Mi verdadero amor(Vegettaxx)

Capítulo 15

Y ahí estaba él, en un lugar oscuro y tenebroso del que no sabía como salir.

-¡Ayuda!-gritaba Frank corriendo por todos lados esperando encontrar a alguien para que le sacase de ahí.

Después de tanto tiempo, se rindió, cayó al suelo y empezó a llorar.

-¿Qué he hecho yo para merecer esto?-dijo lloriqueando.

Volvió a mirar su entorno, en verdad, no había nada que admirar. Todo era negro, paredes de humo negro que no dejaban pasar a saber por qué.

-Sa-samuel...ayúdame.-dijo con las manos en la cara, para ocultar sus lágrimas.

*2 meses después*

El seguía ahí, como siempre dando un paseo. No tenía nunca hambre, y el desconocía la razón.

-Aghhh.-dijo estirándose.-Haber, ¿qué hago hoy?

Se fue a pasear como siempre, casi siempre estaba despierto, y nunca se le agotaban las fuerzas.

-Una mordidita para tu boquita.-oyó de pronto Frank.

-¿Eh?-se giró pero no vio a nadie. -Habrá sido mi imaginación...-y dicho esto se dispuso a caminar otra vez.

-Hey, Frank, ¿grabamos algo?-volvió a decir la voz.

-¡¿Hay alguien ahí?!-gritó, a lo mejor ya podría salir de ese lugar donde estaba encerrado tanto tiempo.

-Me cago en todo chaval...-dijo de nuevo la voz.

-Esa voz...me resulta familiar.-fue corriendo de donde provenía la voz, y cada vez que se acercaba la voz se iba intensificando.

Frank observó a un hombre de espaldas agarrado a algo.

-¿Ho-hola?-preguntó temeroso Frank.

El señor se giró y pudo ver quién era, y también que es lo que agarraba.

-Sa-sam-samu...¡Samuel!-dijo dispuesto a abrazarle pero se detuvo al ver quién estaba detrás del mayor.-Guillermo...

-Frank.-dijo Guillermo entusiasmado. Giró la cabeza hacia otro lado, y se pudieron ver perfectamente marcas en su cuello, seguramente hechas por Samuel.- ¿Qué tal?

-....-Frank se quedó atónito, nada de su cuerpo reaccionaba.

-Ah Frank.-dijo Samuel captando la atención de los menores.- Me he casado con Willy.

-¡Noooo!-gritó Frank. Y despertó de donde se encontraba, en una camilla de hospital.- ¿Eh?¿Dónde estoy?

Una enfermera que pasaba por ahí, para darle la medicina a otro enfermo, le vio y fue directamente hacia él.

-¡Señor Garnes!-chilló la enfermera.

-¿Eh?-preguntó confundido Frank.- ¿Qué hago aquí?

-Hace 2 meses más o menos se desmayó, y no ha podido despertar en todo este tiempo. Nos alegramos mucho de que esté bien. Llamaremos a sus amigos para que vengan a por usted, después de que le demos el alta.-dijo sonriendo la mujer, de apenas 20 años.

-Vale...-dijo inseguro Frank. Observó el lugar, y se acostó de nuevo en la cama, pensando en el sueño de antes.-Samuel...

-Señor Garnes, díganos, ¿cómo se encuentra?-dijo el doctor apareciendo por la puerta.

-Bien, supongo, pero estoy un poco mareado.-y dicho esto se volvió a sentar.

-Ya veo.-dijo el doctor anotando algo en su libreta.