Sofía tuvo que intervenir un par de veces, mi papa había permanecido callado mientras mi madre daba gritos por toda la casa, mis lágrimas salían de mis ojos, no podía controlar. –¿¡Que he hecho Dios mío para merecerme esto!?- gritaba mi madre. –Mamá lo siento, así soy, yo no lo he elegido – le respondía entre lagrimas. –Mami calma, trata de abrir tu mente, ella sigue siendo la misma persona, tu hija– le dijo Sofí tratando de calmarle. –¡Ja! Y has metido a tu hermana menor en el pecado– reprochó mi madre. Cada vez decía cosas más hirientes otras sin mucho sentido pero igual era mi madre, me dolía ver cómo reaccionaba, la había subestimado definitivamente. –¿Quien fue esa que te metió en esto?, ella tiene la culpa de que mi hija... - gritaba mientras recorría la cocina. – Lauren no tiene la culpa de nada– respondí haciendo que no terminase lo que iba a decir. Seguimos así hasta que mi padre intervino. – ¡Sinu basta ya! No creo que sea menos difícil para ella– dijo golpeando la mesa. –¿De qué lado estás Alejandro? ¿No ves que esa niña se lleva a nuestra hija a la perdición? – le respondió mi madre, la culpa me invadía era por mí que mis padres estaban discutiendo. –Estoy del lado de nuestra hija como lo deberías estar tu– sus palabras sorprendieron a mi madre, quien abrió los ojos y se sentó en una silla y comenzó a llorar, verla llorar solo hizo que me sintiera aun peor, mi padre me pidió que me fuese a mi cuarto con Sofía que debía darle tiempo a mi madre, que después hablaríamos bien.
Pasé toda la mañana en mi cuarto, Sofía entro varias veces tratándome de convencer que saliéramos a la piscina o fuésemos algún centro comercial, pero no tenía ánimos de nada, al llegar Tommy corrió a mi cuarto y trató de animarme enseñándome lo que había aprendido con su yoyo, terminé ayudándolo con sus tareas cuando nos interrumpió mi padre y me pidió que me cambiara que saldríamos. Me puse unos jeans y una blusa, nos subimos al auto, me dediqué a ver por la ventana hasta que mi padre empezó hablar
- Disculpa a tu madre, ella no ha querido decir todo lo que te ha dicho– dijo mientras seguía conduciendo.
- Yo lo siento mucho papi, yo si pudiera dejar de sentirme de esta forma lo haría pero no puedo, simplemente no puedo... - dije llorando.
- Tranquila mi princesa, yo no te pediré que dejes de sentir lo que estas sintiendo, solo quiero saber si estás segura de eso que sientes, muchas veces nos encaprichamos con las personas hasta llegar a confundirnos– me dijo, habíamos llegado ya al lugar, porque estaba parqueando – Necesito que me respondas solo eso, ¿estás segura?-.
- Si – respondí, realmente nunca me había preguntado eso, si estaba segura o no, creo que estaba implícito desde un principio.
- Esta bien hija, tu madre está aquí, comeremos, hablaremos, quiero que seas tolerante, como de igual forma se lo he pedido a ella, sabes que esto es algo que indirectamente nos involucra a nosotros tus padres – me tomo la mano y añadió – Tu siempre serás nuestra pequeña y estaremos aquí siempre para lo que necesites, ¿tienes claro eso verdad?-.
Sus palabras me llegaron, me sentí protegida, pero igual estaba dolida, tenía miedo, sabía que no sería fácil, lo abracé, me limpie las lagrimas y entramos, mi madre tenía los ojos hinchados como si hubiese estado llorando hasta hace poco. Al acercarse el mesero, hicimos nuestra orden y empezamos hablar, mi padre hacía el papel del mediador entre mi madre y yo, hicieron preguntas sobre quien era ella, donde la había conocido, si mis amigos sabían, cuanto llevaba en esto, le respondí todo y termine contando lo de Natalia, mi madre al escuchar esto me tomo la mano y me dedicó una de esas sonrisas tan mamá, al decirles que ya no estaba con Lauren, mi madre tuvo este brillo en los ojos como de esperanza, no quería quitárselo la verdad, así que omití cualquier comentario donde quedara evidenciado mis intensiones de volver con ella. En un punto de la conversación dejaron claro dos puntos, el primero que aun no estaban listos para conocer a Lauren o dado el caso otra persona del sexo femenino específicamente que tuviese algún tipo de relación sentimental conmigo y lo segundo es que necesitaban tiempo para pensarlo bien así que lo mejor era que viajara mañana, me entristeció un poco lo que me pedían pero no podía imponerles nada, quería que lo tomaran a su ritmo, mi madre luego añadió "De igual forma, no es que te dejaremos de ver, quiero que me visites cada dos meses, esa es mi petición personal y tal vez, solo he dicho tal vez Camila, puedes traer a Lauren o a otra, no lo sé, pero no te hagas mucha ilusión solo he dicho tal vez", al decir eso fue inevitable no levantarme y abrazarla, le di un beso y ella sonrió, terminamos de comer y nos devolvimos a la casa esta vez hablamos de otras cosas, la verdad ya era incomodo solo hablar de el mismo tema.
ESTÁS LEYENDO
Descubrir (Adaptación Camren)
Fiksi PenggemarEsto es solo una adaptación, la historia original no es mía. Todos los derechos al autor/a