Capítulo 4: La declaración.

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Durante dos semanas ese tipo de salidas en grupo se repitieron, pero a diferencua de la anterior, durante dos semanas salíamos a diario. Alexis, siempre era muy amable conmigo, y me fui enterando de varias cosas sobre él, cada vez conociéndolo más.
Pronto, hablábamos a diario y a todas horas, y yo sabía a la perfección a las horas que se conectaba.

La siguiente semana, Valery organizo una fiesta, en la que únicamente invitó a la "hermandad" y a los del equipo de natación, para ayudarme a acercarme más a Alexis, pero resultó que los del equipo tenían una competencia y no asistieron.

Cuando regresaron,  Alexis y yo ni si quiera nos saludábamos, pero creí que era porque después de su competencia, podía estar cansado, pero no le dí gran importancia, ya que sabía que era penoso, y que siempre estaba concentrado.
Aparte, las miradas seguían, así que decidí que era el momento perfecto para seguir el consejo de mi mejor amiga: declararle mis sentimientos.

Así que un lunes por la mañana, le mande un mensaje por Facebook, y nuestra conversación fue algo así:

Paulina Castro: Hola Ale!

Alexis Borjas: Hola Pau

Paulina Castro: Oye, ¿crees que nos podamos ver en el jardín de atrás del gimnasio después del entrenamiento?
Alexis Borjas: Si, claro. ¿A qué hora exacta nos vemos?

Paulina Castro: A las 8 pm.

Alexis Borjas: Ok, entonces en el jardín a las 8.

Paulina Castro: Si, adiós.

Alexis Borjas: Adiós.

Estaba bastante nerviosa por decirle eso así, que me preparé, apunte lo que tenía que decir en una hojita y luego tome la idea principal y lo hize sonar natural, escogí un conjunto bonito y fresco, me maquille lo básico y me deje el pelo suelto, recogiéndolo con un listón alrededor de mi cabeza.
Cuando quedé satisfecha con el resultado, me apliqué más perfume y salí del baño a las 7:58 pm.

En camino al jardín, estaba muy nerviosa, pues no sabía cual podría ser su reacción, y eso me aterraba, pero (como siempre) confié en mi amiga y seguí mi camino.

Cuando llegué el ya estaba ahí, traía una playera azul muy bonita y unas bermudas negras; al verme sonrió y yo le devolví la sonrisa.
-Hola- le dije controlando todos mis nervios-Hola- me respondió el y luego añadió -Te ves muy bonita, como siempre- terminó su frase mientras me miraba a los ojos y me dedicaba una cálida sonrisa.
No pude evitar sonrojarme, y bajé la vista. El sonrió y me dijo-Bien, ¿cual es el motivo de que estemos aquí?- me preguntó expectante -Si, a eso voy.- le dije sonriendo.En seguida el me miró ansioso incitándome a continuar. -Bueno,-dije yo- no me gusta estar dándole vueltas, así que seré directa: quiero que sepas que me atraes, tienes algo que me gusta, y desde que me empezaste a ver me empezaste a enamorar, y me enacanta que seas tan indiscreto al verme ... -hize una breve pausa y luego continué- y pues, me gustas.

Alexis me miró confundido.
A pesar de su reacción, yo sentía que me había quitado un peso de ensima.
Pero después de mirar al suelo me dedicó una débil sonrisa y me dijo -Me tengo que ir, antes de que vengan a buscarme, pero quiero discutir esto-dijo aún sacado de onda, pero después continuó- así que, ¿hablamos por facebook?- yo asentí ligeramente y miré al cielo, sin regresar la vista a él, que después de quedarse contemplandome unos segundos, se marchó.

Al principio yo había mirado al cielo como excusa para poder evitar su mirada, pero después, me quedé viendolo por varios largos minutos con sumo interés, hasta que me canse de estar parada y decidí acostarme en el pasto,  y así me quedé dormida pacíficamente, y perdida en mis pensamientos.

Así estuve como 20 minutos hasta que un sonido me despertó, era un mensaje de Alexis:

Alexis Borjas: Hola.

Rápidamente me despabilé, me enderecé, tomé el celular y le contesté.

Paulina Castro: Hola.

Alexis Borjas: Eres muy valiente Pau.

Paulina Castro:¿Tu crees? ¿ Y como porque? Porque honestamente, yo creo que en estos momentos "valiente" no sería la palabra.

Alexis Borjas: Claro que si creo que eres valiente, porque hiciste lo que yo debí de haber hecho desde que me empezaste a gustar.

Paulina Castro: Espera... ¿qué? .... ¿a gustar? eso significa que... ¿ te gusto?

Alexis Borjas: Pau, eres una chava lindísima, y no te quiero lastimar.

Paulina Castro: Eso es un no. Pero entonces, ¿porqué el comentario?

3 minutos después....

Alexis Borjas: Porque me llegaste a gustar. Pero creí que nunca iba a pasar nada entre nosotros y que obviamente no tenia oportunidad, y te estuve tratando imposiblemente de superar, y entonces, ahora me gusta alguien más, pero luego empezaron las salidas y ahora que me declaras esto yo ...

Paulina Castro: ¿Hace cuanto que no ves a la que te gusta?

Alexis Borjas: Hace dos semanas.

Paulina Castro: En la competencia ¿no?

Alexis Borjas: Si.

Paulina Castro: ¿cómo se llama?

Alexis Borjas: Pau, no la conoces.

Paulina Castro: ¿cómo se llama?

Alexis Borjas: Ana.

✔✔Leido.

Alexis Borjas: Pau, perdón si te lastimé, esque estoy confundido.

Paulina Castro: ¿Confundido?;  ¿sobre qué?

Alexis Borjas: Sobre con quién estar.

Paulina Castro: ¿Entre quien y quien estas?

Alexis Borjas: Entre Ana y tú.

Paulina Castro: Es tu decisión, y sea cual sea, siempre contarás conmigo como tu amiga y consejera.

En su momento, creí que esas eran las palabras más difíciles que había tenido que decir.

Alexis Borjas: Gracias Pau, hablamos mañana.

Paulina Castro: Adiós. Descansa.

Alexis Borjas: Igual.

Ví su último mensaje a las 8:50 pm y me quedé tranquila, pues sabía que de ahí surgiría algo. Apagué el teléfono, me levanté y me dirijí a la entrada del deportivo, donde esperé a mi hermano mayor que después de cinco minutos, llegó por mí.

En cuanto ví su camioneta roja, me levanté , tomé mis cosas y para cuando volteé, Andrés, mi hermano, ya estaba afuera del coche abriendo la cajuela para que le pasara mi maleta y la guardara. En cuanto me acerqué, me miró, sonrió y me saludó- ¡Hola hermanita!- me dijo y me dió un rápido beso y abrazo - ¿cómo te fue?- le sonreí y le dije - Bien, Gracias Andrew- le dije usando el apodo que le había puesto desde pequeña. Luego mi hermano se quedó pensando , subió la vista y después continuó- Rápido, súbete que te tengo que contar algo- me dijo sonriendo y se encamino a la puerta del piloto.
Yo obedientemente me subí en el asiento del copiloto y me abroché el cinturón.
Esperé a que mi hermano se subiera al coche, arrancó el motor y salimos de la entrada del deportivo. Cuando ya llevaba un minuto de estar manejando, comenzó- Hermanita querida- me dijo radiante, a lo cual yo contesté - Si hermanito mío-
El sonrió y continuó- Dos cosas, la primera es que te tengo un regalo sorpresa esperando en tu cuarto, y la segunda es que tienes una nueva cuñada- me dijo expectante -¿¡QUÉ!?- dije emocionada -¿¡Natalie ya es tu novia!?'- -¡Si hermanita! continuó el
Emocionado -¡Otravez de rompecorazones Andrecito!- le dije en plan juguetón -Si hermanita, desde el día que nací, pero bueno tu cuñadita nos está esperando en casa, así que me alegra que estes arregladita porque hay una cena esperándonos;  y por cierto, ¿cómo fue tu declaración?- y después de relatarle a mi hermano como me había ido, me dijo- no te preocupes sis, todo va a estar bien, vas a ver que de ahí sale algo.-

En la alberca. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora