Algunas veces hasta los monstruos de historias de terror tienen más conciencia y valores que simples humanos.
Recuerda que los verdaderos monstruos no están a la vista de todos.
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❝ Visitas ❞
Perpleja con lo ocurrido minutos atrás y cansada, no podía conciliar el sueño aún. Daba vueltas en la cama, sintiéndose un poco vacía después de que él la dejara allí sola. Realmente no debería haber esperado mucho del encuentro. Él era, después de todo, una criatura egoísta. Solo toma y bota como siempre.
¿Por que carajos quiso sexo? El no era una criatura que intimara en realidad, si quiera tenía un género propio y definido.
Ella estaba en un lugar vulnerable después de permitirle lo que quisiera experimentar con ella.
Se sentía usada como años atrás. Solo la usan y apenas terminan se marchan como si nada. Si quiera dijo algo hasta que ella hablo.
Eventualmente, pudo caer en un sueño inquieto que le permitió descansar. Tomo la sabana mientras se cubría, ni importancia le dio al hecho de estar desnuda y con unos ligeros puntos rojos sobre su seno derecho. La marca de que él estuvo con ella.
Sentía la cama inmensa y fría hasta que se acurrucó con la almohada y se durmio al fin.
A la mañana siguiente despertó por las llamadas y mensajes de su teléfono. Estiro el brazo para encontrar a su celular con un montón de notificaciones y marcando las 12:14 horas.
Se sorprendió de la hora. ¿Por cuanto durmió?
Se levanto rápidamente para tomar una ducha rápida para quitarse los rastros de horas atrás, se percató que su menstruación bajo manchando con una linea sus piernas.
Genial, lo que faltaba.
Se vistio rápidamente para dirigirse a la farmacia de la ciudad por toallas femeninas. Al menos era una manera de dejar de pensar en lo que pudo haber sido el mayor error de su vida la noche anterior.
Afortunadamente, la farmacia estaba cerca. Aprovecho de comprar toallas sanitarias, pastillas para el dolor menstrual, una crema para el dolor muscular y recargar su teléfono. La mujer que le atendía era una con el nombre de Gretta y con una actitud odiosa.
Realmente no tenia tiempo para decirle unas cuantas verdades por atenderla tan mal.
En la noche anterior ni en su intento de establecer una charla con un Pennywise ebrio, se estreso.
Genial, ya volvía a pensar en el. Apenas eran pasado medio día y ya su día era malo.
—Gracias —Hablo cínicamente al tomar su tarjeta de crédito de los dedos regordetes de la mujer que miraba la tarjeta de crédito.
Gretta, al igual que cuando era una niña, tenía el chisme en la punta de la lengua. Ver la apariencia de Amber quien no tenía ni rastro de maquillaje y el hematomas del ojo y el labio partido la hacia incluso lucir imponente la dejo aturdida. ¿Quien era esta mujer?