Si, de acuerdo. Comenzaré diciendo que no pude resistirme porque me hizo cara de niña berrinchuda y me convenció porque yo era una estúpida manipulable ¿A quién me refiero con esto? Bien, se los diré. ¿Recuerdan que Lis me rogó que fuera su modelo para su tarea? De acuerdo, termine aceptando.
Así que estoy yendo a su casa. Si, lo se. Probablemente vea a Jacob, pero es que bueno. Es su hermanita y es obvio que existe esa posibilidad. De todas formas debo decirle que olvidemos lo de el otro día ya que solo fue un error.
En fin, cuando llego a su casa me quedo como siempre mirándola como enamorada. Definitivamente es como una casa de sueños. Es muy hermosa con un gran parque delante, lleno de bellisimas flores, que por cierto si fuera una niñita ya hubiese cortado para hacer un ramito, pero ahora solo pienso en fotografiar cada una de ellas.
Tras tocar el timbre y esperar unos minutos, del otro lado de la puerta me encuentro con una amigable Susan, la mamá de los chicos que me recibe con un cariñoso abrazo y me invita a pasar.
Es una mujer que no debe tener mas de unos cuarenta y tantos pero luce de menos. Creo que Lis es una versión mas joven de ella, realmente el parecido es mucho. En cambio Jacob, es la mezcla justa de ella y de Robert, esposo y padre de los chicos. Oh, pero que importa, ¿Por qué estoy hablando de el? Estúpida.
Cuando entramos a la casa con Susan nos dirigimos a la espaciosa cocina y nos encontramos con Lis.
—Hola pequeña —la saludé con mi mano mientras me sente en la silla enfrentada a ella —¿Que tal?
—Hola Vic, luces preciosa para las fotos —dios, quería matarla por haber hecho esto. Ella rió y yo la fulminé con la mirada —Muy bien ¿Y tu?
Al cabo de un rato comenzamos a hablar tonteras sin sentido, y a reír como idiotas mientras escuchábamos música pero una apurada Susan nos interrumpió.
—Lis, tesoro, me iré a trabajar —dijo mientras le daba un beso en la mejilla —Les dejo galletas en el refrigerador y procuren que tu hermano no haga ninguna locura mientras no estoy, sabes que tu padre llegara mañana y yo volveré tarde hoy —dijo mientras se acercaba y besaba mi mejilla también —Adiós Vic cariño, quedas a cargo en mi ausencia.
—Oye, estoy aquí mamá —dice lis mientras fruncía el ceño fingiendo estar ofendida
—No se preocupe señora Stuart, cuidare que Lis no haga ninguna travesura —le respondí burlandome de la pequeña. Ella sonrió y por lo contrario, Lis hizo cara de niño berrinchudo (a ella realmente le gustaba hacer aquella cara).
—Adiós, cuídense —dijo retirandose mientras que con Lis devoramos las galletas para luego comenzar con el trabajo.
—¿Comenzamos, pequeña? —pregunté terminando la ultima galleta, estaba realmente llena. Le agradecía a mi organismo porque comía como cerdo y no engordaba.
—Oh, si. Iré a buscar mis cosas —respondió mientras yo juntaba plato de galletas —Pensaba que sería mejor hacer las fotos afuera, hay un cielo bellisimo que seguro podemos aprovechar, ya vengo. Espérame afuera.
—De acuerdo, trae el trípode y un peine así acomodo este desastre.—respondí señalando mi cabello y luego me fui afuera a esperar a la pequeña loca de Lis.
Luego de reírnos como locas toda la tarde y sacar algo así como unas 600 fotografías de las cuales solo 5 son para su trabajo y el resto son nuestras haciendo caras extrañas, escuchamos que llega el auto de Jacob y ya comienzo a idiotizarme.
Idiota, idiota, idiota.
Cuando baja del auto veo que no esta solo si no que esta acompañado de una morocha, que por cierto es muy linda creo que Lis nota mi cara, porque evidentemente no soy para nada disimulada así que se acerca y me susurra en el oído.
—Ohhh, estas celosa —ríe. Estúpida —Descuida, solo es mi prima Carol dijo guiñandome un ojo mientras susurraba la ultima frase —Hola Carol, hola hermanito —prosiguió en un tono de voz mas elevado. Jacob nos vio y la morocha despampanante se limitó a asentir con una sonrisa
—Hola Lis, hola ¿Princesa? —Saludó a ambas mientras me miraba sorprendido. —¿Que haces tu aquí? —sonrié. Dios esa sonrisa. Sus labios...Calmate Vic pareces una niñita hormonal.
—No vino por ti hermanito —intervino Lis —No te ilusiones. Vino a ayudarme con una tarea. Pero ya terminamos así que es toda tuya ¿Verdad Vic? —mi cara es un ''No, Lis. No lo hagas'' total. Pero ella solo se despidió de mi llevando consigo a su prima adentro y dejandome sola con Jacob. Traidora. La mataré, lo juro. Maldita enana de mierda.
No lo mires Vic, no lo mires. Oh por dios, me esta mirando con sus lindos ojos azules creo que me voy a hacer pis en los pantalones. O podría desmayarme. Si definitivamente podría desmayarme en este maldito momento.
—Hola princesa, me da gusto verte —dijo sonriendo
—Uhm, hola Jac, ¿Que... Tal? —dije mientras limpiaba el sudor de mis manos en mi ropa dismuldadamente. El rió, por lo que deduje que había notado mi nerviosismo.
—Quiero que hablemos Vic —dijo con seriedad mientras me miraba con esos ojos que derritirian un puto glaciar entero —Creo haberte dicho que tu me gustabas y tu me cortaste el teléfono son decir nada —por dios, eso que hizo no fue una carita de perrito. Díganme que no lo hizo.
—Yo... Eh...Vale, si, tu... También me gustas. Creo —dije con una sonrisa nerviosa de esas que tanto detesto haciendo que su sonrisa se ensanchara mas si eso era posible.- Pero, yo... Esto esta mal Jac, yo me iré, y no estoy para enamorarme o lo arruinaré.
—Joder, princesa no puedes decir que te gusto y luego decir que esta mal —dice luciendo decepcionado. Soy una idiota. Siempre arruinas todo, Victoria. —Se que es apresurado, pero déjame demostrarte que esta bien eso que sientes.
—Yo... No lo se, lo pensaré. Pero no prometo nada esto es... Difícil para mi —dije tomando sus manos entre las mias y mirando fijamente a sus ojos —Entiende por favor, entiende.
—Bien, lo entiendo. Tu ganas —dijo riendo —Pero no voy a rendirme.
—Ok —dije volviendo a la realidad abandonando la fijacion de mi mirada en sus ojos —Ahora, yo debería irme. Si, eso —el asiente y habla.
—Ve y saluda a Lis, yo te llevo a casa —por alguna razón no puse resistencia y simplemente acepté.
No voy a decir la maldita frase de ''El viaje fue en silencio, pero no era un silencio incomodo porque blablabla'' ¡No! Jesús, fue muy incómodo. Al menos para mí. Sabia que si decía algo lo arruinaría, así que solo me mantuve callada en todo el camino. Al llegar, lo salude con un beso en la mejilla y sin mas me baje de su auto y salí prácticamente corriendo hacia mi casa.
Una vez que ya estoy sana y salva entre las cuatro paredes de mi habitación, decido enviarle un mensaje a Ana.
Yo:
Tenemos un codigo X An. Me entiendes? UN PUTO CODIGO X. JODER. Llámame cuanto antes. Estoy desesperada. Te amo bye.
El código X es un invento que usamos con Ana, para poder decir que estamos en una etapa de enamoramiento. Y créanme, no es bueno que yo. Victoria. Esté enamorada.
[CORREGIDO]
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Victoria
Teen FictionVictoria, ese es mi nombre. Dicen que significa "La que ha triunfado" La realidad es que no creo haber triunfado en lo absoluto. En mi vida fui todo menos valiente. ¿Por qué? En el lugar que se suponía debía ser mi hogar, solo recibía maltratos. Si...