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Karen y Louis iban a tocar por décima vez la puerta del estudio de Zayn, pensaron que si no estaba en su casa podía estar allí, el lugar donde el moreno grababa no era para nada modesto, el espacio era enorme. Aquella conversación por celular tenía a más de dos confundidos. Los padres de Zayn se sentían desilusionados por la actitud que su «ex yerno» había tomado. Karen, sin embargo, conocía a su hijo más de lo que cualquiera pudiera llegar a conocer. Se sentían mal por Zayn, eso y sus sentimientos de shipper los estaban matando.
Cuando la puerta se abrió unos brazos rodearon el cuello de Karen, ni siquiera lo vio venir, sollozos y lágrimas se hacían presentes en ambos. Zayn sentía dolor, Karen sentía empatía, Louis tenía cara de orto.

«Liam no mandó esos mensajes Zayn» Karen tomo el rostro del moreno.

«¿El te lo dijo?» las mejillas de Zayn estaban empapadas, Karen pensó que su hijo no se había equivocado al elegir a Zayn como su pareja y sonrió con orgullo, la cara de su yerno era una de las más tiernas y conmovedoras que había visto.

«No, pero no hace falta que me lo diga. Lo conozco» hicieron un intento por parar de llorar.

Entraron al estudio, pensaron que se encontrarían un lugar desordenado pero vieron que era algo peor que desordenado. Papeles tirados por todos lados, pintura y aerosoles por todas las paredes, un bosquejo enorme del rostro de Liam en el piso de la sala. Zayn estaba dolido, Karen enfurecida y Louis enternecido.

«Mi hijo no haría algo así» el moreno estaba avergonzado de su apariencia, su barba estaba muy larga, el cabello estaba grasoso pues no había entrado a la ducha en varios días, su ropa manchada de pintura de todos los colores le daba un aspecto de vagabundo hippie.

«Dos veces Karen... me terminaron dos veces por mensaje» y empezó a llorar de nuevo.

Louis lo tomó de los hombros y lo golpeó.

«¿Que no ves que todo es como en las novelas? Sophia quiere separarlos, no seas estúpido, te ves bien pendejo llorando ¿Crees que yo no me siento mal? Mi ship favorito terminó, lloré cuatro horas» subió el volumen de su voz «Cuatro horas»

«¿Sophia? y Zayn comprendió todo «Maldita perra» miró a Karen, se volvió a Louis «¿La vas a matar?»

«No todo es como en las novelas pendejo, no puedo matarla... pero podemos putearla» sonrieron.

«Dejen de imaginar su muerte» Karen interrumpió sus pensamientos homicidas «Tengo una idea mejor»