Capítulo dieciocho

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Eran como las 11 de la noche y el Danielito estaba durmiendo en la pieza del Claudio. Estaban todos los de la selección en su departamento, con sus minas y volás. ¿Y yo? Sola po, si el Diego estaba tan enojao que no quiso ni venir, pero lo extrañaba. Los únicos solos éramos el Claudio, el Edu, el Alexis, el Vidal y yo.

"¡Hueón me encanta esa canción!" escuché al Alexis gritar mientras bailaba al ritmo de El Taxi.

"Conchetumare" dije y me puse a reír. Alexis culiao, me encantaba.

"¡Lo paró con una mano lo paró que yo la vi!" empezó a cantar el hueón y todos empezaron a seguirle el juego. Yo me reía no más, igual estaba pasándola bien, pero hueón, necesitaba al Diego.

El timbre sonó y yo fui a abrir la puerta porque caché que ninguno de los hueones estaba en sus 5 sentidos. No sé en qué momento, ni cómo, pero se las arreglaron pa comprar cerveza, vodka y ron. Abrí la puerta y había una tipa ahí parada, arreglándose la falda que no le cubría nada hueón, literalmente. Alcé una ceja.

¿Quién chucha es ésta, hueón?, me pregunté.

"¿Qué querí?" le dije mientras la miraba. Tenía que reconocer que la hueona era bonita. Ella me miró con el ceño fruncido.

"¿Qué ondi?" respondió. Mentira, mentira, mentira, gritó mi mente. Era una cuica culiá. "¿Está el Claudio?" preguntó ella. Yo alcé las cejas con sorpresa.

"Eh, mija, a esta hora ya no se aceptan visitas de fanáticas locas" sonreí con satisfacción.

Buena, culia. Me felicité.

En eso, la música se paró y noté que la gente estaba mirándonos. Puta que me carga cuando pasa esa hueá. Me giré y busqué al Claudio con la mirada. El hueón venía saliendo del baño, rascándose la nuca. Me miró y después miró a la cuica, paró en seco.

"Cata, ¿Qué hacís aquí?" le preguntó. Cata. Así que así se llamaba la culiá.

"Vine a verte, Claudito lindo" dijo. El Claudio se acercó a nosotras.

Situación culiá incómoda.

"A...¿verme?" parecía más sorprendido que la mierda po, qué decirles.

"Si, mi amor" respondió ella y se lanzó a sus brazos.

ALTO. ¿QUÉ?. Abrí los ojos con sorpresa. Le acababa de decir mi amor al Claudio. No sabía si llorar o reír por lo raro de la situación. Sabía que igual había pasado harto tiempo, pero no podía creer que el Claudio ya no sintiera nada por mí y que estuviera, más encima, con una cuica.

Tosí falsamente para llamar la atención de los dos.

"¿Quién es ésta?" escuché que le preguntó. Yo la miré enojá.

El Claudio me miró como suplicándome que no dijera nada pesado o desubicado. Pero puta, igual me da rabia que la culiá me trate de 'ésta' tan despectivamente. Yo por lo menos lo pensé pero no lo dije po.

"Ésta" me señalé. "tiene nombre. Me llamo Fran" sonreí. "Y para que lo sepas, ésta, es su ex" dije y me fui a tomar un vaso de vodka. Qué hueá más incómoda. El Lucas soltó una carcajada.

Me metí en la cocina y me serví un vaso con harto vodka y un poquito de jugo. Era, literalmente, vodka con jugo. Cuando salí con el vaso todos seguían callados.

"Oye, ya po" miré al resto de los cabros. "Si vinimos a celebrar po, no a mirar a un par de hueones comiéndose" me acerqué a la música y le puse play. No sé qué canción era, pero era como: peleamos, nos arreglamos nos mantenemos en esas pero nos amamos. Tan acorde a mi relación con el Diego hueón. Me puse a reír y saqué a bailar al Alexis. Las chiquillas hicieron lo mismo con sus pololos, como para pasar luego el momento culiao incómodo.

Captain of my Heart || Claudio BravoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora