Amor ? ( leeteuk y tu ) [EDITANDO]

Propuesta ( parte 2)

Era una broma? Acaso el estaba bromeando? Nunca en mi vida había pensado que en mi deprimente y oscura vida la palabra matrimonio existiera.
Lo mire fijamente impactado aún dentro de mi. Estaba con las tripas revueltas o mejor dicho con las mariposas alocadas. Mi piel se erizo y mi mente quedo en blanco, y mi rostro tan solo mostraba mi grandísima sorpresa.
Volví la mirada a mi padre el parecía estar de la misma situación en la que yo me encontraba. Y Yesung, el estaba congelado con una expresión indescriptible, su mandíbula estaba tensa y sus ojos mostraban la incredulidad.
Volví a mirar a Leeteuk, el no quitaba sus chocolates ojos de los míos, su expresión era seria y asombrosamente sincera.
De pronto mi padre río intentando estabilizarse de la impresión.
- oh hijo, en verdad necesitamos hablar de esto en un lugar mas personal! Me has dejado pasmado, nunca había pensado que este momento llegaría tan rápido-. Mi padre dijo ofreciéndole la mano para que Leeteuk se levantara, el cual acepto.- Que tal si todos pasamos para hablarlo en la sala de estar?- pregunto
abriendo la puerta atrás suyo.

Mi padre entro, se notaba lo impresionado que le había dejado aquella propuesta. Como no? Si yo, su única hija de tan solo 17 años de edad, estaban pidiendo su mano en matrimonio un chico el cual parecía mafioso.
Yo quite la mirada de la de Leeteuk, y poniéndola rápidamente en la de Yesung para luego, apresuradamente entrar a la casa sin aun estar segura de lo que había pasado. ¿Sería una mala broma? Esperaba que de parte de Leeteuk no hubiera tal cosa que destruiría mis últimas ganas de amar a alguien y mis sentimientos.
Le seguí el paso a mi padre, el cual se dirigía a la sala de estar, sentía los pasos de Leeteuk y Yesung detrás mío.
Al ver que mi padre tomaba asiento en el mueble de cuero, corrí a tomar asiento a su lado.
Leeteuk se sentó en el mueble de al frente y Yesung sorpresivamente no se encontraba en la habitación.
- Dime hijo, porque has pedido la mano de mi hija tan apresuradamente? Me a sorprendido mucho.- hablo mi padre sorprendido pero con tono suave.
- El...esta bromeando padre, verdad Leeteuk?- dije con incredulidad. Era imposible que el este pidiendo esto, ni siquiera lo habíamos hablado antes, lo peor era que ni siquiera habíamos sido algo vigente desde que nos conocimos, solo eran besos desapercibidos y caricias. Recién estábamos comenzando algo. O eso creía yo.
El castaño chico me miro como si estuviera indignado, como si lo hubiera lastimado mi incredulidad.
- No, no estoy bromeando, es algo que cualquier hombre quiere hacer cuando ama a una mujer, casarse y estar a su lado por siempre- aparto su mirada de la mía y la puso en la de mi padre para saber cual era su respuesta.
Ante sus palabras el rosa claro subió a mis mejillas y aquellas palabras me habían dejado con el corazón en un puño al ver que estaba indignado por mi incredulidad hacia un tema tan importante para el.
- Me alegra saber que ames a mi hija como para elegirla para ser la acompañante de toda la vida, sin embargo creo que TN es muy joven para contraer matrimonio.- respondió mi padre a la pregunta de Leeteuk.
Pero este no se quedo con los brazos cruzados. Por segunda ves se arrodilló sobre una de sus rodillas y me miro a los ojos.
- Entonces déjeme el honor de formalmente poder salir con su hija y poder estar en una relación juntos.- el chico me miro intensificando su mirada a la mía y seguida una sonrisa se formó en su rostro.
No lo soporte y baje mis ojos de los suyos. Apostaba a que mi cara estaba de un tono rojizo. Mi corazón latía tan fuerte y rápido ese momento que podía escucharlo. Y al final no pude evitar curvar mis labios hacia arriba para darle una pequeña sonrisa tímida a Leeteuk en respuesta.
- Bueno por mi parte no me opondré a su noviazgo- dijo mi padre sonriendo al notar la química y electricidad que los dos soltábamos en el ambiente- Pero eso si, tienes que prometerme que la cuidaras de todo mal.
- No se preocupe, la cuidare con mi vida.- dijo Leeteuk
- Bueno, tengo que irme a trabajar, cualquier cosa TN llámame a mi numero de celular.
- dijo mi padre incorporándose de el sofá y dándome un beso en la cabeza.
- Adiós señor, pase una buena tarde.- se despidió Leeteuk cuando mi padre ya se iba, dejándonos solos en la sala.