IX~ Salvada

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Pensé que sería una broma, que no volverían a llamarme ni a molestarme...Mierda estaba nerviosa... ¿¡Y AHORA QUE HARÍA!? No podía volver a encontrarme con ellos, no, no podía.

Tenía que despejarme así que cogí la bicicleta y me encaminé al pueblo. Allí todo estaba igual, bueno Nerea no se como quieres que este si sólo han pasado unas horas...

Me acerqué a la tienda donde vendían la comida, no era un supermercado ni nada por el estilo, en un pueblo pequeño no había nada de eso. Compré patatas, aceite, agua embotellada, bainas, carne y pescado.

Salí de la tienda y me encontré con aquellos chicos que el primer día nada más llegar al pueblo y bajar del autobús me llamaron de todo, y por lo que veía no sólo me lo hicieron a mi, una chica morena con el pelo rizado se alejaba de ellos asustada.

Dejé las bolsas dentro de la tienda, la cajera me dijo que las cuidaria y fui corriendo hasta donde los chicos esos habían acorralado a la chica del pelo rizado

-Vamos, ven aquí, no se por que te escapas

La chica estaba tan asustada que no podía ni hablar

- Sí, ven guapa, no te vamos a hacer nada que no te guste

Asco de tíos... Cogí una pala que había por allí y les pegué un palazo a los dos en la cabeza, no para matarles ni nada sólo para dejarles inconscientes.

-Gra... gracias

-De nada, tranquila, a mi también me pasó

-Me llamo Ane, encantada, y de verdad no se como agradecertelo

-De verdad que no tienes que agradecerme nada. Anda vámonos de aquí antes de que estos dos se despierten.

-Sí tienes razón, vamos.

La invité a mi casa. Parecía una chica maja y estaba muy muy asustada. Normal, a esos tíos tendrían que encerrarlos

-A esos tíos tendrían que meternos en la cárcel, mañana vamos a la policía y los denunciamos, ¿Que te parece?

-Me parece bien Nerea, ¿Me acompañaras?

-Claro, ¿Mañana a las doce?

-Vale

Llegamos a mi casa y la invité a tomar un té, seguía nerviosa. Estuvimos hablando un buen rato hasta que se hizo tarde y Ane marchó. Era una chica muy simpática y de mucha conversación.

Subí a la habitación y encima de ella había una nota dividida en dos:

"Muy guapa tú amiga, presentamela ;)" Zayn

"A mi me sigues gustando tú mas, y todo lo que tiene que ver contigo. Grr ;)" Harry

Esto ya era de locos. Guardé la nota y me fui a dormir, mañana sería un día nuevo.

Me desperté a las 11 de la mañana, mierda había quedado con Ane a las 12. Me duche corriendo y sólo desayune una manzana que me comí por el camino. Llegué al cuartelillo puntual, ella ya estaba allí.

- Oye Nerea, ¿Quienes son esos que vienen detrás tuyo?

Miré para atrás y venían Zayn y Harry andando, MIERDA.

-No... no los conozco

Llegaron a nuestro lado, Harry se puso al lado mío y Zayn al de Ane

-Como que no nos conoces, ayy pero que chica mas bromista -Dijo Harry cogiendome de la cintura

-Sí, ya... -le intenté quitar la mano pero no me dejó, este chico era persistente

-¿Bueno por que no entramos al cuartelillo? -dijo Zayn sonriendo a Ane

-Claro vamos -dije yo

Nosotras fuimos delante y ellos detrás, oímos unas risitas pero no les hicimos caso. Entramos y Ane habló con los policías, les dijimos como eran físicamente y donde les dejamos. Los policías nos dijeron que ya nos avisarian. Salimos del cuartelillo y empezamos a hablar

-Bueno pues ya está, ya nos avisaran

-Sí, anda vamos a mi casa

-¿Vosotros venís? -dijo Ane

-Claro -dijeron los dos a la vez

No las tenías todas conmigo, no me hacia mucha gracia pero bueno sí a Ane le alegraba pues lo haría.

Llegamos a casa y ellos se sentaron en el salón, yo fui a la cocina. Salí con 4 basos de agua para todos y los coloque delante de cada uno

Estuvimos un rato hablando hasta que Harry me dijo sí podía ir con él a la planta de arriba, no sabía que hacer pero Ane me dio un codazo en el brazo y al final acepté

Subimos las escaleras yo delante de él y me paré al final de estas

-¿Bueno Harry, que quieres?

-Aquí no, ven

Entramos a mi habitación

-Bueno que qu...- me cortó poniéndome el dedo índice sobre los labios

-No digas nada, sólo déjate llevar

Empezó a tocarme los labios con su dedo pulgar

-Son tan gruesos que dan ganas de -los miro con deseo y los mordió -Ummm Oh Dios.

Mordió mi labio inferior con deseo y de morderlo pasó a besarlo con pasión. Era tan increíblemente guapo y sexy. Cogió mis manos y las puso en sus nalgas, hizo lo mismo con las suyas y empezó a tocar mi trasero hasta que me subió y mís piernas rodearon su cintura. ¿Que estaba haciendo? No... no, tenía que parar.

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Siento no haber escrito estos días pero he estado de exámenes, de ahora en adelante escribire más. Un beso :)))

En el bosqueDonde viven las historias. Descúbrelo ahora