Que haríamos el amor...

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Capitulo 41 Maraton 3/5

- ¡___ joder! ¿Qué ******* te está pasando en la cabeza? Ahora no me puedes culpar de nada . Eres tú la que se comporta como una desquiciada. Te he dicho que podremos salir adelante. Parecemos diferentes pero en el fondo somos iguales.

- Justin... -dijo con un tono apagado- es que no sé cómo va a acabar esto. Y no es por ti, es por los demás.

- ¿Los demás que pintan aquí? - Justin se sentó en el brazo del sillón

- Me refiero a todas esas chicas... Yo sé que tú no las buscas, pero ellas a ti sí. Y cuando alguien te busca, te encuentra... No me digas nada sobre la confianza. A ti cuando te tocan el tema del sexo no hay quien te pare.

- Si no estuviera preparado para estar contigo no habría dicho nada de lo que siento. Yo no sé cómo lo verás tú, pero a mi me cuesta mucho decir eso. Tal vez siempre haya existido esa cosa entre nosotros aunque yo no me haya dado cuenta. Quizá peleábamos porque nos gustábamos o... no sé. Yo voy a poner todo de mi parte para que no me dejes...

Ella sonrió conforme. Aquellas palabras le habían llegado.

- Y espero que tú también pongas de tu parte para que no tenga que dejarte yo.

- Claro que no imb*écil. Si desde que me propusiste eso , no paré de pensar en ti. Y ya imagínate cuando lo hicimos...

- Fue maravilloso eh.

- Si.

- Ven aquí, porfa. ¿Estás viendo cómo me estoy volviendo de pegajoso?

Le rodeó con sus brazos la cintura y le besó la barriga. Ella puso sus manos sobre su pelo.

- No hace tanto frío como creías.

- Oh no, ahora mismo estoy estupendamente. Lo malo es que la temperatura comience a subir... y a subir ... y nos derritamos.

- Me dijiste una cosa que has de cumplir.

- ¿Qué cosa?

- Que haríamos el amor...

- Y lo haremos. Quiero probar qué se siente al hacerlo despacio.

- Es mejor.

- No lo creo. Nada como tus gritos salvajes -rió

- La sutileza no se puede comparar con la brusquedad Biebs. Y si hay amor ...

- Yo no he dicho nunca que hubiera amor.

- ¿Ah no? ¿Entonces? Ya sé, lo habrá. Te juro que lo habrá.

- Me estás manipulando emocionalmente.

__ acercó su cara a la de él y le dio un beso con mordisco incluido. Era tan bueno todo aquello que jamás se lo hubieran imaginado ninguno de los dos

- Tu jodido olor me pone caliente cada vez que llega a mi nariz.

- ¿Solo mi jodido olor?

- Y más cosas.

- Deberíamos no acercarnos mucho a ese camino. Apenas son las once ...

- Qué mejor hora para intercambiar fluidos.

- ¡Justin! -empezó a reír.

- ¿Acaso es mentira lo que he dicho? -ella negó- ¿Entonces?

Metió su mano por debajo de la camiseta de ___ y la subió hasta que, en la espalda, consiguió encontrar el enganche del sujetador. Lo desabrochó.

- ¿No estás más cómoda?

*Por la mañana*

- Buenos días muñeca -dijo Justin con la cabeza aún en la almohada- ¿Has dormido bien? -ella asintió bostezando y él la llenó de besos en el cuello- Aún nos queda una horita para salir... -cogió las sábanas y el edredón y tiró para taparse más- ¿Te dejo dormir o ...? -ella sonrió- ¿Lo segundo? -se metió bajo las sábanas

- Biebs ... -susurró con ganas de reír- Te vas a asfixiar ahí.

__ empezó a experimentar las sensaciones que se producían cuando Justin jugaba con su cuerpo. Especialmente con una parte.

- ¡Ay! Justin.. -dijo riendo

Él continuaba adelante sin reparar lo más mínimo en las quejas de su chica. Depositaba besos pequeños sobre su vientre, y bajaba. Asomó la cabeza durante unos segundos para ver su cara.

- Estás muy guapa con la cara sin lavar. Y con los ojos aún hinchados.

- Y tú estás muy obsesionado.

- Fuiste tú la que eligió la segunda parte. No todos los días despiertas con un hombre que te haga el amor nada más amanecer.

- Ya fue suficiente lo de anoche...

- Para mí nunca hay suficiente...

Volvió a esconderse bajo las sábanas de invierno y continuó explorando lugares que ya casi conocía de memoria. Jugó con su lengua entre sus piernas, mientras que con la mano derecha descubierta buscaba su boca.

- ¿Qué buscas cielo? -preguntó ella muerta de risa a la vez que de placer

- Tu boca...

- Ohm.. ya sé qué quieres

__ metió el dedo de Justin en su boca. Éste sonrió.

- Me gusta tu humedad sea donde sea... -confesó jadeando- Soy un adicto al sexo -soltó una risa- tu sexo.

- Tú me vas a volver a mi adicta.

- Es que esto cada vez es mejor nena... -Justin sacó la cabeza de nuevo pero esta vez para acomodarse- Abre esas piernas cariño ... más aún -ella obedeció- Oh si... -se apoyó con las dos manos en la cama, una a cada lado de la cabeza de __ y lo hizo- Ya estoy dentro otra vez -embistió la primera vez despacio- Me duele ...

- Desahógate conmigo. Hazlo como quieras.

Ella parecía perderse en sus ojos marrones. Esa mirada tan intensa amenazaba con traspasarla en cualquier momento. Y sus brazos. Sus brazos tensos, con una venas que podrían estallar si seguía en esa posición.

Guiada por las múltiples sensaciones que vivía y por las palabras de Justin, ella ayudó levantando sus caderas.

- Así... -besó su boca, proporcionandole algún que otro mordisco

- El cuello..

Le hizo caso y fue directo a su cuello. Allí sí que le mordió de verdad. __ terminó retorciéndose de placer bajo su cuerpo. Él sin embargo no llegó.

- Nos quedan... 40 minutos. Hay que ir levantándose.

- Justin espera... -dijo __ tras recuperarse- no has llegado. Te prometo... que haré que llegues la próxima vez.

- No es necesario..

- Vas a ... saber que mi boca sirve para muchas cosas..

- Ya lo sé.

- Te queda algo por hacer que nunca hicimos.. y quiero complacerte -le robó un beso fuerte- Fiera...

Justin la tumbó de nuevo.

- Me tientas a follarte otra vez. Pero no podemos. Ya tendremos tiempo.


Por el placer de estar contigo |J.B|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora