... Eso significa que...dormí con el mientras no usaba ca...misa.
El color rojo intenso no tardo en abordar mi pálido rostro.
-¿Estas bien Caramelo?-.Pregunto al notar mi expresión. Se acercó a mi con la camisa ya puesta y colocó su mano en mi frente.-estas un poco caliente.
-N-no, y-yo estoy perfectamente.-en ese mismo momento me pare rápido y aleje mi rostro de su mano-. Yo... iré al baño!-exclame para luego irme a pasos apresurados al baño.
Entre y cerré la puerta detrás de mi, me acerque al lavabo y no pude evitar observar mi enrojecido rostro en el espejo. Abrí la llave y empape mi cara con la helada agua de la mañana.
Luego de unos minutos en los que pude calmarme, salí del cuarto de baño lo mas natural posible.
-Ya estas lista?-pregunto al frente de la puerta principal con su chaqueta de cuero negro en su brazo.
-Si, podemos irnos ya.-Dije acercándome a la puerta junto a el.
-Entonces vamos-. Me miro y embozo una sonrisa para mi, sujeto mi mano sorpresivamente y me llevo fuera de la habitación por el largo pasillo.
-Buenos días-. Saludo la recepcionista al vernos llegar, que esta ves ya no era la misma señora de la noche anterior.
-Buenos días, aquí están las llaves de la habitación-dejo las llaves en la mesita de la recepcionista.
- Gracias, espero que hayan pasado una linda noche juntos, vuelvan pronto.-Nos despidió la recepcionista como seguramente se lo diría a todas las parejitas que vienen a divertirse un poco por aquí.
Me sonroje un poco, y Leeteuk de lo contrario rió levemente mientras decía gracias. Luego me abrazo por el hombro y seguimos hasta la salida.
Nos dirigimos a pie hacia la parada de autobús más cercana, donde tomamos un autobús con rumbo a la ciudad.
- Llegaremos a tiempo al instituto?- pregunte mirando la hora en mi celular con preocupación, ya subidos en el autobús.
- No te preocupes, llegaremos a tiempo, mejor descansa en mi hombro hasta que lleguemos Caramelo, te parece?-. Dijo quitando el celular de mis manos y metiéndolo en el bolsillo de su chaqueta. Lo mire con el ceño fruncido pero este río por mi expresión.
-E-esta bien- dije recostando mi cabeza en su hombro.
-Eso es- dijo acariciado mi cabello-. Sabes, te ves muy bonita mientras duermes.
- Que?!-Exclame levantando mi cabeza para enfrentar su mirada pero este volvió a poner mi cabeza en su hombro con ayuda de su mano.
-Bueno, fue algo que no pude evitar observar, incluso note que fruncías un poco tus ojos-. Soltó una profunda risa.
Qué vergüenza. Eso era lo que yo estaba pensando en ese instante.
- Es de mala educación mirar a las personas sin su consentimiento.
- No si no te das cuenta, fue inevitable Caramelo-. Sentí su sonrisa aparecer, y simplemente yo también lo hice. Sonreí.
*************
Luego de 15 minutos hablando en el autobús, llegamos a unas cuadras antes del instituto. Pensar que tendría que volver a ese horrible lugar me daba dolor de cabeza.
- Caramelo, el día de hoy no podré asistir a clases, mi tío...tiene asuntos que tratar conmigo-. Dijo ya cuando nos encontrábamos a la entrada del instituto.
- Oh...esta bien, espero que te valla bien- Una preocupación se alojó en mi, debido a su oración. Pero no podía depender de su compañía para sentirme resguardada de los demás.
- Prometo volver a verte el día de hoy- Dijo colocando un beso en mis nudillos- No dudes en llamarme si tienes algún problema.
- Esta bien, adiós-. Me gire en mis tobillos y avance unos metros para poder dirigirme al infierno llamado instituto, pero me detuve en seco al recordar que aún tenía algo que decirle. El seguiría allí?
- Leeteuk...- dije en casi un suave suspiro para luego poder girarme. Mi corazón se agitó cuando lo vio a el, parado en el mismo lugar, observando a mi dirección. El al verme girar repentinamente, se acercó a mi con rostro de preocupación.
- ¿Estas bien caramelo? ¿Que sucede?- dijo acariciando mi cabello.
- Gracias... gracias por quedarte el día entero conmigo ayer, sin duda me divertí, gracias-. Antes de irme tenía que agradecerle por aquel hermoso día que pase a su lado.
Inmediatamente su sonrisa formo parte de su rostro.
- El placer fue mío señorita- se acercó a mi y me dio un beso en la frente, que me dejo con las maripositas revoloteando en el estomago.
Mi sonrisa también apareció en ese momento abordando mi rostro.
Me pare en puntillas para poder alcanzar su gran altura y deposite un besito en su mejilla. Sentí tanta pena en ese instante que no pude evitar ponerme roja. Pronto salí corriendo de su lado para evitar enfrentarlo. Lo último que oí de el antes de entrar al instituto fue su suave risa entrar en mis oídos y su voz exclamando " TE QUIERO TN".
Ente al instituto con las mariposas aun revoloteando en mi estomago.
Leeteuk lograba poner mi mundo de cabeza cuando se lo proponía.
Las primeras horas fueron iguales como siempre. No tenía presencia en ninguna parte, pero lo que me extrañaba era que nadie se había acercado a molestarme personalmente o en grupo, y no había señales de Megan y de kyuhyun. Sin duda estaba de suerte.
- Hey TN, por fin te encuentro.- Yesung me detuvo del hombro haciendo que gire hacia el.- Cuando tu padre se entero de que no estabas en ninguna parte se preocupo mucho, pero se calmo luego de la excusa que le diste- dijo siguiéndome el paso.
- Gracias por no decirle nada a mi padre, te debo una.- dijo con la cabeza gacha.
- No, tranquila, lo hice porque quería, no quería que te metas en problemas.- dijo rascándose el cuello.
Lo mire confundida, y al notarlo sus mejillas enrojecieron. Me dio algo de gracias por lo que solté una leve risita. El intento ocultarlo bajando su cabeza.
-cierto, en verdad fuiste a dormir a la casa de una amiga? Donde estaba tu amiguito ese?- pregunto alzando la cabeza con expresión curiosa e insistente.
No quería decirle que había pasado la noche con Leeteuk. Además porque se preguntaba acerca de mi?
- Yo... fui a la casa de mi amiga luego de pasar el día con Leeteuk, el solo me acompaño- Mentí y mencione a mi amiga imaginaria de nuevo.
- Oh, creo que me siento mejor, ese tipo me da mala espina, e escuchado muchos rumores sobre el, no tiene derecho a lastimar a una chica indefensa como tu...- Yo fruncí mi ceño al escuchar su desconfianza hacia el, pero de cierta manera lo entendía, aquellos rumores también me había echo pensar cosas malas de Leeteuk sin antes conocerlo, y además su facha de chico malo tampoco daba tanta confianza.
- Cuando lo conoces mejor, puedes ver la hermosa persona que en verdad es- dije distraída en mis pensamientos.
- Mmm...- solo soltó el a mi respuesta.
Alce mi vista al frente para ver el camino, pero las miradas asesinas de algunas chicas se pisaron el la mía haciendo sentirme atacada.
- Sabes, desde que llegué aquí me volví muy popular entre las chicas, es algo fastidioso.- dijo mirando a las chicas que se encontraban mirando.- En cambio a mi hermana le pasa con los chicos y de lo contrario, a ella le fascina ser observada y atendida.
Recordé que su hermana era muy hermosa y que era mas que obvio que eso sucedería.
Me inquiete un poco al saber que la popularidad de Yesung se vería afectada por andar conmigo.
- Tengo...tengo que hacer algo importante, nos vemos- me excuse girando en mis talones y siguiendo el paso cabizbaja como siempre.
- Adiós TN, nos vemos en casa- exclamo alto.
Las miradas de las chicas envidiosas no tardaron en posarse en mi.
El transcurso del día empeoro. Algunas chicas tumbaron mis libros, otras hicieron que tropiece y caiga, y otras simplemente me llamaban por groserías.
Me dirigía ya a recoger mis cosas para que por fin me pudiera devolver a mi silencioso hogar.
- Hey TN, te e buscado todo el día querida- Megan y su grupo soltó una risita, haciendo que me detuviera.- Porque te has ausentado el día de ayer, te extrañe- dijo con sarcasmo, tomando un mechón de mi cabello y pasándolo por sus dedos.- Y para colmo te llevaste a Leeteuk contigo.
Yo simplemente me mantenía con la cabeza gacha y con los bellos erizados del pánico que esta había plantado en mi desde ya tiempo.
- Pero a ti simplemente no te basta verdad? Un día con Leeteuk y ahora lo cambias por tu nueva presa Yesung. Sabia que eras una zorra.- dijo alzando mi rostro y empujando mi frente con su dedo índice fuertemente. Mis ojos comenzaron a aguarse.
- y-yo no...yo no intentaba nada, el solo es un amigo- dije en un susurro audible para ella y con los ojos llorosos.
- Cállate estupida, siempre intentando hacerte la víctima.- Dijo tomando mi babel lo y jalándolo fuertemente. Cerré mis ojos por el dolor que esto causó.
- Hey! Déjenla, ¿¡que piensan que están haciendo!?- dijo una voz masculina hacia nosotras.
- Yesung!- dije sorprendida. Las demás también lo estaban.
- Suéltenla!- ordenó el tomándome del brazo y jalándome hacia el. Comenzó a caminar hacia la puerta principal rápidamente, ahora sujetando mi mano. Se lo veía algo enojado.
De lo rápido que el caminaba  no pude seguirle bien el paso y caí de rodillas al piso.
- TN! ¿Estas bien?- pregunto exaltado por el suceso- Perdón fue mi culpa.- me dijo bajando hasta donde yo me encontraba el el suelo.
- Si... solo fueron unos raspones- dije viendo mi pantalón lascado y mis heridas en las rodillas como quien no quiere la cosa. Mi voz aun estaba algo entrecortada y mis ojos y nariz enrojecidos.
- Deja que te ayude-. Me tomo del brazo y lo puso en su hombro para que me sostuviera de el.
- G-gracias- murmure.
Me llevo a una banca cercana donde me invito a tomar asiento. El dijo que lo esperara, se fue unos momentos y lego de unos minutos lo vi volver corriendo con una funda en su mano.
- Que es eso?
- Fui a la farmacia a comprar vendas y desinfectante para tus heridas-. Dijo jadeando por lo agitado que estaba por haber corrido mucho, mientras sacaba lo que contenía la funda.
Procedió a levantar cuidadosamente mi pantalón y a pasar un algodón con desinfectante por mis heridas, lo cual causó un poco de dolor, luego tomo una gasa  y la puso encima de mi herida.
- Gracias Yesung.- dije mirando su rostro.
- No, fue mi culpa, perdona-. Dijo alzando la mirada y viéndome a los ojos.- Es mejor que volvamos pronto a casa.- se levanto de donde hace segundos estaba arrodillado curando mis heridas.
Asentí y me intente parar con algo de dificultad.
Vio como me tambalee por lo que procedió a sujetarme del hombro con su brazo derecho y con el izquierdo a sujetar mi otro brazo.
- Te ayudare esta bien?- asentí a su pregunta.
Seguimos caminando hacia lo que parecía ser su automóvil. Abrió la puerta de este afirmando que el flamante Camaro blanco era suyo.
- Sube, es mi auto- dijo con una sonrisa amigable.
Volví a asentir y tome asiento en el copiloto. Cerro mi puerta y rodeó el auto para subirse al asiento del piloto. Prendió el motor y arranco a una velocidad considerable. Estaba viendo a la ventana como comúnmente lo hago en el bus silenciosamente. Yesung rompió el silencio.
- Dime TN...¿porque te dejaste pegar por esas chicas? ¿Porque no te defendiste?- Pregunto haciendo que me tensará.
- Yo... yo solo ya me acostumbre a eso, ellas solo quería jugar conmigo nada mas-. Me excuse.
- Pues no parecían estar jugando, tu estabas llorando y ellas jalando tu cabello- izo una pausa con expresión seria- acaso siempre te molestan, o eres demasiado inocente como para notarlo?
- Bueno...yo ya me acostumbré.
- De que hablas, no puedes dejar que te traten así!
- Por Favor, no se lo cuentes a mi padre- dije preocupada.
- Acaso no escuchaste lo que te dije antes?.- dijo algo molesto.
- l-lo siento por no escucharte.
- Esta bien, hablaremos después de esto ok?, y no le diré nada a tu padre hasta ahora.
- Gracias Yesung.
Justo en ese momento su auto ya se estaba parqueando frente a mi casa. Qué rápido llegamos.
El se bajo de inmediato y rodeó el auto para abrirme la puerta. Baje del auto y seguí su paso.
- Gracias por haber tratado mis heridas y traerme- dije cabizbaja.
- Esta bien todo fue mi culpa.- sobo mi cabeza despeinando algunos cabellos, mientras me daba una sonrisa.
Asentí y evite mostrar mi cara algo sonrojada. No estaba acostumbrada a que un hombre fuera tan atento conmigo.
Al poner la vista en mi casa, mis ojos se abrieron al tope. Leeteuk se encontraba en la puerta mirando la escena con expresión seria y junto a el mi padre. Parecía que estaban hablando pero la presencia recién llegada de Yesung y yo los había interrumpido.
La mirada de Leeteuk se puso en mi. Sentí como mi corazón se emociono a volver a verlo como lo había prometido esta mañana.
- Buenas tardes señor- saludo Yesung a mi padre.
- buenas tardes hijo, gracias por traer a TN a casa- dijo con una cálida sonrisa.
- No fue de nada, surgió un accidente por mi culpa. - vi como Leeteuk se tensó al escuchar la palabra accidente.
- Esta bien, el me ayudo- dije mostrando mis rodillas curadas.
- que bien, justo ahora estábamos hablando Leeteuk y yo sobre ti.- dijo mi padre.
- Su hija es muy encantadora- hablo Leeteuk a mi padre. Me sonroje un poco.
- También lo creo, es muy agradable- dijo ahora Yesung con mirada desafiante. Note que Leeteuk se tensó mas.
- oh, están haciendo que mi hija se sonroje, también soy un padre sobre protector-. Mi padre río y me abrazo por el hombro.
- Bueno señor, yo vine hasta aquí porque quería pedirle formalmente a su hija en frente de usted algo muy importante. Yo amo mucho a su hija por lo tanto- se arrodilló sobre una de sus rodillas- quisiera pedir su mano.

Me quede congelada al lado de mi padre. Muchas emociones acumuladas se amontonaron en mi. El estaba pidiéndome matrimonio?!
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Hola \(^\\\^)\
Aquí otro capítulo, tarde pero aquí esta. Gracias por tomarse el tiempo de leer votar y comentar mi común historia de amor.
Ustedes son la razón por la que sigo lectoras.
También gracias a las que me dejaron mensajes sobre mi salud, me puse muy feliz al tener el Apollo de alguien en estos momentos.
A cada una de ustedes GRACIAS!