Capitulo 12.

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Terminando una pequeña ducha en la casa de Niall, salí del baño, para encontrarlo en la cama con su guitarra en su regazo.

¿Por qué carajos me arriesgue a llevarlo a casa? Sabía de antemano que Charles tenía que estar ahí y aun así aposte por ir.

Que estúpida.

Camine lentamente hasta sentarme en el borde de la cama. El levanto la mirada y me sonrió.

-Te dejo de la verga

-Estoy segura de que una verga no luce tan bien como yo.

Niall rio y comenzó a negar con la cabeza. Tomo mi pie y me jalo a través de la cama hasta dejarme en el centro, frente a él, y paso sus dedos por mi mejilla amoratada.

-La mía luce mejor que tú, princesa

-No soy una princesa

-¿En verdad, Jenna? Intento ser dulce y haces eso, joder, ni Hitler te aguantaba, en fin, creo que me debes explicaciones.

Rodé los ojos ante el estúpido intento de broma. Maldito niño curioso.

-¿Qué quieres saber? –pregunte de mala gana.

El me miro y me agache. Mordí mi labio e instantáneamente lo solté. Idiota.

-Quiero saber porque justo cuando estaban por darme mi merecida mamada, un idiota te golpeo hasta sacar la vida de ti, y, por que carajos sigues mordiéndote el labio cuando sabes que lo tienes abierto, maldita sea.

Permanecí con la mirada baja, pensando en lo que estaba a punto de hacer. ¿Desde cuándo Niall Horan tenía que saber de mi vida? Esto está fuera del plan. Muy por fuera del plan. Nadie sabe de esto ¿por qué él debe de saberlo?

-Charles es mi primo.

Lo mire y él tenía una expresión blanca, si ningún rastro de emoción en él. Si permanece de esta manera toda la noche, seguramente no aguantare y saldré a dormir debajo de unas cajas de cartón hoy.

-Charles tiene un trastorno de personalidad. El no controla lo que su mente produce. Es muy agresivo, mi tía decidió nunca tratar su trastorno porque lo consideraba una bendición. El problema fue cuando comencé a vivir con ellos.

-Pausa –Niall hablo por fin-. ¿Por qué viviste con ellos?

-Mis padres murieron cuando tenía 8 años. Estuvieron en un accidente automovilístico en una autopista nevada.

-Tan cliché –bufo sin humor. Lo mire mal, era la primera persona a la que le decía y el, maldito. Lo mire casi llorando y él se quedó callado de vuelta.-. Lo siento.

Esta vez fui yo la que bufe y me gire. Este pedazo de mierda que es Niall Horan.

-Vamos Mitchells, no quería decir eso, por favor –se acercó a mi hombro y me sacudió dándome una de sus sonrisas-... Jenna.

Respire de una manera profunda y me gire. Mi labio escocia de nuevo por alguna extraña razón y volvió a hacerlo cuando lo presione formando una línea con mi boca.

-Charles tiene trastorno mental y cree que es mi pareja sentimental –me puse de pie y mire hacia abajo, a mi camiseta manchada de sangre. La planche con las manos y lo volví a mirar-. Ahora, tengo que ir al hotel, mis cosas están allá y no quiero regresar a casa.

El rodo los ojos y se levantó metiéndose en su armario de puerta doble, el que, seguramente, media el doble de su habitación.

-Sobre eso Mitchells, los chicos vienen para acá con tus cosas y la cuenta esta pagada. –Su voz apenas era audible y aun así ya quería partirle el culo por lo que dijo.

Lies. -Niall H.-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora