Entre a mi casa y como de costumbre llegue a encerrarme en mi cuarto, hoy no era un día cualquiera, era bastante raro en mi pero estaba feliz.
Me tumbe en mi cama y coloque audifonos conectandolos a la pequeña laptop que tenia, en ese momento algo invadio mi cabeza.
Harry.
-Pues, un gusto conocerte Katherine.
-Podria decir lo mismo Harry.-Sonrei ante mi amabilidad que tenia con este chico, hace tiempo que no hablaba con alguien. Y derrepende se me vino a la cabeza, ¿Porque estaba aqui?
-Oye deja de mirarme, me pones nervioso.-Dijo sacandome de mis pensamientos a lo cual me di cuenta que lo estaba mirando a los ojos y hundi la cabeza entre mis hombros y sonrío.-Lo siento, lo siento, solo que es... raro-Solto una risita al aire.-Que pensabas?.-No conteste nada, subi al autobus y esta vez tome uno de los asientos que tenia el otro disponible esperando que Harry tomara ese. Y efectivamente se sento ahi. Guardo silencio y yo comenze a responder su pregunta.
-A que viniste?-Mis palabras salieron antes de saber lo que decia. Me miro con el ceño fruncido como si no entendiera mi pregunta.- Digo, que si viniste a esta preparatoria o algo asi?.
Me explico todo, asi me di cuenta de que venia a estudiar a la misma preparatoria que yo, y comenzamos a platicar sobre su vida, me di cuenta que venia de Inglaterra lo cual se me hizo muy interesante y, que ahora vive por mi casa. Me pregunto sobre mi, y las cortadas en mis muñecas, pero conte muy pocas cosas, evitando contar el porque de estas y sobre el accidente que sucedio meses atras. Bajamos tranquilamente del bus, Harry bromeo sobre caerme de nuevo a lo cual yo respondi dandole un codazo y riendo. Tenia la mirada al suelo cuando porfin el rizado hablo.
-Sabes, eres muy linda.-Levante la mirada hacia el y no supe como reaccionar, senti como se teñian de rojo mis mejillas y volvi mi mirada hacia el suelo.
-Gracias.-Fue lo unico que dije antes de casi correr y tomar un camino diferente al suyo.
Harry era la unica persona con la cual hablaba, me gustaba platicar aunque fuera un momento con el, necesitaba compañia ya desde que ese suceso aparecio en mi vida no hay nadie alrededor mio.
Ya habia pasado una semana desde ese día, lo habia topado un par de veces y platicabamos, incluso una vez me acompaño hasta mi casa, en la preparatorialo aveces lo veia, pero con Samantha asi que me mantenia alejada lo mas posible.
Los ojos comenzaron a pesarme hasta que perdi conocimiento de todo y me dormi.
Me levante a las 5 mas 15 de la mañana, lo cual significaba que mi madre estaria ahi, asi que decidi bajar.
-Buenos dias mi niña.-Esbozo mi madre con una sonrisa en la cara.-Que te trae tan temprano.
-Dormi temprano ayer.-Mama sonrío y me ofrecio desayuno.
Salio al la misma hora de siempre y como yo ya no tenia ganas de dormir decidi arreglarme como lo hacia antes.
Tome una ducha de unos cuantos minutos, seque mi cabello y comenze a plancharlo. El rubio no estaba tan largo pero si me bajaba de los hombros asi que si lo dejaba suelto no habria problema. Puse rimel en mis pestañas y aplique un labial rosa casi al color de mis labios naturales. Tome unos jeans ajustados, una blusa de tirantes, encima de ella un sueter delgado color piel con rayas negras y unas zapatillas oscuras.
Estaba de nuevo en la parada del autobus, miraba hacia los lados para ver si por alguno venia Harry, pero nada. Me sente a esperar y puse mis audifonos, cerre los ojos y me relaje.
Senti cuando una mano agarro la mia tirandome hacia arriba para poder levantarme, abri de golpe los ojos y mire a Harry sosteniendo mi mano llevandome hasta el camion que estaba parado enfrente de nosotros, con la otra mano quite mis audifonos y entre.
Nos dirigimos hasta los asientos vacios y me sente primero.
-Hola.-Dijo Harry mientras sonreia y se sentaba al lado mio.
-Hola.-Sonrei y voltee hacia nuestras manos que seguian entrelazadas y trate de deshacer aquel agarre.
-Lo siento.-Quitando su mano de la mia.-Deberias de no cerrar los ojos mientras esperas un autobus.-Rió.
-Cuanto tiempo llevabas ahí?-Curiosa por la respuesta comenze a morderme las uñas.
-Lo suficiente como para poder ver lo bonita que eres.-Agache la cabeza ante su comentario al sentir que mis mejillas se teñian de un color rosa.-Ademas... no deberias hacer eso, que tal si pasa algo malo?.
-No creo que pase.-Dije levantando la cara para mirarlo. Hoy no traia gorra, dejo su cabello sin nada que lo cubriera peinado hacia arriba y a los lados, llevaba una camisa azul con una de cuadros arriba, no podia negar que se veia bien.
-No seas tan segura.-Dijo serio.-Como sea, cuidate.
-Lo hare.
Es increible como puede cambiar de un humor tan facilmente.
En el transcurso del camino no hablamos, volteaba en momentos pero volvia mi mirada hasta el frente.
Bajamos y sin decir palabra alguna nos dirigimos hasta la preparatoria.
Casi al entrar Harry me tomo de la mano y me volteo hacia el.
-A que hora sales?.-Me le quede viendo y hable.
-A las 6:30 ¿Porque?.-pregunte curiosa.
-Nos vamos juntos?.-Levante la mirada para encontrarme con sus ojos verdes llenos de curiosidad.
-Si.-Conteste casi inaudible.
-Esta bien, nos vemos de rato.-Me dio un beso en la mejilla casi tocando la comisura de mis labios y solto mis manos adentrandose entre la multitud que estaba en la entrada.
Las clases terminaron y sali afuera para encontrarme con Samantha abrazando a Harry y sus amigas detras de ella tomandole fotos, el no parecia incomodo con ella asi que decidi no molestar y comenze a caminar hasta la parada del autobus.
Voltee y a lo lejos mire como Samantha le daba un beso en sus labios y se iba, el rizado comenzo a caminar hacia adentro de la institución y ahí lo perdi de vista.
El autobus no tardo, llegue a mi casa en 15 minutos y entrando como de costumbre estaba solo, llegue a la cocina y tome un pan tostado sacando un frasco de nutella y una cuchara, me dirigi a mi habitación y cerre la puerta.
Recorde lo que habia sucedido hace poco y me dio lastima, de Samantha me lo esperaba, ella era una cualquiera pero no me esperaba que Harry respondiera al beso que ella le dio, pero da igual, al fin y alcabo no somos nada mas que amigos, podemos hacer de nuestra vida lo que se nos de la gana.
Despues de unos minutos tocaron la puerta de casa, no dejaban de tocarla a cada segundo y comenze a maldecir a la persona la cual estuviera causando tanto alboroto, abri la puerta para encontrarme al rizado de ojos verdes frente a mi.
-Se puede saber donde demonios te metiste?.-Dijo enojado.
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Lo siento si es muy tarde :(
Como les parecio el capitulo? estuvo bien:( porfavor:( la sigo?:( enserio no se si seguirla o no, dejen de ser lectores fantasmasssss:((((
Los quiero.
-Jess.
