Capítulo 1

1.6K 96 7
                                    

-Mi amor-corrió Lucero a los brazos de su novio, quien la atrapó sin pensarlo dos veces y la besó. Había estado de viaje y lo había echado mucho de menos, pero por fin estaba con él otra vez.

- ¿Cómo estás, princesa? -le preguntó con una mirada enamorada.

-Te extrañé mucho-respondió hundiéndose en su pecho.

-Pero ya regresé, no tardé mucho, ¿o si?

-Para mi si. Mi cama se sentía muy fría...-le dijo con una sonrisa bien pícara, típico en ella. Con el pasar de los años, aprendió a vivir sin ese odio y rencor dentro de sí, solo quería tener una vida normal junto a su novio, ese hombre al que tanto amaba y que tanto la amaba a ella.

- ¿Sabes? -dijo halándola por la cintura, besando su sonrisa después-yo también te extrañé mucho.

-Sé que te es imposible estar sin mi-le respondió entre risas.

-Eres insoportablemente creída-dijo tomando su maleta y caminando hacia la puerta con Lucero de la mano. -jamás imaginé que podría recuperarte, mucho menos que tendríamos una relación amorosa.

-Dímelo a mi...

- Todavía menos que me obligarías a dejar aquel mundo...

-Es muy peligroso, Fer. Es más fácil y seguro vivir como la gente normal y es todo más tranquilo, no por nosotros mismos, porque podemos cuidarnos perfectamente, pero ya sabes...

- ¿No lo extrañas?

-A veces, todavía me dan ganas de regresar y seguir arreglando la sociedad, pero Leah Fernanda merece una vida normal-dijo seria. -además...

-Lo sé, amor, sé que si no me salgo terminaré muerto. Aunque es discutible, si me salgo podría pasar exactamente lo mismo...

-No es eso lo que iba a decirte-dijo bajando la mirada.

- ¿Entonces? -le respondió. Lucero tomó una de sus manos entre las suyas y la posó en su panza. No le dijo nada, solo lo miró a los ojos con una sonrisa enorme en el rostro- ¿Estás segura? -estaba atónito, ella solo asintió. -Te amo

-Yo a ti. -Fernando tomó su rostro y le dio un besito en los labios.

- ¿Cuándo supiste? ¿de cuanto estas?

-Ayer supe, tengo 2 meses y medio. -su sonrisa cambió por preocupación en un segundo.

- ¿Qué pasa? -le pregunta Fernando acariciando su mejilla.

-Me da miedo, pues, ambos tenemos cola que nos pisen y personas que nos odian...

-Te juro que nada malo va a pasarle, el bebé y tu van a estar perfectamente, de mi cuenta corre.

-Yo creo que es niña-le dice sonriendo nuevamente con mucha ilusión, solo con él se sentía que nada nunca le pasaría, solo él le daba esa seguridad.

-Entonces tendremos una princesita rosa en casa.

-No seas tonto-le dijo entre risas-la Reina Negra está en mi pasado y ahí debe quedarse. Ahora llévame por helado, ya estoy teniendo antojos.

-Todo lo que quiera la princesa.

*Reina Negra*-escuchó decir, volteó con cara de espanto, no había nadie

*Señora*-escuchó ahora un tanto más alto, pero no podía ubicar de donde provenía esa voz.

- ¿Estás bien? -le preguntó Fernando extrañado

Jaque Mate [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora