Chance

XXXI

Luego de que botaran todas las botellas de soju. Y de haber hecho aquel supuesto ritual, al que Kyungsoo se había unido. El pelinegro le volvió a recordar que ahora pasaría las vacaciones en su hogar. Incluso lo había apurado para que empacara las cosas necesarias y se fueran esa misma noche.

Pero Baekhyun había pedido un poco de tiempo, apelando a llamar a su madre y que quería descansar un día por lo menos de todo lo que había pasado. Kyungsoo acepto esto, pero aun así le recordó que tendría que ir a su hogar, o el vendría a sacarlo de ahí y lo arrastraría.

Luego de que el pelinegro partiera a su hogar, Baekhyun volvió a su cuarto, se adentró en su cama, cubriéndose muy bien con sus sábanas.

Había un problema con el pasar las vacaciones en la casa de Kyungsoo. Y esa era que tendría que ver a Chanyeol. Aunque eso podría soportarlo, lo que quizás no podría, era ver a los dos chicos juntos. Fueron muy pocas las veces que los vio juntos como pareja, y de las pocas veces, ninguna le había agradado, pero ahora tendría que soportarlo, por Kyungsoo.

Tomando en sus manos su collar, se concentró en este, y pudo consolar el sueño. Pensaría mejor las cosas al siguiente día.

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La taza de cereal con leche se había enfriado hace unos minutos, porque no dejaba de mirar las hojuelas, y revolverlas. Ya se podía ver tan solo una masa, en vez de las hojuelas bien formadas.

Tenía la posibilidad de ir con Kyungsoo y tener un rico desayuno preparado o por el mismo Kyungsoo, o por su madre. Cualquiera de los dos hacía un excelente desayuno, si se comparaba con lo que él hacía.

En la mañana había recibido a las sirvientas; les informo que ya no vinieran todos los días, y les dijo que solo deberían de venir una vez a la semana, para repasar la morada. Las preocupadas miradas de las dos señoras no se hicieron esperar, pero el explico que luego su madre las llamaría. Entre sus planes del día estaba el llamar a su madre y avisar de su situación. Nunca había pasado tanto tiempo en otro lugar y esta sería la primera vez, y para ser algo que debería de ser excitante, no lo era demasiado, porque aquello tendría sus desventajas.

Se golpeó las mejillas con ambas palmas, tratando de despertarse y darse ánimos, por que ciertamente estaba algo decaído. Mas con un fuerte respiro, tomo con sus dos manos su taza de cereal, y se tomó todo en un largo trago. Tocio levemente después de eso y tuvo que recuperarse con algo de agua.

Vio su mini jardín en la encimera de la cocina, donde lo había dejado hace un tiempo, y había decido dejarla ahí, supuestamente para entretenerse mientras Chanyeol preparaba el desayuno. Tan solo había pasado una vez, pero tenía unos cuantos vales más de "Cocinare lo que sea para ti." Así que esperaba usarlos de todos modos, ¿Podría, cierto? No sería como si estuviera tratando de hacer algo, tan solo quería buena comida cacera, nada más.

Mientras pensaba en la manera más acertada de usar lo que restaba de vales, el timbre de su hogar sonó. Esperando fuera Kyungsoo, corrió a abrir la puerta. Pero se encontró con alguien que no esperaba ver tan pronto.

—Hola. —saludó el alto una vez vio la pequeña figura al otro lado de aquella entrada. No se había podido resistir cuando supo la situación del castaño por parte de Kyungsoo. Así que, ahí se encontraba. —

—Hola. —El saludo del castaño fue más desganado de lo que Chanyeol hubiera querido. — ¿Qué-

—Quería saber cómo estabas. —respondió antes de que la pregunta del otro se completara— Supe que solucionaste tu problema con Kyungsoo.