Nothing's over ➵ Sungyeol.

05.

Después de haber salido de la frustrante escuela, oh querido lunes como te quiero. Mi madre estaba en la cocina preparando un pastel, significa que hoy era día de comer postre. Por fin algo positivo. No podía aguantar el maldito olor que provenía de la cocina, estaba en mi cuarto y el olor del pastel llegaba hasta la segunda planta de la casa, me aguanté las ganas de arrancar un trozo. Mientras bailaba al ritmo de la música, la puerta de mi cuarto se abrió, era mi madre en sus manos traía el vestido blanco que usé en la cita con Myungsoo. ¿Lo habré ensuciado? La miré detenidamente sin decir ninguna palabra.

-Hija, quiero que te pongas esto -dijo dejando el vestido en mi cama.

-¿Por qué? -dije haciéndo puchero.

-Hoy llegaron vecinos nuevos al frente de nuestra casa, y como bienvenida iremos a visitarlos.

-¿Enserio? -dije haciéndo una "o" con mi boca -, ¿Y ya los conoces?

-Eso es lo mejor, la mujer es la que vimos ayer en el parque.

-Oh está bien.

¿Era la mujer de su secundaria? Al parecer por lo que oí sí, no puedo recordar. Me fui a duchar, sin mentir estuve más de treinta minutos, sólo me faltaba arreglar mi desastroso cabello.
Me fui a mi cuarto ya que mis hermanos también irían a la visita y quisieron ocupar el baño. Un poco enojada salí del baño, ya que siempre quieren ocuparlo cuándo estoy yo. En casa hay tres baños; uno que está en el cuarto de mis padres, el segundo en la primera planta de la casa, y el último que es el que estaba ocupando.

Bajé con mi celular en la mano, y vi a mamá con el pastel en la mano, ¿Tan luego iríamos? Miré la hora de mi celular y eran las 17:58. Mamá gritó para que mis hermanos bajaran a la vez mi padre salió de su oficina. Al salir de casa, Donghee tocó el timbre de los vecinos. Salió la mismísima señora de ayer, entramos a su hogar y al fondo se podía ver la mesa preparada. Mi madre le entregó el pastel y la otra agradeció.

*****

La señora hablaba más que Minsun, mi madre también. Dios, juraría que me estaban mareando. Para que hablar de mi padre, él estaba hablando con el esposo de la señora. Estoy aburrida, creo que llevaban cuarenta minutos hablando. La señora se puso de pie y dijo que nos presentaría a otros miembros de su familia, todos nos pusimos de pie para presentarnos, estiré mi vestido maldita costumbre de mí.

-Estos son mis hijos Elissa -dijo la señora, levanté la mirada para ver y mi corazón se hundió. Él estaba allí mirándome furiosamente -, él es mi hijo menor, y este es el mayor.

-Un gusto -toda mi familia saludó menos yo, de Sungyeol no salió ninguna palabra como siempre. Nos estábamos mirando profundamente.

-¡Vamos a comer! -dijo la madre de Sungyeol.

Estábamos todos comiendo la rica comida. No podía comer normalmente, el me miraba con mucho odio, nadie se daba cuenta ya que hablaban de su vida. Estaba muy incómoda, quería irme.

-Papá, me siento un poco mal, ¿Puedo salir a tomar un poco de aire fresco?

Mi padre me miró un poco enojado, a él no le gustaba que me marchara o arruinara las cenas con los demás -, Está bien, no te demores.

-Si padre -dije miré por última vez a Sungyeol y agregué -, disculpen.

Salí al jardín delantero, más que flores tenía mucho césped. Respiré profundo. ¿Que había hecho yo? la vida me quiere castigar. Vida si me quieres castigar hazlo, pero no de esta forma, ¡No haciéndo a Sungyeol mi nuevo vecino!. Mis pensamientos fueron interrumpidos ya que mi padre salió y me dijo lentamente