Tenebrosos (Secuela de "Sombríos") © [No Editada]

Capítulo 12: "Fuego"

LILIAN

      Todos dormían, o al menos parecían hacerlo, yo daba vueltas en mi cama, cerraba los ojos, contaba para mis adentros (ya iba por el número 148.000) y no había manera de dormirme. Tenía calor, gotas gruesas de sudor se resbalaban por mi frente y empapaban mi cabello anaranjado, mi ropa estaba sucia, estaba incómoda. Tosí. Me pareció ver humo y me levanté.

ALICIA

      El aire en la habitación era sofocante, Apolo estaba tirado en el suelo al lado de mi cama, estaba despierto, de repente soltó una carcajada, salté de la cama del susto.

     -¿Qué te pasa? ¡casi me muero del susto!- protesté frunciendo el ceño.

     -Perdón- dijo riéndose todavía, se paró-. Tenemos que irnos, los soldados de Lydia nos encontraron e incendiaron el frente de la cabaña.

      -Pero es una cabaña de madera, el fuego se esparce rápido- hice una pausa- ¿de eso te estabas riendo?- negó con la cabeza- ¿entonces de qué?

      -De Cheshire- se dio vuelta y tomó mis manos con fuerza-. Necesito que vayas y despiertes a tus amigos, voy a intentar que tengamos más tiempo para irnos, con una barrera. ¿Esta?

      -Está- respondí. Cuando me empezaba a alejar de Apolo, me llamó.

     -Alicia- posó sus manos pálidas a cada lado de mi rostro-, quiero que me prometas que si la cabaña empieza a desmoronarse vas a irte, no importa si ya salieron todos o no.

    -¿Qué? No, no puedo.

    -Alicia, no vamos a dejar que se mueran, sacaría a tus amigos solo que no quiero que te esfuerces de más.

    -No va a pasarme nada- dije, y esbozando una sonrisa besé sus labios rápido y me fuí corriendo hasta la habitación de Hanzel y Peter primero para despertarlos.

    Entré al cuarto gritándoles que se despierten, se despertaron bastante más rápido de lo que hubiese supuesto, es que el calor y el humo no podían casi aguantarse. Fui al cuarto de Greta pero apenas rocé la perilla, ella abrió la puerta.

     -Tenemos que irnos- dijo saliendo del cuarto y yendo al de Lilian. Cuando abrió la puerta, Lilian la recibió tirándole una lámpara por la cabeza, Greta la esquivó.

     -¡Qué te pasa!- le gritó Greta.

    -¡Me asustaste!- contestó Lilian gritando, también.

     Ander apareció de otro pasillo junto a Crystal. Ian estaba atrás de ellos, se veía demacrado.

    -Nos vamos ahora- dijo Ander sacando un pequeño aparato del bolsillo de su pantalón que parecía un lápiz pero de metal. Apolo se acercó a nosotros y tomó mi mano entrelazando sus dedos con los míos. Ander clavó el lápiz metálico en el suelo, este liberó partículas azul brillante que se fueron pegando en nuestros brazos, piernas, espalda, hasta hacernos desaparecer de la cabaña y reaparecer fuera de ella. 

     -¿Qué es eso?- preguntó Hanzel señalando el lápiz.

     -Esto es un transportador- dijo Ander mostrándolo con orgullo.

GRETA

     -¿Y ahora qué?¿qué hacemos, a dónde vamos?- preguntó Peter.

     -Es obvio que no lo hay- dijo Lilian cruzándose de brazos.

     -Lilian, tendrían que llamarte la suertuda, es que si tuviera unas pinzas en mi mano te hubiera cortado la lengua- protestó Alicia.