Por el placer de estar contigo

710 16 1
                                    

Capitulo 35

- Está claro que tienes un mal concepto de mí.

- ¿Quién es?

- ¿Ahora me preguntas tú a mí cosas que no te incumben?

- Justin...

- ___...

- ¿Es verdad eso de que tienes novia? Dime que no.

- No.

- ¡No me lo digas porque te lo pido!

- No tengo novia, es la realidad. Solo he intentado evitarte -sonrió simpático

- ¿Y entonces...?

- Quiero alejarme de ti a toda costa. No me traes nada bueno.

- Oh gracias -dijo irónica

- No sé qué hacer ___. ¿Sabías que llevo desde que tuve aquel error en la cena sin acostarme con nadie?

- Enhorabuena, ¿Y a mí qué?

Justin le cogió la mano y la acercó a él.

- Que estoy opositando para que me des una oportunidad.

- Ajá.

- Yo quiero solo contigo.

- ¿Por qué he de creerte?

- Porque alguna vez tendré que decir la verdad ¿No?

- No me sirve eso.

- Estoy perdiendo el encanto. ¿Sabías que ya no me persiguen tanto como antes? Creo que soy yo... no pongo tanto empeño ya. Porque solo puedo tenerte a ti en la cabeza. Porque deseo que alguna vez vuelvas aquí. La nueva chica que tengo ahora no me gusta. No me conoce lo suficiente. En cambio tú sí.

- Podrías intentarlo con ella.

- ¿No has oído que solamente me apeteces tú? Eres como la droga... al principio solo es por probar. La segunda vez por repetirlo nada más, la tercera le vas cogiendo gusto... y en la cuarta no puedes parar.

- Yo sé que la voy a cag*ar. Pero ... me gustas -rió- solo me gustas.

- Y tú a mí.

- Estoy cometiendo un error.

- No importa, ven aquí conmigo... Cometamos el error juntos... -la besó

__ se lo pensó mejor y se apartó. Eso no acabaría bien.

- No espera, no...

- ___, creo que te quiero.

- Ya me lo dijiste anoche y resultó ser mentira.

- No es mentira.

- ¡No me mientas joder! ¿No ves que me duelen las cosas?

- ¡Que no te miento! -dijo soltando un grito que asustó a ___- No te miento... -se calmó- Te empecé a coger cariño. No sé ni cómo, ni en qué momento. Pero ... creo que es así.

___ no terminaba de creerlo. Es más, no le creyó, pero la necesidad de hacerlo hizo que tomara una rápida decisión. Puso sus manos en el pecho de Justin le agarró de la camiseta. Miró sus ojos...

- Si es así deberías jurarme que mientras estés conmigo no mirarás a nadie más.

- Te lo juro.

- Por Dios.

- Te lo juro por Dios

No se contuvo y le dedicó una tierna sonrisa que él le devolvió

- ¿Me besas? Por favor -pidió Justin calmado, aparentemente feliz

- No me lo pidas por favor ... -enmarcó su cara con las manos y le dio un beso demasiado inocente que él se encargó de volver árido y salvaje- Auu Justin... -soltó una pequeña risita

- ¿Me vas a esperar hasta que salga? En media hora he quedado con un productor, ¿Me quieres acompañar?

- ¿No me abandonarás no?

- No, te prometo que no más.

- En ese caso acepto... pero solo si después damos una vuelta. ¿Has visto el sol que hace ahí fuera?

- Hablando de sol... Mañana me voy a Los Angeles. Me quedaré allí a vivir por un largo tiempo...

- ¿Y me vas a dejar sola? Justin, no te puedes ir.

- Es que acabo de pensar que podrías venir conmigo.

- Yo no puedo, no soy tu asistente ya, y tengo trabajo.

- No te lo pido como algo profesional. Esto es personal... no necesitas trabajar. Todo lo que me pidas te lo voy a comprar. No necesitas casa, tienes la mía, no tienes más que esperarme en casa, o irte de compras, bañarte en la piscina, o pasar el día en la playa... En Santa Monica se vive bien. Además, tú lo sabes. Ya has estado más veces.

- Pero eso es ser una mantenida.

- Venga, ___ , no me importa. Tengo dinero de sobra para regalar. ¿Crees que me molestará darte 1000$ para que te compres lo que te apetezca?

- Mmmmm no sé. Me siento como tu puta, sinceramente.

Justin la miró excéptico. ¿Su puta? Rió. No lo era , y tampoco lo sería.

- Las putas se venden por sexo. Tú no. Digamos que te compro sin que tú te vendas y no compro sexo

- Que enrevesado eres..

- No, espera, yo no puedo comprarte. Resulta que 'Por el placer de estar contigo' no se puede pagar..

- ¿Qué placer? Porque hay muchos. Está el espiritual, el carnal... el placer de comer helado...de ... chocolate -movió las cejas de manera muy cómica

- Todos en conjunto -le apartó el pelo colocándolo todo hacia un lado y se inclinó para besarla- ¿Me vas a dejar ya recoger las cosas por las que he venido?

- Eres tú.

- Si, soy yo... ¿Sabías que me empiezo a poner duro? Impídemelo o sino llegaré tarde a mi cita.

- Para... -lo apartó- Ya.

- Gracias. Pero cuando tenga un rato libre iré por ti.

- Suena a amenaza..

- Es un plan. No me has dicho si vienes.

- Tengo que pensarlo.. no puedo dejarlo todo a medias e irme contigo.

- Deberías maquillarte así más a menudo. Pareces más madura...

- Y como a ti te gustan las de cuarenta...

- Que haya pasado una vez no significa que siempre haya sido así. Todas han estado entre los 20 y 25 años.

- Dime quiénes son que las mato

Se enganchó en ella y fueron caminando hasta la puerta besándose. Nunca había vivido algo tan intenso. Aquella sensación de explosión en el pecho que le había referido Ryan surgió de repente.

⇨⇨⇨⇨⇨⇨⇨⇨⇨⇨⇨⇨⇨⇨⇨⇨⇨
HOLA☺Se que tarde ∞ de años en publicar pero creí que no les gustaba la novela pero una personita me escribió que la siguiera y pues aquí están un par de capítulos Y también les digo que estaré publicando lo antes posible por que mi MBook se arruino y de mi teléfono y tableta se me hace difícil publicarles. Besos ♥

Por el placer de estar contigo |J.B|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora