La leyenda del hilo rojo♥↭Jungkook & Tn↭♥

Estamos destinados

Capítulo 16.

Y entonces se creó el peor problema de nuestras vidas.
- Bien, _____, debemos irnos...-me agarró Jimin del brazo, severamente molesto. Me mordí los labios, sin embargo, no sabía que esa sería la ultima mordida que le daría a mi boca.
- Suéltala...-habló Jungkook, separándonos. Mi corazón se detuvo, entonces lo miré todo en cámara lenta, viendo como Jungkook me tomaba de la mano, dejando a las fans, y a los chicos detrás, corriendo lejos, y más lejos. Lejos de la sociedad, el viento rozando nuestros rostros, y nuestros labios entreabiertos. Respiré profundamente, y corrimos 10 cuadras más, fue allí cuando me detuve y le miré.
- ¿A dónde vamos?
- No puedo ir a casa, así que iremos con mi abuelo, ¿si?-.se acercó a mi, respirando entrecortadamente, tomando mi cara entre sus manos. Asentí, él sonrió, y volvimos a correr. Llegamos a una unidad como la mía, y nos adentramos hasta llegar a una pequeña casa tradicional. Paramos allí, y descansamos un poco, Jungkook se sentó en el suelo.
- ¿Qué hora es?-.pregunté. Él miró su celular.
- Las doce de la madrugada.
- ¿Y crees que esté despierto?
- Mi abuelo casi no duerme, él trabaja en cosas espiritistas...-murmuró haciéndome sentir verdaderamente nerviosa, ¿será que su abuelo adivinará el plan de la anciana? Apreté los labios, y sonreí. Él me miró, y me dedicó una sonrisa también.-Mira que seguirnos hasta Suwon, eh, eres una obsesa.
- Me sentía curiosa, perdón.-agaché la cabeza. Le sentí cerca.
- Eres la mujer más hermosa que conozco...-murmuró en mi oído, comenzó a respirar en él, mientras todas mis terminaciones nerviosas se alteraban de la emoción.
- ¿Y...yo?-.tartamudeé.
- Ajám...-habló quebradamente, lo cuál le salió como un gemido. Cerré los ojos, ¿qué demonios estábamos haciendo? Me separé inmediatamente, pero él me acercó de nuevo por la nuca, se me escapó un suspiro ahogado.-Siempre quise hacer esto.-y me besó.
Me besó, Jungkook me había besado, y yo no podía moverme, estaba paralizada de pies a cabeza. Me dejé llevar lentamente, sintiendo su suave lengua explorando mi boca, y dando mordiscos a mis labios. Suspiré de nuevo, y él intensificó el beso, llegando más allá del límite, nuestros labios chocaban mientras un ambiente caliente se sentía a nuestro alrededor. De repente, se detuvo. ¡Se había detenido! Cerró los ojos apretando mis manos.
- Eres muy hermosa, _____.

Después de diez minutos de besos, nos habíamos atrevido a tocar la puerta de la casa de su abuelo. El hombre nos recibió muy bien, al parecer Jungkook le extrañaba. Me miró con una pizca de sospecha.
- ¿Pasa algo, abuelo?-.le preguntó Jungkook. Los ojos del anciano se cristalizaron de pronto, y se echó a llorar, me conmovió.
- ¿Qué ocurre, señor?
- Cumplió su promesa...-murmuró. Fruncí el ceño.
- ¿De qué habla?-.pregunté.
- Juliette cumplió su promesa.
Cuándo pronunció aquel nombre todo se me vino abajo, me caí en el suelo tapándome la cara.
- ¿Cuál era su promesa?
- Juntar a mi nieto con su destino.-esa fue la gota que derramó el vaso, entonces lo que decía la abuela no era mentira, yo realmente le pertenecía a Jungkook, quién estaba frunciendo el ceño.
- ¿De qué hablas, abuelo?-.le preguntó.
- Hace años, mucho antes de que nacieras, una hermosa mujer visitó Corea, y yo me enamoré de ella, su cabello castaño, sus ojos verdes, era preciosa...-suspiró.-Los dos éramos espiritistas, y tuvimos un romance fugaz, cuándo se enteraron de nuestro amor, regresaron a Juliette a Estados Unidos, pero antes de que se fuera, ella me dijo que me casaría con otra mujer, que es tu abuela, y que tu madre te tendría a ti, todas las parejas totalmente hermosas, pero que tu destino no estaría aquí en Corea, sino viviendo en otro país, ella me juró que te daría la felicidad que necesitabas, y que haría que tu vida fuera perfecta...-pausó mirándole.-¿Es perfecta, cierto?
- Sí, abuelo...-asintió.
- Ella me dijo que te casarías a los 18 con aquella chica que te mandaría.
- Pero ella...
- Ella no se equivocó...-pausó.-¿Ves a esta chica?-.me señaló, sabía lo que venía a continuación.
- Si.
- ¿Acaso sabes por qué vino a Corea?-.él negó.-Juliette la trajo.
- ¿Cómo?
- La madre de _____, no podía asegurar el futuro de ella, por lo cuál le dijo que debía casarse con alguien pronto, así que para asegurarse de que se casaría con el hombre correcto, acudieron a una curandera, bruja, espiritista quién les aseguró que encontraría el otro lado de su hilo rojo del destino, ella las trajo hasta acá.

- ¿Y...-el anciano le interrumpió.

- Tú tienes el otro lado de su hilo rojo, hijo, tú eres su destino, y ella es el tuyo.
Me tapé más, sintiendo el calor de la vergüenza acomodándose en mis mejillas, el abuelo había resumido todo mi viaje en menos de 5 minutos, me sentía humillada. Lloré un poco, alcé la mirada, y vi la cara de Jungkook rojiza, estaba pensando.
- Tú no puedes vivir sin ella, Jungkook

Aigoo lo sabia lo sabia jaja no puede vivir sin mi ahhh ok no