El largo camino celeste.

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-¿A donde vamos?. Fue la pregunta que hice cuando el empezó a correr hasta adentrarnos al parque sin soltarme la mano.
-Acá estamos. Dijo mirando un camino celeste como mi cabello.
-Yo-dije levantando lo mano como para hablar en clases-opino que me tendrías que contar. Dije aún con la mano levantada.
-Vamos. Él agarró mi mano y comenzamos a caminar por aquél camino.
-Basta de tanto drama o suspenso o lo que sea, solo dime donde nos dirigimos. Le dije algo confundida y sus ojos casi verdes me miraban con su característica sonrisa en su perfecto rostro. Sigo sin entender como no está de novio.
-Solo sigue y el caminó te llevara a donde vamos.
Suspire y seguí caminando mientras que él solo miraba hacía adelante algo contento, mire hacía el piso observando aquél piso, estaba hecho de baldosas todas azules pero diferentes, era demasiado creativo para estar en un parque y no en un museo.
Mire hacía atrás para ver lo que ya habíamos caminado y había familia, amigos y parejas que seguían el camino sin pisar el verde césped que se encontraba alrededor, miré hacía adelante y también había gente caminando.

-¿Seguro que no te pusieron un chip acá-dije señalando el costado de su cuello-haciéndote creer que era algún GPS para el gobierno para qur supuestamente te tengan controlado si te vas o no del país pero en realidad es un chip que cuando apretan un botón te controlan como un robot así como en divergentes? Porqué me lo tendrías que decir ahora si sos de osadia para saber que soy una divergente y ayudarte aunque vos serías como el amor de mi vida, me tendrías que ayudar también. Él me miró raro y después de un rato habló.
-¿Que dijiste al último? ¿que yo sería que tuyo?.
Abrí mis ojos al recordar lo que había dicho " aunque vos serías como el amor de mi vida" EL AMOR DE MI VIDA, ¿enserio le dije que sería el amor de mi vida si estuviéramos en la película Divergente? ¿me matan por estúpida por favor?.
-Tierra llamando a la linda chica de pelo celeste que tengo a mi lado. Escuche a Rubén.
-Nada-respondí nerviosa-¿ya llegamos? Me está agarrando hambre. Pregunté para cambiar de tema, él solo me miró raro por mi pequeña risa nerviosa que salió al terminar la oración.
-Ya llegaremos aguanta un poco. Sonrió mientras seguía caminando.
-

No puedo esperar, no me gusta esperar.
-Tranquilizate que a mi tampoco me gusta esperar y aún sigo esperandote con una sonrisa-miré hacía el piso sorprendida por su confesión aunque prácticamente no es la primera vez-¿quieres que te lleve?. Me miró con esa sonrisa pícara, algo esta tramando.
-No creo que puedas aguantar esto-Señalé mi cuerpo y él solo rodó sus ojos- ¿estas seguro?.
-Claro que lo estoy. Suspire y dejé de caminar.
En realidad no tenía problema de subir a su espalda por que estaba bastante cansada pero él podría tener "problemas" por así decirlo como salir en alguna revista diciendo que podría ser yo la novia, en ese entonces podrían hablar las criaturitas, tengo amigas que lo ven, mis conocidos se enterarian de la noticia, me hablarían y preguntarían, entre ellos la peor situación sería Matías, hay alguien que él odia u es a mi mejor amigo, si por casualidad ve una noticia referida a novios o algo por el estilo y una foto en la que salgo yo con Rubén estaría en problema yo en ese momento sacando el pequeño detalle de que es celoso, demasiado diría yo.
Él estaba frente mio mientras que las personas pasaban por nuestro lado mientras que yo pensaba en los tantos problemas que podría a ver.
-Pequeña ¿en que piensas?. Me preguntó tiernamente empezando a caminar de nuevo y lo seguí.
-En los tantos problemas que podríamos tener si solo me subo a tu espalda-dije aún pensantiva sin dejar de mirar el piso y él solo largó un suspiro y rió-no te rías, no es gracioso. Comenté sin entender todavía la gracia de los problemas.
-Es raro verte preocupada en problemas, tu la mayoría de veces no te preocupas por nada-lo miré sin entender- ¿es enserio Mérida?.
-¡Claro que es enserio! Obviamente me preocupo de los problemas. Dije orgullosa de mi responsabilidad y el sonrió a lo que me hizo sonreír a mi.
Lo diré una vez más, amo su sonrisa.
-Meri ¿no te acuerda de lo que hiciste en el hotel en Argentina?-tendría que a verme quedado callada aunque no lo admitire, solo sonreí y me hice la desentendida ¿notó que yo si me acordaba?- claro que tu no te haz olvidado, entraste al hotel sin permiso mientras que los encargados te seguían y en las escaleras algo hicisteis para que demoren y no te detengan y ahi fue cuando tu te metiste en mi cuarto-tomó aire- no te hagas la desentendida por que no te olvidaras nunca coño.
Okey, okey si lo notó pero ¿que más puedo hacer? ¡nada! Porque no me arrepiento asi que nada más quedaba por hacer que la desatendida hasta este momento que ya lo notó.
Y antes de que pudiera contestar note un gran parque de diversiones al final del larguísimo camino celeste a lo que sonreí sabiendo que en realidad quedaban solo unos pasos para llegar.
-Está bien, obviamente me acuerdo pero esa es una Meri que quedó en el pasado ahora está la renovada Meri. Pasé las manos por el costado de mi cuerpo sin tocarlo mientras que di una vuelta en puntita de pies y el río.
Seguí caminando mientras reía hasta que pasamos por la boleteria, él pagó y yo pasé.
Lo primero que vi fue un gran escenario, había unos cuantos trabajadores sobre el con escaleras y tachos de pintura, lo estaban terminando. A la izquierda de este escenario había un pasillo a donde habia a los costados puestos de pequeños juegos y comida y a la derecha separado por otro pasillo una gran montaña rusa con una larga fila de personas entusiasmadas por subir a aquél juego. Di vuelta para ver a Rubén, él estaba ahi parado observandome.
-¿Pasa algo?. Pregunté mirándolo.
-Nada es solo que, fue linda la imagen tuya impresionada. Dijo sin sacar la sonrisa de su rostro.
-Es que no me esperaba algo así. Sonreí y me di vuelta para volver a observarlo, era lindo ver tanta gente riendo, muchas luces, era verdaderamente un lindo parque.
Él se adelantó unos pasos adelante de mí, estiró su mano y con una sonrisa preguntó: ¿vamos? Sonreí tomé su mano y nos dirigimos hacía los pequeños juegos.


Perdón tuve problemas pero acá está y trataré de no retrasarme.
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Muchísimas gracias y nos vemos en el próximo capítulo.

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