Capitulo 24.

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Como si fuera un sueño el despertar lejos de Londres, todo se había esfumado en un par de días.

Llegamos a Venecia al medio día, buscando un buen hotel, quedándonos en uno muy cercano a la Piazza San Marcos, con vista al mar Adriático, y a una serie de yates y góndolas. Dormimos hasta lo que pareció ser la noche. En punto de las siete nos levantamos para dar un paseo por la piazza.

Algunas fans pidieron un par de fotografías con Niall, pero todo sucedía espectacularmente.

Niall fue hasta un puesto a mitad de la plaza y compro una máscara de la peste negra, seguramente conocida mundialmente por su "pico" alargado y negro que simulaba ser de un ave, que en aquel entonces de la Edad Media, servía para los médicos, las máscaras mantenían su nariz lo más lejos posible de los infectados de la peste.

Niall se la puso y corrió a asustar algunas personas, y luego se quitaba la máscara. Obviamente todos disolvían su enojo al ver a un famoso pasando un rato con ellos. Los turistas nos rodeaban y fotografiaban, pero nos daba igual.

Cerca de las nueve con treinta regresamos al hotel.

Si. Cogimos.

Y fue muy agradable.

El golpeteo de sus caderas contra las mías paso a ser una sensación digna del paraíso. Sus labios húmedos pasando por mi cuello me volvían loca. Y su gran espalda probablemente estaba ahora completamente roja de pasar mis uñas a través de ella ayer.

Al despertar al dia siguiente -o sea hoy-, un bello martes en donde lo único que escuchábamos era el sonido del mar y la respiración.

Me beso.

Larga y lentamente, hasta que la señorita que nos llevó el desayuno entro en la habitación.

Pero al medio día desaparecio. Y justo entonces encendí la televisión en la habitación y anunciaban la llegada de la gran nueva estrella Elena Brown a Venecia, su primera visita.

Elena y Niall en la ciudad.

Tome mi bolsa molesta y entre a maquillarme al baño. No me voy a quedar en la habitación mientras él se la pasa genial en un viaje que yo pague.

Mire hacia abajo a mi iPhone una vez que mi maquillaje estuvo listo. El concierto de Annalisa estaba a unas horas y pocos kilómetros de aquí, y seguramente me dejaran entrar con tan poca anticipación.

[...]

-¿Por qué verga desapareciste? -Niall reclamo.

Deje mis bolsas en el suelo de la habitación mientras caminaba a la cama para sentarme un poco. Niall daba vueltas molesto.

-¿Por qué carajos lo hiciste? ¿No pensabas decirme nunca?

¿Decirle?

No.

Elena no puede saber.

Solo Sophie, Shawn y yo sabemos.

Él no puede saber el secreto aun.

-¿A... a que te refieres? -pregunte y por un momento mi voz tembló.

-¿Cómo que a qué? ¡Te fuiste y casi te mando a buscar por toda Italia! Si no es por Instagram pensé que te había perdido en algún canal.

Respire de nuevo y mi molestia desapareció momentáneamente. Ni Sophie había hablado -aunque tampoco lo convenía mucho que digamos- y podía confiar en Shawn.

¿Desconfié de Shawn Mendes? Merezco el infierno.

-¡¿Yo?! Tú te fuiste con Elena antes de que despertara. ¿Sabes cómo se siente recordar un increíble e inolvidable sexo por-la-puerta-trasera y que tu acompañante no esté a tu lado cuando despiertas?

Lies. -Niall H.-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora