The Wind

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La niña corrió y tocó varias veces la puerta de su casa asustando a su madre—¡Toc, toc!—repetía una y otra vez. Christi, bajó las escaleras y se encontró en frente de la puerta, cuándo la abrió se encontró a su hija con lágrimas en los ojos.

—Chloe, ¿qué sucede, pequeña?—Preguntó con preocupación.

—Me besó—dijo tocando sus labios.

—¿Paige?—preguntó su madre. La niña asintió—¿Y por qué estás llorando?

—Porque estoy feliz—Chloe contestó y tocó sus labios nuevamente mientras sonreía—La quiero—ella susurró y Christi sonrió ampliamente mientras abrazaba a su hija. 

—Eso es maravilloso, Chloe—La pequeña asintió mientras entraba a su casa y se dirigía a su habitación.

La pequeña rubia se sonrojo cuándo observó a la ventana y observo a su vecina saltando en la cama. Mierda, Paige saltando en la cama y gritando cómo una tonta, ¿Quién diría qué su seria vecina tenía esas etapas? Chloe sonrió y se acercó a su ventana y puso la palma de su mano en ella cómo si quisiese sentir a Paige quién ahora sonreía mirando a la nada.

—Cambiaste mi vida—la pequeña susurró.

...

—Feliz cumpleaños a ti, feliz cumpleaños a ti—Paige sonrió cuándo escuchó la voz de su vecina cantar por el pasillo de su casa—¡Toc, toc!—dijo al estar en frente de la puerta, Paige sonrió y se escondió detrás de la puerta y la abrió—¡Pai.. ¿Paige?—La niña entró a la habitación y miró a todos lados-¿Pay?-la niña sonrió traviesa y empezó a buscar bajo la cama, Paige sonrió, Chloe era una ternura—¡TE ENCONTRÉ!—Gritó abriendo la puerta del baño y su sonrisa bajó al no ver a Paige allí—Oww...—dijo con tristeza, Paige sonrió y lentamente se acercó a ella y abrazó su cintura detrás de ella besando su mejilla, la niña se ruborizó.

—Boo—Susurró en su oído con ternura.

—H-hola, Paige—la niña contestó con dulzura mientras con algo de vergüenza jugaba con sus dedos.

—Hola, preciosa—Chloe no pudo evitarlo, aún con su mirada clavada al piso sonrió ampliamente y de la nada se lanzó a los brazos de Paige abrazándola con fuerzas—¿Me quieres, Chlo?—Chloe asintió suavemente en el abrazo.

—Te quiero muchísimo, Paige—La niña respondió tiernamente—¿Quieres saber por qué lo sé?—Paige la miró fijamente y asintió—Sólo contigo quiero ser normal—Paige frunció el ceño.

—Chloe, no tienes qué ser normal, y..—Chloe la interrumpió.

—No sé cómo explicarte... Y-yo...—La niña pensó por un momento—Sólo quiero darte todo a ti—Paige sintió su corazón hincharse.

—¿S-si?

—Eres la única que quiero qué sepa todo de mi, qué tenga todo de mi y mis besos—Paige sonrió con dulzura y tomó su barbilla y la acercó lentamente a ella.

—¿Qué hice para merecerte? Si hace dos años lo único qué hacía era meterme en peleas—Chloe acarició su mejilla lentamente tratando de reconfortar a su vecina, la niña pequeña presentía qué Paige se había metido en desastres después de la muerte de su madre, ella no podía imaginar a su hermosa ojiazul sufriendo, así qué después de pensar en silencio y mirando a la nada cómo por 1 minuto, soltó un quejido de sorpresa y preocupación mientras miraba a la rizada y la abrazó con fuerzas.

—Ya nunca estés triste, me mereces, mereces yo y más—dijo con ternura. Paige rió y besó su frente—Quiero mostrar algo a ti—Paige sonrió con ternura.

This Broken Sound p.h, c.lDonde viven las historias. Descúbrelo ahora