Capítulo 34

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Después de esa noche cargada de sucesos inesperados, llegamos a nuestro hogar. Donghae se ofreció a ayudarme con Mindy, pero le dije que no se preocupara. Ya había hecho demasiado por las dos. Le agradecí mucho y le dije que le debía una. Se despidió con la mano hacia Mindy, y sorpresivamente se acercó a darme un beso en la mejilla. Lo tome como una despedida entre amigos y espere hasta que se marchara en su auto.
En silencio lleve a Mindy hacia el porche, entre en silencio y me dirigí a nuestra habitación con ella media consciente. La ayude a cambiarse y a quitarse el  maquillaje. Parecía que tenía un dolor de cabeza terrible por lo que la acosté en su cama e intente hacer que se durmiera.
— Por que lloras(?)— me pregunto con la voz ronca.
— No es nada, solo me afectó un poco saber lo que eran capaces de hacer los idiotas del instituto.

Ella me abrazo, susurró un gracias en mi oído y luego cayó rendida sobre el colchón.
Era cierto que estaba muy conmocionada por lo que casi cometen contra Mindy el grupo de críos ebrios de la fiesta, pero de igual forma, lo que me había golpeado de sorpresa fue el ver a Leeteuk ahí.
Ya habían sido casi dos semanas sin verle, y cuando lo hice solo me encontré con algo que destrozó mi corazón en pedazos.
Sabía que no tenía derecho en ponerme así. Pero el haber roto con el no fue voluntario con respecto a mi corazón y sentimientos. Ellos seguían atados a Leeteuk aunque no quisiera verlo ya.
Quizá nunca fuimos hechos uno para el otro, haber roto con el no significó mucho para el y para mí por lo visto, pues parecía que nos habíamos rendido muy fácilmente.
Una parte de mi quería tomar una navaja y pasarla silenciosamente sobre mis brazos y piernas, retroceder hacia mis mañas del pasado, lo que Leeteuk había logrado sanar. Pero otra parte de mi, la más fuerte y la que ganó, me decía que no lo hiciera, que luchará contra el dolor y enfrentará la realidad. Que fuera fuerte y racional, pues ya no solo Leeteuk era el que solía sostenerme, ahora su remplazo era el bebe que se estaba formando en mi vientre. No iba a dejar que muriera conmigo. Los dos viviríamos juntos.
Esa noche me di una ducha, y me acosté sin tener sueño aunque fuera de madrugada. Me había afectado mucho lo que había pasado esa noche, y hasta creía escuchar cosas, pues había oído el leve sonido de el motor de la motocicleta de Leeteuk fuera de mi ventana. Por curiosidad me levante, y me asomé a la ventana silenciosamente. Asome apenas mi cabeza y fue cuando escuche que aquel motor se alejaba, como si se cansara de esperar. Me asomé completamente y pude ver un atisbo de luz ya a la distancia. Sería el(?). No lo sabía, pero lo más probable era que no, yo ya no formaba parte de el y sería absurdo que me buscara luego de partirle el corazón y encontrar consuelo en otra. Podía ser cualquiera en motocicleta. Leeteuk no era el único que podía tener una de todos modos.
Tenía que encontrar la manera de distraerme de aquello. Las últimas semanas de el instituto se acercaban. Era ya mi último año y había sido en gran parte uno de los mejores, de hecho, el único mejor. Pero sin embargo, al final no pudo concluir como comenzó.
Me encargaría de estudiar como si mi vida dependiera de ello, si quería entrar a una universidad pública para de esa manera darle por lo menos una buena vida a mi hijo.
Volví a mi cama y me recosté echa un ovillo. Abrace mi barriga y de pronto, me quede dormida.
*******
Ya era sábado y hoy era el día en que me haría el primer chequeo de mi embarazo. Me levante con eso en la cabeza. Estaba muy emocionada y curiosa por conocer por primera ves a mi bebé.
Mindy se había despertado con una terrible jaqueca, y no lo pase por alto. Ya suficiente había hecho por mí hasta el momento, y ella necesitaba recuperarse luego de la noche anterior. Dejaría que descansara y que se tomará su tiempo.
A si que cuando intentó levantarse para arreglarse la mande a la cama.
— No dejaré que me acompañes, estás con una resaca terrible.— le dije sentándola en la cama y i tentando que se recueste.
— Pero es la primera revisión del bebé, y quiero acompañarte.— se quejó sin fuerzas. Parecía aún muy débil.

— No te preocupes, puedo manejarlo sola y estoy muy agradecida de que te hayas tomado el tiempo para sacar esta cita. Te traeré información de lo que me digan.
Ella dejo de insistir y solo me dio una sonrisa. Parecía más tranquila ahora.
Luego de dejarla recostada en la cama, y darle algo para el dolor me fui a alistar.
Salí apresurada pues se me había hecho algo tarde. Ya en la calle me dirigí a la parada de autobuses. Parecía que se habían retrasado algunas rutas y el que me llevaría al hospital para mi cita estaba entre uno de esos. Me senté en una banca cercana y saque mi celular para mirar la hora. Faltaba media hora y si el vehículo no se apresuraba llegaría con retraso. Guarde el móvil y comencé a idear algo para llegar a tiempo.
Había dejado pasar 10 minutos y ahora con solo 20 minutos para poder llegar me levante de la banca y comencé a correr.
Trotaba cuidadosamente en la calle evitando caer. Mire de nuevo la pantalla de mi celular cuando apenas iba por la mitad del camino.
Jadee al sentir un mano sujetarme el brazo. Mi celular resbaló de mis manos y mis pies derraparon. Cerré los ojos para escuchar el sonido de mi celular colisionar sobre el suelo. Luego de unos segundos seguí sin escuchar nada y abrí mis ojos para ver lo que sucedía.
Quien sea que me había detenido había logrado a agarrar mi teléfono celular en el aire con una de sus manos mientras la otra sujetaba mi cintura para evitar que me cayera al suelo.
Me separe de inmediato asustada y conmocionada. Prometí llegar sana y salva a la cita a Mindy pero parecía que la suerte no iba conmigo.
Alcé la mirada para ver a el actor de este suceso decidida a enfrentarme, sin embargo al ver la sonrisa emocionada de Donghae en su rostro mi expresión cambio de una seria a una confusa.

Amor ? ( leeteuk y tu ) [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora