Pasiones Armónicas

CAPÍTULO 4

Pasaban los días y aún no regresaba el maestro Albert a su clase, Angelina asistía a sus clases como de costumbre, Emily a sus clases de instrumentación y todo seguía normal para muchos excepto en Angel; una sensación extraña surgía en su interior, una sensación que nunca había percibido antes. Ella no comentaba nada pero Lily poco a poco se daba cuenta.

Todos los días pasaba frente a aquel salón lejano al final del último pasillo del edificio del instituto, Lily la observaba siempre, callada, muy atenta y no podía evitar sonreír por aquello que veía; siempre ocultándose de Angel para que no se fijara que la seguía todas las tardes.!

Cada día la misma rutina para Angelina, asistir a clases, pasear por los pasillos tratando de escuchar las melodías de Erick, suspirar e irse...

Un día Emily la encuentra escribiendo algo en un papel, y de golpe le cae encima a abrazarla mientras se reía;

-vamos Ángel, estás enamorada de Erick, no puedes negarlo- decía entre risas.

Angelina se sonrojaba y enfurecía. -No! no es cierto!- grita y empuja a Lily; quien se sorprende ante tal reacción.

Angelina queda paralizada y se acerca a Emily -lo siento, no quise hacer eso-

-no pasa nada Ángel- contesta -solo jugaba contigo, no pensé que te molestarías- sólo la mira y baja la mirada.

-Emily, creo que tienes razón pero, no es algo que debes ir diciendo por cada lugar, no quiero que nadie sepa que estoy sintiendo algo por Erick- recoge sus cosas y camina -vamos a la plaza del instituto, casi no hay nadie, podremos hablar allí!- le dice y salen del lugar.

*****

Erick

-Bien, está saliendo como quería! no entiendo por qué de repente esta obra ha ido fluyendo, hasta hace unas semanas era un desastre, y desde hace 5 días que me he sentado a analizar lo que he hecho y a componer y ya casi está terminada!- pensamientos de Erick mientras observaba su composición y tocaba el piano.

Días atrás se dispuso a componer lo que sería su segunda obra musical, anteriormente se la pasaba tachando hoja tras hoja, por alguna razón su mente estaba bloqueada, nada de lo que quería hacer le salía, y de repente sintió algo y comenzó a escribir de nuevo.

En pocos días adelantó al máximo la pieza y sin ninguna queja, ni retraso, ni borrón;

-mmm ¿dónde estará?- se preguntaba, -me gustaría saber que hace-

Erick salió de su cubículo y al cerrar la puerta sus llaves se caen al suelo, al recogerlas ve una lapicera de color violeta con estrellas, la recoge -es de ella, estuvo aquí!- fue lo que alcanzó a pensar.

Salió a buscarla -tiene que estar aquí todavía, pero ya es muy tarde ¿por qué aún seguía aquí?- muchas preguntas cruzaban su mente mientras caminaba a la salida.

Erick era de esos músicos que a la vista parecía que amaba la música más que cualquier cosa, pero desde que conoció a Angelina su pensamientos van saltando de su obra hacia ella; no le desagradaba aquello pero se sentía extraño, algo que antes no había sentido.

*****

Angelina

-Bien, ahora si podemos conversar tranquilas- suspira y se sienta al lado de Emily buscando la manera de comenzar la conversación cuando Emily empieza a acosarla de preguntas;

-muy bien Ángel, ¿desde cuándo estás así? habías dicho que te caía muy mal, que era un creído, ¿qué pasó?-

Angelina solo se queda petrificada pensando en esa última pregunta ¿qué pasó?.

-no lo se! de repente solo no podía dejar de verlo, de escucharlo tocar, de ver cómo sus ojos brillaban con la música- contesta ella mirándola; -soló se que un día iba caminando cerca de su salón de estudio y escuche que tocaba algo tan maravilloso que mi piel se erizo y allí me quedé, del otro lado de la puerta, sentada, escuchando...- suspira.

Angelina se estaba enamorando perdidamente de Erick, no sabía que hacer, el era su maestro, al menos cuando el profesor Miller no asistía, de resto el era un alumno un músico más de la institución. Pensaba que sería una locura pero lo que no se imaginaba era que el estaba sintiendo lo mismo.

-Angel!- dice en voz baja Emily -Angel mira!- la estremece de un brazo -Angel mira quien viene!!- golpeándola en la pierna.

A lo lejos se veía Erick caminando en dirección a ellas.

Ninguna de las dos sabía que hacer, Emily pensaba si debía irse o quedarse, si el iba a decirle algo importante, o solo hablar; Ángel se preguntaba si estaba bien irse antes de que llegara y evitar verle, hace días que no habían tenido ningún tipo de acercamiento, ni en clases, ni por lo pasillos, estaba preocupada y temblorosa.

Lily no sabía que hacer y lo primero que se le ocurrió fue irse corriendo.

-¡tonta!- pensó Angel...

-No corras así pequeña, puedes caerte y lastimarte- le ha dicho Erick cuando vio a la pequeña Emily pasar corriendo a su lado.

Los siguientes segundos Angel no sabía que hacer, quedó petrificada en el banco, no podía respirar, sólo veía al frente mientras el caminaba; sorprendida o emocionada, lo único cierto es que se alegraba de verlo.

-buenas tardes Angelina- tomo su mano y la besó -espero no interrumpir, salí un rato a dar una vuelta y descansar y desde lejos vi que estaban aquí Emily y tú; ¿por qué se fue corriendo? ¿acaso vio un fantasma?- al decir esto último Erick no pudo contener la risa a lo que Angel sólo observaba y sus nervios empezaron a cesar;

-no lo se, dijo que olvidó algo y se fue- contestó ella, -¿cómo estas? hace días no te veía por los pasillos ni ninguna otra parte del instituto- ella con la cabeza baja por no poder soportar la mirada de aquel chico que le había robado días de tranquilidad, espero paciente su respuesta;

-mmm, estuve trabajando en mi obra, hace unas semanas no podía concebir ni un sólo compás, todo iba mal, no se que pasaba que nada fluía; pero de repente sólo aparecieron notas en mi cabeza y todo empezó a tener sentido, wow! fue magnífico, como veía venir cada frase, los matices y el color tan hermoso de cada instrumento; un día sólo sucedió y ya estoy casi por terminarla-

los ojos de Erick brillaban al decir todo lo que había percibido los últimos días con respecto a su obra y ella, ella solo suspiro al notar que el irradiaba felicidad y amor.

Angelina de pronto se levantó y le dijo que tenía que irse, su corazón empezó a latir fuerte porque en un momento pensando en aquellas palabras de Erick sospechó que algo de sus palabras traían consigo un suceso que ella no quería aceptar y que temía que lo que presentía fuera verdad;

-lo siento! debo irme, no quiero ser cortante pero es tarde- dijo y tomó sus cosas pero estas se cayeron.

Sus manos eran un manojo de nervios, el notó algo raro en ella, la ayudó a recoger sus cosas y quedaron frente a frente, ella temblaba y el se perdió en su mirada;

Se levantaron a la misma vez, seguían conectados con la mirada y de pronto el corto el silencio -ya entiendo, fuiste tú- susurro...

-NO!, calla- gritó ella -no digas locuras- y en ese instante ella corrió...


*****

No importaba que tanto corriera, no importa si huía, el entendió algo en ese momento aunque más que eso se preguntaba si acaso ambos estaban enamorados!

Erick

-No es posible ¿o sí?creo que en verdad me gusta, es linda ¿por qué no? sería un complemento ideal- se decía mientras ella se perdía de su vista.

*****

Creo que este es corto pero necesario, porfis si les gusta no duden en comentar, uno siente más ánimo o algo así...