Días de lluvia (editando)

capítulo XXVII día 13

Estaba tan cansada que parecía posible el haber caminado por horas.
El terreno era tan irregular que el agotamiento a fue notorio a los pocos minutos de subir la cuesta.
A pesar de tener la costumbre de hacer ejercicio esta vez la colina no fue amable con ella.
Tampoco el sr darcy lo estaba siendo.
Iba un poco detrás de él caminando mas despacio para que brouillard no se rezagara ya que aunque podía andar iba cojeando levemente.
Sus mejillas habían adquirido un tinte rojizo muy peculiar en ella.
Brouillard jadeaba y sacaba un poco la lengua evidenciando el esfuerzo que estaba haciendo para subir a la colina por el extremo mas difícil.
El señor darcy no dejaba ver alguna muestra de cansancio o agotamiento. Caminaba con pasos largos como su estatura y tenía por semblante un gesto serio.
Cuando llegó a la punta de la colina después de media hora, respiró profundamente y volteó hacia atrás.
Elizabeth y el cachorro venían a algunos metros de distancia con un ritmo bastante mas lento que el de él.
Ambos llevaban abrigo ya que el amanecer era claro pero frío, después de algunos minutos ella hubiese deseado no llevarlo puesto pero estaba segura de que en cuando dejase de caminar el frío volvería, era mejor no quitárselo.
Brouillard se lamió la pata y ella consternada, lo tomó en brazos para que ya no siguiera caminando.
Volteó hacia adelante y miró a darcy en la parte alta donde estaba a la sombra de un árbol, cualquiera que fuera su ánimo no hizo mella en el de ella que iba mas atenta del camino y de el animalito.
En un principio se le hizo raro que el fuera por delante y que no hiciera conversación siendo que el fue el primero en sugerir el paseo.
Pero alarmarse por algo tan extraño no estaba en sus planes, sabía o se daba una idea de lo que pasaba pero eso no quería decir que estuviera segura menos aun que el lo admitiera así que optó por ignorarlo y hacer como que todo iba bien.
-vaya tenía razón, este lugar tiene una mejor vista, creo que puedo ver el lago por completo
El asintió, pero no dijo nada
Lizzie también se quedó en silencio contemplando el panorama desde esa otra perspectiva.
El viento estaba frío pero no era tan fuerte solo lo suficiente para levantar los mechones de cabello alrededor de su rostro
-creo que debo descansar, ven pequeño
Fue a la sombra de el árbol y tomo asiento en una de las grandes raíces que sobresalían de la tierra.
El señor darcy permaneció en su lugar por algunos instantes y luego fue a sentarse junto a ella.
no estaba muy segura de que hacer, el silencio era extraño y solo atinaba a verlo de reojo, así que decidió mejor hacer caso a brouillard.
-que extraño -dijo darcy
Volteó a verlo
-tenemos mas de media hora de caminata, desde que salimos no hemos hablado y he cometido la descortesía de dejarla tras de mi ,mas aún ,usted ha sido quien me dirigió la palabra y yo no le he contestado... No piensa que pasa algo raro ni la veo molesta,¿ por que?
-bueno -dijo lizzie- no sé a que se deba ,debe tener usted sus motivos, si lo que le pasa le molesta no veo que pueda hacer yo para resolverlo,creí que si se lo doy a notar puede que se sientiera peor, así que lo mejor era dejarlo con sus asuntos para usted mismo y no inmiscuirme
-usted sabe como soy...
-entonces es mejor no preguntar -dijo sonriendo
Lizzie tenía toda la curiosidad del mundo por saber lo que le pasaba pero al mismo tiempo tenía temor de averiguarlo
La noche anterior solo le había deseado las buenas noches de forma escueta como si fuesen unos desconocidos, por la mañana había sido mas o menos lo mismo con el detalle de que le propuso caminar por otros rumbos.
Le aseguró que conocía un lugar del otro lado de la colina casi a las afueras de el pueblo ,pero tendrían que tomar un camino mas complicado para llegar.
A lizzie le gustaban las novedades así que aceptó.
Después de removerse un poco ,darcy con la cabeza baja dijo:
-estoy mal...muy mal
Lizzie lo miró sorprendida, sus facciones evidenciaban una mortificación profunda
-que dice? Que ha pasado?
El negó
-no me lo pregunte, usted en el fondo lo sabe
-yo? creame que no lo entiendo
El sonrió levemente
-no?
Ella negó y el la miró tan atentamente que ella tuvo que desviar la mirada y el se levantó algo turbado, puesto que encontró en sus facciones esa sinceridad que tanto admiraba
-es cierto! -exclamó incredulo- usted nunca...? Es decir, además de el señor collins...?
-que?
Con las manos en la cintura darcy la observaba de forma un tanto cínica y su sonrisa se amplió de forma extraordinaria
-no lo puedo creer! -dijo casi riendo
-puedo saber que le causa tanta gracia? Me gustaría ser participe del mismo chiste del cual creo, soy victima
No le contestó volteó a ver el panorama con la misma actitud que a lizzie ya le estaba pareciendo irritante
Volteó de nuevo
-así que nunca ha tenido pretendientes verdad? No sabe lo que es alguien que le preste atención?
Lizzie agradecía que sus mejillas estuvieran coloreadas por el ejercicio si no el sr darcy se hubiera dado cuenta de inmediato de su sonrojo.
-señor, creo que ese es un asunto muy personal que no me gustaría discutir con usted
-porque no? -Contestó resuelto - acaso no sómos amigos?
-es un tema inapropiado!
-y que? Estamos solos...yo no voy decir nada...usted tampoco
-ya le dije que no, además no se que tiene que ver con su ánimo...me parece algo no muy acorde con usted
- creo que mi imagen es lo menos importante ahora...además es solo una pregunta
Lizzie no sabía para donde voltear, así que para resolverlo tuvo que tomar una actitud mas resuelta y acorde con ella.
-esta bien... No, nunca he tenido lo que se dice un pretendiente... Digamos que han sido amigos
-solo amigos?
asintió
Volvió a sentarse junto a ella y empezó a reflexionar hasta que hablo en un tono bastante calmado
-verá ,elizabeth querida...estoy celoso
Ella estaba totalmente sorprendida y su cara lo puso de manifiesto, poco le faltó para irse de espaldas, finalmente lo había admitido y ella no sabía que decir
-por que se sorprende? esto es lo mas obvio, mi error fue suponer que usted ya lo sabía ...ahora me toca explicarle por qué...en primer lugar no soporto al señor morton, ayer fui amable con él para no hacer un desfiguro, pero debe saber que en mas de una ocasión tuve la fuerte necesidad de golpearlo...incluso lo hubiera hecho si no fuera por la señora blanche, pero me habría encantado romperle la cara de eso no tenga duda, si usted hubiese aceptado casarse conmigo-dijo con una sonrisa- cualquier hombre que se tomara ciertas libertades semejantes a las de él, tendría muchos problemas. Yo defiendo a los mios y en ese caso usted sería mas mía que todos los bienes que poseo...no se asuste por lo que le digo es algo que desde siempre he pensado y considero es lo correcto.
Después hubo un silencio demasiado tranquilo al menos de parte de él, que se sentía liberado .
Ella que no sabia que decir solo sostenía a brouillard con ambas manos
-bien -dijo él- es mejor que vayamos por aquel extremo, ahí está el lugar que quieto mostrarle
Lizzie no podía creerlo
-no! -dijo indignada- que le sucede, primero me dice todo esto y luego actúa como sin nada ¿para que?
Él que ya estaba de pié miró de nuevo el horizonte y le habló sin voltear
-para cuando lo conozca...para que no sea algo que le tome por sorpresa, es solo una advertencia
-a quien?
-al hombre con quien se case... Nos vamos?
-hay veces que usted me confunde de tal manera...
Volteó a verla con sonrisa tranquila para después indicarle el camino que debían tomar.
Ninguno de los dos volvió a tocar el tema.
Bajaron una vereda y salieron por un sendero de árboles en un terreno mas parejo que se veía mucho mas civilizado
- esto es diferente a lo que he visto antes, pareciera que alguien se ha esmerado por tener este lugar presentable -dijo ella
-mas o menos, este lado es usado por la gente del pueblo como parque cuando el clima es menos lluvioso ,ve aquellos árboles? -dijo apuntando con el brazo- no son iguales a los de el resto del bosque algunos son frutales
Elizabeth miró atentamente a su alrededor, las copas de los arboles eran enormes casi hacían la función de techos naturales ,los troncos eran anchos y el cesped era uniformemente verde y provocaba la tentación de acostarse sobre el
En un día soleado hubiera sido totalmente irresistible ir a un día de campo con sus hermanas.
-que le parece?
-que me parece? Es muy bello, por que nadie me lo había mencionado?
-no sé, suponga usted que no estábamos tan consientes, este lugar está diametralmente opuesto a las ruinas y la señora blanche no puede ir hasta allá, me imagino que de este lado debe ser mas complicado por ser cuesta arriba, de echo si encontraramos a alguien de el pueblo sería raro, ellos aprecian este lugar cuando llega el verano por que hay visitante curiosos, ellos mismos se lo reservan para cuando apetecen entretenerse en algo fuera de su rutina
-es muy triste...tener algo tan bello al alcance y no aprovecharlo
-triste no lo sé, tal vez extraño
Bajó a brouillard y lo puso en el pasto, el pequeño no se inmutó y solo se quedó tendido oliendo la yerba.
Escuchó con atención los sonidos que provenían de entre la copas y notó varios sonidos de pájaros cantando
Un vientecillo meció todas la ramas al mismo tiempo y el sonido fue como un murmullo.
Estaba frío pero era un frío que maravilló sus sentidos, era sutil y liviano.
Entre el pasto verde se veían restos de la lluvia del día anterior y de la noche, algunos charcos por aquí y allá eran básicamente la única mella que podía tener el parque.
-mire! - Dijo lizzie apuntando a un árbol lejano -no puede ser! Es de moras?
Ambos fueron y confirmaron que en efecto era una árbol de moras, y debajo de el había tantas manchas de color azulado que parecían gotas de pintura regadas.
-me encantan las moras, en casa hay un árbol pero es muy pequeño , este es bastante grande debo decirlo...quiero una
Alzó la mano cuidando de no acercarse mucho al tronco para no mancharse la falda del vestido con las moras tiradas en el suelo, las moras producen manchas difíciles de limpiar.
Tomó una y la probó
-un poco ácida, pero no está mal
Tomó otra y se la ofreció al sr darcy
-gusta?
El negó con amabilidad
-usted se lo pierde -dijo sonriente
Un ladrido la sacó de su distracción
-brouillard?
El perro ladraba hacia un matorral ,al parecer había visto algún animal
-tal vez es un conejo -dijo darcy
En efecto de entre las ramas salió algo parecido a un conejo que empezó a correr en dirección opuesta en cuanto oyó los ladridos. Brouillard tendría una pata lastimada pero eso no le quitaba el instinto ni las ganas de perseguir a su presa. De forma bastante rápida fue corriendo tras el adentrándose también de entre los matorrales. Elizabeth temiendo que se alejara mucho fue tras el.
-brouillard espera!
El sr darcy con un poco mas de calma la siguió de cerca.
El perro se detuvo frente a un árbol muy grande que tenía una madriguera en la base,
-vamos, dejalo ya
Cuando lizzie quiso tomarlo, el huyó y fue por detrás para seguir amedrentando
-tenemos un problema? -dijo con gracia
-no se burle, mejor es que me ayude, es capáz de quedarse aquí hasta el atardecer
-no tenga cuidado, es mas fácil que se vaya con nosotros a que se quede aquí, le propongo algo, alejemonos y verá como nos persigue
-esta seguro?
-a esa edad son muy falderos
Lizzie dudó pero le hizo caso y se alejó de nuevo hacia donde estaban antes
-verá que en un momento viene corriendo -la tranquilizó
Estaban a medio camino entre brouillard y el árbol de moras cuando el mencionado salió de entre las ramas
-lo ve? Ahí está
-ven -dijo lizzie extendiendo los brazos
El cachorro, juguetón corrió como pudo pero ya estaba muy inquieto como para solo dejarse cargar.
De una u otra forma arremetió contra el vestido de elizabeth y la jaló hacia adelante , no hubiese sido tan grave si solo hubiera jalado, el problema fue que se metió entre sus faldas haciendola trastabillar.
De inmediato darcy la tomó de un brazo para evitar la caída, pero no era suficiente.
Por desgracia y casualmente iban pasando junto a un charco de agua lo cual hacia mas resabaloso el terreno.
Darcy también perdió el equilibrio.
Cayeron ambos.
Mas específicamente cayó darcy encima de elizabeth. Con sus brazos a los costados de ella
Ahora estaban frente a frente y ninguno de los dos quitaba la vista de el otro.
Elizabeth se sonrojó , ahora sí notablemente y darcy estaba igualmente aturdido
- está usted bien... Elizabeth? -dijo con voz ahogada
Ella respiró
-si...
El se le acercó más y ella se quedó inmóvil como en una ensoñación.
Un ladrido los hizo despertar Y unas gotas de agua cayeron sobre su rostro.
Sin separarse ni moverse elizabeth habló.
-va a llover
Él asintió
-tal vez deberíamos irnos -dijo el
-podría...?
Darcy reaccionó y tuvo que levantarse muy a su pesar y ayudarla a ella.
-la sra blanche no estará contenta -dijo lizzie
Darcy le miró el vestido lleno de lodo y no pudo evitar reír
Ella hizo lo mismo cuando le miró a él
La lluvia comenzó a mojarlos
-excelente! -exclamo darcy- por lo menos llegaremos limpios!
-brouillard! Pequeño travieso tendrás tu merecido!
-posponga su castigo, ahora debemos irnos!
La lluvia no era tan fuerte , pudieron irse relativamente tranquilos, siempre cuidando por donde pisaban.
A darcy le parecía que brouillard era una pequeña molestia , había dejado de ser un infante hace mucho y las mascotas como tales ya no le llamaban la atención, para el los méritos que tenían eran con respecto a sus habilidades en la cacería y en cuanto a protección de una propiedad.
Esta vez tuvo que rectificar y mirar en el perrito una herramienta muy útil, cual era esta?.
Si sus habilidades de observación no lo engañaban -cosa improbable- ya que las había pasado por un filtro mas estricto para evitar las pasadas equivocaciones.
Al caer al suelo enlodado elizabeth se sostuvo de él agarrándose de el cuello y le miró de una forma diferente muy alejada de la consideración o el temor.
Tampoco podía decir "deseo" , sería muy arriesgado...si no mas bien anhelo.
Anhelo extraño y lleno de confusión.
-demelo yo lo cargo -pidió
-pero...
-algún problema?
-no -se lo dio extrañada, era la primera vez que realmente le ponía atención pero tenía otras cosas mas importantes por las que preocuparse.
Por ejemplo, lo que sintió al verlo a los ojos ;la sensación de ahogo que sintió y que la hizo respirar forzosamente y que no la dejaba en paz desde hacía cinco minutos.

Llegaron empapados pero no cansados, subieron a cambiarse ante la cara de asombro de la sra blanche y de henry que los vieron llegar desde la ventana.
Albert los miró pasar desde los establos ,levantó una ceja y empezó a negar y reír sin que se dieran cuenta.
Elizabeth no sentía tanta pena y alegría desde hace mucho tiempo, darcy que dejó a brouillard con la sra blanche experimentó algo parecido al agradecimiento a un ser no semejante.
-hagase cargo -le dijo- tratelo bien y dele de comer, está cansado
Le dio una palmada en la cabeza y subió a cambiarse la ropa mojada.
-que pasaría? -le preguntó henry
-no tengo la mas mínima idea -contestó la sra blanche mirando las escaleras.
Una puerta se cerró y todos volvieron a sus ocupaciones habituales.