15.

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Los domingos por la mañana son siempre un gran suceso en mi casa. Primero, mi madre nos despierta, y luego vamos a la iglesia. A mamá le gusta ir temprano al servicio porque... bueno, simplemente le gustan las mañanas, y punto.

Normalmente estoy demasiado somnolienta para hacer algo, salvo no quedarme dormida, pero ahora no puedo dejar de pensar en la noche anterior. Acerca de cómo se veía Zaides cuando su madre estaba hablándole; agotada, triste y derrotada, de una forma en la que Zaides sólo luce en casa.

Yo debería haber dicho algo más, algo que hiciera a su madre ser más agradable.Debería haber... quizá nada de lo que pudiera haber dicho a la mamá de Zaides habría importado, incluso ser escuchado... pero podría haber hecho más. Podía haber hecho venir a Zaides a pasar la noche conmigo. Podía haberla llamado cuando llegué a casa y verificar por segunda vez para asegurarme que estaba bien. Podría dejar de querer a su novio.

Podría dejar de pensar en Zayn diciéndome que era a mí a quien había llamado esa primera vez que él y Zaides hablaron por teléfono.

En casa después de la iglesia, necesito un respiro de mí misma y de mis pensamientos. Me puse mis jeans favoritos y una de las viejas camisas de abogado de papá, de algodón azul oscuro que es suave contra mi piel y cuelga lo suficiente floja para lo que viene a continuación, que es el desayuno del domingo, y lo preferido por mamá para cocinar.

Mamá ama cocinar, pero los domingos por la mañana saca todo por lo alto, porque la comida favorita de papá es un gran desayuno y una vez a la semana a mamá le gusta "complacerlo". Francamente, a veces me pregunto cómo sobrevive sin mamá. Sé que lo hizo, ella no había ni nacido hasta que el fue mayor de lo que soy ahora, y no se conocieron hasta que él estaba en sus cuarenta y ella estaba terminando su doctorado, pero aún así. Es como si siempre hubieran estado juntos y ella, ella verdaderamente lo ama y quiere que esté bien. Tan bien como pueda estar.

Hoy hizo tostadas francesas rellenas, llenando piezas de pan de huevo y mantequilla con una mezcla de crema de queso y helado de arándanos que había descongelado en la noche, y una frittata, que es básicamente un enorme pan lleno de huevos horneados, queso y verduras. También hay tocino, y zumo de naranja que ella misma exprimió.

-Kathy, ¿has mandado esta receta de tostada francesa a algún lugar? -dice papá cuando se centra en su desayuno, y mamá niega con su cabeza, sacando su cuaderno de recetas de concurso. (Por supuesto que tiene uno, en realidad, más de uno. Están por toda la casa. Y en su coche).

-Las entradas del desayuno son generalmente algún tipo de pan o pastelitos -dice mientras escribe-. Creo que la siguiente gran cosa serán panqueques que han sido convertidos en algún tipo de plato en capas. ¡Lasaña de panqueques! Oh, con sirope como salsa, y tal vez chocolate de avellanas esparcido como queso... -se fue callando poco a poco y comenzó a escribir más rápido, afuera de la zona de cocina de creación.
Papá sonríe y palmea su mano no escritora.

-No te olvides de comer -le dice, y mamá asiente, y picoteando un trozo de beicon y acercándolo a su boca mientras escribe. Papá comienza a reír de inmediato. Yo resisto un poco más de tiempo, pero luego estoy riendo también.

-Oh, silencio -dice mamá, sonriendo y al fin llevándose el beicon a la boca. Después de tragar, dice-. ¿Henry como esta tu cadera?

-Se siente mejor que ayer.

Mamá lo mira, -¿ Vas a llamar al doctor mañana?

-Por ti, cualquier cosa. -Le dice papá sonriéndole, y mamá le devuelve la sonrisa, entonces me miran a mí-. Me sorprende que Zaides no esté aquí. Ustedes dos, bueno ustedes tres ahora, supongo desde que parece ser bastante serio lo de Zayn, han estado muy juntos últimamente.

-¿Tenía Zayn un amigo para ti? -dice papá.

-Papá, yo no... ¿Podemos no discutir mi vida social? -o la carencia de la misma.

-No estoy discutiendo. Estoy preguntando. Zayn parece buen chico, así que pensé que tal vez conociera a alguien que pudieras...

-¡Papá! -dije de nuevo, y él mira a mi madre, quien niega con la cabeza hacia él.

-Conocerás a alguien -dice ella-. En algún lugar ahí fuera está el chico perfecto para ti, ______ Bear.

Lo está. Su nombre es Zayn, y no puedo salir con él porque está saliendo con mi mejor amiga.

Pero lo he besado.

-Estoy llena -digo, empezando a alejarme de la mesa-. Me voy a trabajar en mi tarea.

-¿No quieres salir?

-Mamá, todavía no son las once, nadie que conozca está levantado.

-Oh, por supuesto que lo están -dice, como si todo el mundo se levantara al amanecer los fines de semana-. Porque, Zaides normalmente ya estaba aquí.

-Si -murmuro y salgo de la cocina, me dirijo arriba a mi cuarto. Mamá tenía razón. Zaides normalmente está aquí. Normalmente la llamo cuando vuelvo a casa de la iglesia, incluso antes de cambiarme de ropa, y viene a comer con nosotros.

Pero hoy, no la llamé. Hoy había estado intentando pensar en ella, me dije a mi misma que pensaba en ella, pero no lo estaba. No realmente. No como debería.

Seguía pensando en Zayn.

Seguía pensando en Zayn, y no la había llamado porque me preguntaba si él me llamaría. Si hablaríamos sobre la noche pasada, o el beso, o ambos. No la he llamado porque si lo hago y él está con ella, no seré capaz de fingir que puede que le guste.

Y yo quiero.

Quiero fingir que hay un ―él y y. Quiero fingir que la primera vez que llamó a Zaides había sido diferente de lo que fue. Lo que ocurrió la mañana después de aquella fiesta de fin de verano fue esto:

Zaides estaba lista, probándose algunos de los pintalabios de mamá y dejándolos tan pronto como se ponía uno porque no le gustaba ningún color, y el teléfonosonó. Yo contesté, dije. -¿Hola? -y Zayn dijo-: Hola, ¿______? -y el corazón me latió en el pecho. Me sentí extrañamente débil pero feliz, apoyada contra la pared cuando Zaides me miró entornando los ojos y Zayn dijo-: ¿______?

Yo dije: -¿Zayn? -con su nombre saliendo como un chillido, y entonces hubo un silencio, un doloroso y lento silencio en el que yo sabía que tenía que decir algo pero quería que él dijera lo que fuera porque la última noche habíamos hablado, había tocado mi mano y había tenido esperanzas pero entonces él se puso a salir con Zaides.

Con Zaides, quien estaba sonriendo y alisándose el pelo aunque yo fuera la única persona alrededor. Quien me estaba indicando con la mano que le pasara el teléfono.

La miré fijamente y ella me susurró: -______, ¡me ha llamado aquí! Y después de que apenas mencioné que probablemente te vería aquí. Definitivamente le gusto.

-Esto, am, ______ -dijo Zayn, y Zaides dijo-: Dile que no estoy aquí. No, espera, di que estoy aquí. Oh, esto es tan romántico. Como, romántico de película. ¡Me llamó aquí! -se tocó la boca con los dedos de una mano y sonrió, perdida en sus recuerdos, y yo sabía que en lo que estaba pensando.

Se habían besado. Yo lo había visto. Se habían besado y lo había visto mirándola, todos los chicos la miran, todos los chicos la quieren, ¿cómo no iban a hacerlo? Ella era Zaides, era preciosa. Esa era ella.

-Espera, Zaides está aquí -dije, y tragué el estúpido nudo de dolor que atascaba mi garganta.

Y eso fue todo. Me paré durante unos momentos, observando a Zaides sonreír, escuchando su risa, y escuchando su parte de la conversación: -¿En qué has estado pensando toda la noche? Yo también. ¿Qué? ¿Quieres hablar con ______ ahora? No sé si puedo permitir eso. Apuesto a que le preguntarás qué he dicho acerca de tu técnica de besar, y, bueno, me temo que no tiene suficiente información para formarse todavía una opinión real. Necesito más muestras, sabes. Pero ______ dijo que éramos perfectos el uno para el otro. Sí, lo dijo. Escucha: -me sonrió burlonamente y sostuvo el teléfono, esperando.

-Perfecto -dije, levantando un poco la voz, para que Zayn pudiera oírme,
y Zaides rió tontamente volviéndose para hablar con él. Me salí furtivamente de mi propia habitación como si no fuera mía en absoluto y me senté en las escaleras tratando de no llorar. Pensé que Zayn me había llamado a mí. A mí.

Me permití pensar eso una vez, sólo una vez, y después lo olvidé. Me hice olvidarlo. Tenía que hacerlo.

Tenía que hacerlo porque vi a mi mejor amiga empezar a verse con él. Observé que a ella empezaba a gustarle de verdad. Vi cómo sus ojos relucían cuando veía a Zayn de una manera en que nunca lo hacían por cualquier otro chico. Los vi juntos, no durante una semana o incluso dos, sino durante un mes. Ahora casi dos.

Pero ahora Zayn y yo nos habíamos besado, y dijo que quería hablar conmigo cuando llamó. Quería hablar conmigo.

El teléfono suena entonces y salto. Espero, sin aliento, a que alguien conteste y oigo la voz de mi padre.

Espero a que él diga mi nombre.

Pero no lo hace.

Finalmente llamo a Zaides por la tarde. Se está preparando para salir y dice que ha estado evitando sus llamadas pero "lo cogí porque eres tú y te adoro". No hago preguntas, no digo "¿A dónde vas a ir?"o "¿Con quién vas
a ir?" No quiero oír sus respuestas.

-¿Te veo mañana? -dice, y yo digo-. Por supuesto. ¿Quieres conducir, o iras en el coche de Zayn? -ni siquiera vacilo cuando digo su nombre.

-Conduciré yo -dice-. Oh, voy a irme. ¡La diversión espera!

-Ve por ella -digo, y me siento allí después de que ha colgado, sin pensar en nada ni en nadie en absoluto. No es...no es fácil, lo cual es extraño, pero no puedo continuar haciendo esto, no puedo continuar jugando al ―Y si...‖. Tengo que recordar cómo son las cosas.

Cuando el teléfono suena después de la cena, contesto, imaginando que será alguna de las amigas del concurso de mamá llamando tan preocupadas por el fin de semana que llegaba, que era cuando los finalistas del Concurso de Cocina Familia Fabulosa. Pero es sólo un número equivocado, alguien que cuelga tan pronto como oye mi voz. Intento no tomármelo como algo personal, pero no puedo evitarlo. Siento pena de mí misma. Me siento sola. Ojala el beso nunca hubiera ocurrido.

Ojala nunca hubiera ocurrido porque entonces no pensaría en ello cuando me estoy durmiendo.

No despertaría ruborizada, con mis brazos rodeando la nada. No estaría preguntándome lo que hagan Zaides y Zayn hoy.

No estaría preguntándome si él pensaba en mí.

La regla no escrita {Zayn Malik}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora