Capítulo XII

3.5K 201 10
                                    

No podía dormir. No lograba dejar de pensar en el beso con Jac, es decir. ¿Quién lo haría? Fue hermoso. Solo pensaba en sus suaves labios y quería morir por haberme ido así como una cobarde. Pero es que, oigan, yo deje clarísimo desde un comienzo que no quiero enamorarme de nadie.

Mucho menos de Jacob. Esta bien, resulta que ahora se comporta de una forma muy dulce y bonita conmigo, pero es el típico chico mujeriego que seguro tiene a una para cada noche. Y en realidad no se para que digo ''Seguro'' porque se que claramente es así. 

No quiero ser una más en su lista. Pero tampoco quiero algo serio con el. Es decir, me iré de la ciudad en un tiempo. No estoy muy segura de cuanto falta pero tampoco querría jugar con sus sentimientos haciéndole creer que estaría con el y luego marcharme.

¿Qué estoy diciendo? ¿Cómo puedo siquiera pensar en el de esa forma? Es obvio que se esta divirtiendo con todo este asunto, de otra forma me preocuparía. El no puede enamorarse de mí. No puede salvarme. Nadie puede hacerlo. Solo yo me salvare mi propio trasero el día que me vaya de esta ciudad.

Porque no es como si una persona necesitara de otra para ser feliz. Yo quiero ser feliz sola. ¿Es algo tan dificil de conseguir?

La felicidad es algo utópico para mi. Lastimosamente, esa es la realidad es como algo inalcanzable. Que mientras mas lejos estoy mas la veo, y a medida que me acerco se va alejando.

Es como el horizonte...

''Ella está en el horizonte, Me acerco dos pasos, ella se aleja dos pasos. Camino diez pasos y el horizonte se corre diez pasos más allá. Por mucho que yo camine y camine, nunca la alcanzaré.''

Desde que leí esa frase no pude sentirme mas identificada. Cuando me voy lejos, a fotografiar hermosos paisajes me siento bien, pero nunca feliz por que se que tengo que volver. Y luego, cuando vuelvo, siento nuevamente muy lejos esa sensación de bienestar. Porque me siento bien. Pero nunca llego a estar sumamente feliz.

Siempre choco con la realidad dandome cuenta que solo yendome puedo ser feliz. Que solo partiendo de esta ciudad, voy a alcanzar esa felicidad. Y que mi sueño de serlo, dejaría de ser una utopía. Dejaría de ser algo inalcanzable para convertirse en algo real, en algo a lo que puedo llegar. Un punto de llegada.

Mi teléfono suena indicando que tengo un mensaje, alejándome de cualquiera de mis pensamientos y me remuevo en la cama hasta alcanzarlo a mi mesita de noche.

Mi corazon comienza a latir rapidamente al leer el nombre del remitente del mensaje de texto.

Jacob:

Princesa, perdóname. Fue un impulso. Prometí cuidarte, no aprovecharme de ti. Es que estabas tan hermosa que no pude contenerme. Lo siento, soy un idiota ¿Me perdonas?

Inconscientemente, de mi salió un ''ooooow'' y quise abofetear a mi consciencia por ser tan imbécil. Pero es que a ver, no es como si no tuviera sentimientos ¿Ok? y si Jacob viene y me dice eso, pues claro que me voy a derretir como un helado.

Mmmm helado.

Yo:

No hay problema Jacob. Hagamos como que aquí no ha pasado nada. Fue un impulso, lo entiendo :)

Al cabo de unos siete minutos. Y no, no es que los haya contado. Solo es coincidencia, recibí su respuesta.

Mentira, contaste hasta los segundos, hermana. 

Jesús. ¿No puedes simplemente callarte?

De acuerdo, tu ganas. Lo siento.

Y luego de abofetear finalmente a mi consciencia leo el maldito mensaje.

Jacob:

Oye. Que haya sido un impulso no quiere decir que lo olvidare o que este arrepentido, preciosa. Estoy mas que seguro que a ti te ha gustado tanto como a mi, lo repetiria mil veces mas.

Dios. No pude evitar ruborizarme como un maldito tomate. Estúpido Jacob y estúpidas palabras perfectas en el maldito momento indicado.

Yo:

No te pases Jacob, lo arruinas. Iré a dormir, que descanses. Adiós.

Y claramente no podía dormir, pero eso era mejor que seguir hablando con Jacob y sonreirle al teléfono como una idiota enamorada. Porque no, era algo totalmente absurdo sentirme asi. No es como si Jacob sintiera algo por mi. Lo conocía lo suficiente para saber que el nunca había querido a una muchacha y tenía mas que claro que yo no iba a ser la excepción. 

Aun así, de todas formas es como si mi puta consciencia no comprendiera lo que yo le digo. Ya deja de ser tan idiota y entiéndeme maldita hija de perra, no me gusta. Deja hacer que me comporte como si lo hiciera porque no estás en lo correcto. Estas completamente equivocada.

Oye, no me digas que me calle si después me hablas, maldita imbécil.

Y de repente algo, o mejor dicho, alguien, interrumpió la acalorada discusión con mi estúpida consciencia

*Llamada entrante de Jacob*

¿Qué carajos? No dudé en contestarle. Aunque ni siquiera se porque lo hice.

Em, hola preciosa solo llamaba para desearte dulces sueños ya sabes, quería escuchar tu voz antes de dormir...—ríe y yo sonrío como una idiota —Bien, eso sonó muy cursi

—Jacob, ya basta, eres...—dije pero el me interrumpió. 

—¿Qué? Apuesto a que te has sonrojado —efectivamente si, pero no iba a darle el gusto de decirle que si. Opté por reirme como una tonta —Tomaré eso como un sí, princesa.

—Bien Jacob, hasta mañana. Que descanses —dije con ganas de que realmente terminara esa llamada incomoda.

Espera has dicho hasta mañana, eso quiere decir que... ¿Nos veremos mañana? —oh por dios el realmente estaba usando su voz sensual para intentar que caiga

—No, no he dicho eso, solo es una forma de decir. Adiós —le respondí alargando la letra ''O''

De acuerdo, me ire a dormir muy triste por eso. Adiós preciosa. Tu me gustas. No, tu me encantas ¿Lo sabes verdad? —dijo y antes de se me ocurriera algo que responderle corté la llamada.

Si, lo hice. Soy una maldita cobarde y merezco que me quemen en la hoguera por eso. Es solo que no supe como reaccionar, es decir. Nunca se como reaccionar con Jacob.

 Definitivamente me gusta. Si, me encanta y eso me convierte en una maldita bipolar, porque probablemente dentro de tres segundos diga que no me gusta. 

Pero no puedo tener nada con el. Absolutamente nada.




[CORREGIDO]

VictoriaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora