Capítulo 26

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Desgraciadamente, esta historia ha llegado al final. Miles de ideas rondan por mi cabeza y ya sabéis que para poder hacerlas realidad debo terminar las que tengo pendientes; he de admitir que escribir una historia como ésta ha resultado ser todo un reto que espero haber superado con éxito. Agradecer a todos los lectores que seguían la historia entre Rick y Kate, muchas gracias, por los votos y comentarios.

Unos años más tarde...

Ellie termina de hacer los deberes en su habitación, tararea la canción "Lean On" mientras realiza las operaciones sin ninguna dificultad.

- ¡Hola Ellie! ¿Quieres jugar conmigo?- Su hermano pequeño entra con una máscara y los guantes de Iron Man, su superhéroe favorito y el de su padre también.

- Todavía tengo que hacer un trabajo, lo siento renacuajo.

- Eres una aburrida.- contesta Luke enfadado porque lleva días sin poder jugar con su hermana, sale de la habitación exagerando los pasos para ver si alguien se da cuenta.

- Hey cielo, ¿a qué viene esa cara?-vuelvo de trabajar,me siento aliviada al ver que mis hijos no se están peleando. Ellie está en el instituto y ya ha comenzado a comportarse como una adolescente de su edad mientras que Luke sólo desea jugar con ella como hace unos años.

- Ellie no quiere jugar porque dice que tiene deberes, seguro que ya no me quiere.- dejo el maletín en la mesa y abraza a su hijo.- Cielo, sabes que eso no es verdad. El instituto es más difícil que el cole y los profesores son más estrictos.

- ¿En serio?- Pregunta Luke con gesto de asombro, lleva la máscara en la mano.- Pues entonces no iré nunca al instituto.

- Que te lo has creído, seguro que Ellie podrá jugar contigo este fin de semana, además, creo recordar que van a venir los primos. Podrás estar con ellos.

El enfado de Luke desaparece enseguida, ahora sólo piensa en que pronto verá a sus primos y podrán jugar a los superhéroes. Pongo los ojos en blanco, mis hijos han crecido tan deprisa...

- Toc, toc, ¿se puede?- Ellie gira su silla para verme madre, me paro justo en la puerta.- acabo de hablar con tu hermano, te echa de menos.

- Lo sé pero mandaron este trabajo ayer y es para mañana; estoy muy agobiada.- camino hacia mi hija, observo su habitación, está

- Que seas hija de un escritor de éxito no implica que tengas que ser cómo él. Tú eres especial, Ellie, a tu manera; con lo inteligente que eres, no tienes por qué agobiarte.

- Gracias mamá, de verdad.- las dos se abrazan, olvidando durante unos segundos las clases y el trabajo.- Bueno, tengo que seguir, avísame para la cena y te ayudo.

- No, tranquila, me parece que tu padre vuelve hoy de la gira pero no se lo digas a tu hermano, es una sorpresa.

Mi hija me ayuda a cocinar y Luke se encarga de poner la mesa, los tres cenamos con música de fondo. Después de cenar recogemos la cocina y vemos la televisión.

- ¡Mamá! ¿Has visto eso?- Unas luces de coche han iluminado la parte delantera de la casa, Ellie y yo nos miramos y sonreímos.

- Seguro que son los abuelos que vienen a hacer una visita.- pero Luke reconoce ese sonido, baja del sofá y corre hacia la puerta.

- ¡Papá, papá!- Rick deja las maletas para poder abrazar a su hijo, los dos entran charlando sobre "Píxels" película que vieron hace dos semanas en el cine mientras que Ellie yo nos íbamos de compras.

- Hola papá, ¿el viaje ha ido bien?- Nuestra hija abraza y besa la mejilla de su padre, no quiere admitirlo pero también le ha echado de menos.

Más de una noche los he pillado hablando por Skype, de las clases entre otras cosas, ahora es mi turno, juntamos nuestros labios.

- Te veo algo cansado, ¿quieres darte una ducha antes de cenar?- Luke vuelve a su sitio, se le olvida el enfado y empieza a hablar con su hermana.

- No, ceno con vosotros. Me ducharé antes de acostarme.- Ellie le trae su plato y los cuatro disfrutamos de una agradable cena.

Rick contesta a todas las preguntas que nuestros hijos realizan, además también nos cuenta una anécdota divertida a la paz que embarazosa, en el hotel.

Tras terminar, recogemos la mesa y la cocina, es tarde y mañana hay clase por lo que Ellie y Luke se suben a sus habitaciones.

- Los veo tan cambiados.- mi marido se va deshaciendo de la ropa para meterse en la ducha.

- Cielo, has estado un mes fuera.- contesto observando su cuerpo perfectamente esculpido, parece que los años no le hayan afectado.

- Ya pero crecen tan deprisa...por cierto, este domingo me llevaré a Luke a ver la final, tu padre se viene también.

- ¿Y cuándo pensabas decírmelo?- me rodea la cintura con los brazos, ya no lleva la camisa y su perfume invade mis fosas nasales.

- Te lo digo ahora, y dime, ¿te duchas conmigo? Te he echado de menos.- pone esos ojitos para convencerme, la verdad es que llevamos tiempo sin estar los dos a solas; hay que aprovechar cualquier momento.

Ese fin de semana...

Dylan, Sarah y Luke juegan en el jardín, Ellie está tumbada en la hamaca tomando el sol escuchando música con los auriculares.

Jenny, Lanie, Martha y yo estamos sentadas hablando de todo, los hombres han insistido en preparar la barbacoa familiar.

- Tenemos que hacerles una foto, no siempre puedes verlos con el delantal puesto y esos gorros a juego.- Lanie saca el móvil y con mucho disimulo hace la foto, no tarda nada en pasarla por el grupo que tenemos de whatsapp.

- Eres mala Lanie Parish.- Martha observa a los más pequeños, lleva toda la mañana mirándolos, en especial a su nieto.

- Martha, ¿va todo bien?

- Sí, tranquila es que...Luke me recuerda tanto a Richard, y él creció sin padre. Me asombra que eso no le haya afectado.

- Tu hijo es maravilloso, un buen marido y un padre excepcional.

- Sí que lo es, por cierto Katherine, ¿le ocurre algo a Ellie? Le noto algo distante.

Mi suegra tiene razón, mi hija ya vino algo rara el viernes cuando terminaron las clases, creo que debería hablar con ella. Cojo un refresco y camino hacia ella.

- Ellie, Ellie.- pero con la música a todo volumen es imposible que me escuche.- ¡Ellie!

- ¡Joder mamá, menudo susto!

- Toma, pensé que querrías refrescarte.- mi hija deja el ipod a un lado y se sienta para poder hablar.

- Cariño, ¿ha ocurrido algo que quieras contarme?- sus dedos abren la lata y le da un buen sorbo a su coca-cola, tampoco me dirige la mirada.

- No sé si debo, es muy personal.

- Venga, no tiene que ser tan grave.

- Hace unos días...empecé a hablar con un chico de tercero y...ahora hablamos por Skype y whatsapp.

- Ya sabes lo que opinamos tu padre y yo sobre el tema de los novios, acabas de empezar el instituto.

- Sí, sí, pero nos estamos conociendo, nada más. Por favor, no le digas nada a papá, se pondría como un basilisco si se entera.

- Mis labios están sellados.

- Gracias mamá, eres la mejor.

Todavía no entiendo cómo he llegado hasta aquí pero, si algo tengo claro es que, no lo cambiaré por nada del mundo. Y es que, me dijeron que no me enamorase de aquel loco pero fue el único que supo quererme con locura.




Crazy In LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora