Los meses pasaron tan fugaces como las estrellas en un firmamento de verano. Y si, era mediados de verano. Volví a mi infancia sin duda, acogida en casa de mis padres, convirtiéndome en una niña mimada. Supongo que estaba esa intriga innegable de si echaba o no de menos a Freddie... aunque la respuesta era más que evidente. Me pasaba las noches simulando que me rodeaba con sus brazos hasta que por fin podía caer en un profundo sueño. A veces, sin embargo, no podía pegar ojo preguntándome su paradero, qué estaría haciendo sin mi, si ya habría encontrado a otra chica especial, como las tantas que tenía. Menudo hijo de puta. Pero cuánto le quería.
Pero no ver a Freddie también conllevó no saber nada de Steven. Y la verdad no sabía bien por qué. Quizá me había aislado demasiado en una burbuja que me impidiese establecer cualquier tipo de relación que no fuese la parental. Pero esto no podía seguir así. Tras darle vueltas durante un par de semanas, uno de los días más calurosos tomé una decisión.
-Mamá... Voy a salir. Hace mucho que no veo a Steven. – anuncié arreglándome en el espejo de la entrada.
-¿Quién es ese Steven? – preguntó mi madre, desde el salón.
-Ah, ¿no te acuerdas de él?
-No - rió.
-Es mi mejor amigo, el de la escuela. Ese que tenía pecas por las mejillas y la frente...
-Aaaah, ¿ese que vomitó en la cocina cuando comió un sándwich pasado del fondo de la nevera?
-Ese mismo... - afirmé en un tono desesperado - Bueno, ya estoy lista. ¡Vuelvo para cenar! – y salí por la puerta.
-No te retrases...
Tuve que andar bastante y hacer mucha memoria para llegar hasta la casa de Steven. No sabía cómo iba a reaccionar, quizá estuviese molesto conmigo por no haberle dado señales de vida. Una vez llegué, vacilé un poco hasta que por fin llamé al timbre.
-Rose... ¡no puede ser!– Steven me abrazó. - ¿Dónde te metiste, capulla?
-Bueno... -reí- me trasladé a casa de mis padres a principios de verano...
-¿Y por qué?
-Bueno... Me fui muy precipitadamente y no te pude contar nada...
-Pasa y me lo cuentas, anda – dijo cediéndome el paso a su casa.
Nos sentamos en su salón y trajo dos Pepsi-colas.
-Ahora que estamos servidos - dijo sentándose en el sofá- cuéntame.
-Bueno – dije saboreando la Pepsi – Freddie me engañó con otra.
-¿En serio? - abrió los ojos.
-Una tal Stacy, pija, bien vestida... Una furcia más.
-E-espera un momento... - dejó la lata la mesita- ¿Stacy?
-Sí, ¿qué pasa?
Steven comenzó a reir. No sabía si reírme con él o meterle una hostia...
- ¿Qué hace tanta gracia, tronco?
-Pues que quizá podrías haberte ahorrado ir a vivir con tus padres.
-¿Por qué? - me sobresalté.
-Verás... Eso de Stacy tiene una explicación... Freddie y yo estuvimos boxeando a mediados de curso, y quien perdiese, pediría salir a la más boba de la facultad. Tuve tan buena suerte en aquel combate fue Freddie quien perdió.
-¿Freddie? ¿Perdedor? Si es buenísimo boxeando.
-El caso es que Freddie pidió salir a Stacy Morgan, una rubia pija y creída, y que encajaba a la perfección en el perfil de chica boba. La tuvimos engañada una semana o así, luego Freddie la dio esquinazo y completó la apuesta, pero ahí parecía haber acabado todo... aunque ya veo que no.
-Pero igualmente me engañó... - fruncí el ceño y mire hacia otro lado.
-No. No te engañó. Siempre te fue fiel. Eso te lo puedo asegurar. Esos sentimientos hacia Stacy eran nulos. Era sólo una apuesta.
-¿Sabéis... sabéis que no está bien jugar con los sentimientos de los demás? – dije indignada.
Steven se encogió de hombros avergonzado.
-Ya sabes cómo somos los tíos...
-¿Sabes dónde puede estar Freddie?- pregunté pensativa.
-Llevo sin verle desde aquel día en que se peleó con tu ex.
-Oh dios mío... - me eché las manos a la cabeza, desesperada.
-No sabes dónde está...
Negué con la cabeza. Pero me vino a la cabeza de que había dejado la llave de aquella casa a Freddie. Así que podría seguir viviendo allí aún. No lo pensé dos veces cuando salí corriendo de la casa de Steve, sin despedirme casi.
El momento en el que mis ojos vieron por primera vez en dos meses la casa donde había tenido unos tan felices momentos con Freddie, el corazón me dio un vuelco tan grande como todo el universo en su conjunto. Los colores empezaron a aparecer en mi rostro y mi respiración se agitaba cada segundo en que mi atención se centraba en esa casa. Llamé al timbre con el estómago encogido. Tras la puerta, apareció un hombre de unos 30 años con gafas y un porte muy clásico.
-P-perdone - balbuceé - ¿se encuentra aquí el señor Bulsara?
-No – frunció el ceño extrañado – El señor Bulsara ya no vive aquí, señorita.
-¿Cómo? - abrí la boca - ¿Le vendió a usted la casa?
-Sí, así es. Hace unos dos meses.
Miré al interior de la casa. Estaba tal y como yo la había decorado.
-Veo que sigue con la misma decoración... No ha cambiado nada. - sonreí sin pensar.
-El señor Bulsara me aconsejó que no cambiase nada de la decoración, ya que daba a la casa un toque muy original, y había sido decorada por una mujer muy especial. Y no me faltaba razón, es una decoración muy original.
Al oír esto, fue como si mi cabeza hubiera ido a la luna y hubiese dado amplios saltos de alegría sobre el suelo blanquecino y polvoroso lunar.
-Y... ¿sabe dónde puedo encontrar al señor Bulsara?
-Sí - asintió- Me dio una tarjeta con su dirección. Espérese y se la busco. – el hombre se adentró en la casa y salió enseguida con la tarjeta. – Aquí tiene, señorita.
-Muchísimas gracias – dije abrazando al hombre sin meditarlo. Éste quedó extrañado (como es normal) y cerró la puerta a mis espaldas.
Por desgracia, era ya muy tarde. Pero no dejaba de agarrar con fuerza y pasión esa tarjeta con la dirección donde se alojaba Freddie. El día siguiente iba a ser el día más esperado en los últimos meses de aquel desastroso año. Deseaba como nadie que aún me siguiese amando.
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Hola lectores ❤️ para evitar que confundáis plagios, os comunico que este blog adriqueenlove.blogspot.com.es NO me ha plagiado ni yo a él, sino que soy la misma autora. En el blog, la protagonista se llama Adriana (de hecho, es mi nombre real) y en la versión wattpad Rose, y cómo podréis notar, la historia aunque es la misma, está cambiada, porque decidí reescribirla aquí. Este fanfic originalmente se empezó a escribir en 2013 (de hecho es el primero que escribí) y una buena amiga mía se ofreció a publicármelo en ese blog . Si os interesa ver cómo era originalmente y como escribía hace tres años, visitadlo. es interesante mi evolución 🙄😅
tengo otro blog donde subía también otros fanfics, uno de ellos es la versión original de Sólo tú y yo, así que si queréis visitarlo, este es 😊 itsonlyqueenfantasy.blogspot.com.es
pd: obvio lo de esos blogs es pura caca, pero no podemos negarnos a nuestro pasado (oscuro xd) 💘
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Joven Bulsara.
FanfictionRose evita caer rendida a los pies de Freddie Bulsara, un compañero del curso de Diseño Gráfico. Ella le tiene amor y odio al mismo tiempo, cosa que le confunde. Y aunque Freddie siempre esté ligoteando con chicas guapas, en su corazón va a quedar g...