Daño.

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-el no me hará daño -dije, no sabía si lo decía en afirmación o para tratar de convencerme a mi misma, pero de todas formas me dio confianza-

-estará aquí en un segundo -afirmó la rubia con una pequeña sonrisa y después de unos segundos, el castaño ya estaba aquí, la rubia salió dejándome a solas con el-

-hola... -murmuró Spencer, al escuchar su voz algo se rompió dentro de mi, corrí a el y lo abrace escondiendo mi cabeza en su pecho, el acaricio mi cabello y me apretó contra el mientras yo lloraba- debí estar ahí, no dejarte sola, yo debía...-

-estaba tan asustada, pensé que yo mori...-el me callo con un "shhh" y beso mi frente con cariño, como si fuera una niña- quiero ir a casa-

-nos iremos en un momento pero Tory, debes hablar con otros hombres ¿entiendes eso, no?-

-no quiero...-

-vamos a casa -el jalo un poco mi mano mientras me guiaba a la puerta, ya fuera baje mi mirada al suelo, tenía miedo de ver a lo que me estaría ahí, así que preferí evitarlo- iremos directo al auto ¿bien?-

Asentí sin decir palabra, el con delicadeza me fue guiando, yo apenas estuve dentro de la protección de vehículo solté un suspiro, en el viaje Spencer colocó canciones de Adele logrando relajarme.

-nos quedaremos en mi apartamento, no creó que sea bueno regresar donde... -Spencer comentó pero al final se quedó callado-

-donde me secuestraron -termine con amargura-

El no dijo nada más, no parecía incómodo pero si algo dolido, sabía que se culpaba pero el no debía,a culpa era solo mía, por no darme dado cuenta antes y no hacerle caso antes.

-¿Steve esta aquí? -pregunte pero justo al entrar sentí unos brazos abrazarme fuertemente por la cintura, mi sobrino me apretaba con fuerza mientras lo escuchaba llorar tuve que mantenerme fuerte para no imitarlo-

-estas bien -repetía y al separarnos me di cuenta de la sonrisa que se dibujaba en su rostro-

-estoy bien -afirme, pero no sabía si era el todo verdad o no-

-te extrañe, mucho-

-feliz cumpleaños, perdón la tardanza -me burle, mi pequeño sobrino bajo la mirada triste y yo bese su frente- te haré otra fiesta lo prometo-

-no me molesta la fiesta -se apresuró a explicarse- sólo me puso triste, pensar que yo estaba aquí bien y tu...-

-ya basta lo dos, vamos a ver películas y comer algo de helado ¿que les parece? -propuso Spencer con una sonrisa y pasando su brazo por mis hombros-

-claro que si, genio-

Dos mes después, seguía estando bajo la estricta mirada de los superiores, quienes no sólo vigilaban que no hubiera algún problema sino que me habían pedido cordialmente (por no decir que me obligaron) a tomar consultas con un psicólogo, no era que no me gustaran las consultas pero... Era algo molesto ser tratada con tanta delicadeza, ya lograba hablar con normalidad con hombres y de volver a tratar con las personas con más normalidad. Pero dudaba que me volvieran a llevar a cualquier caso, no después de sufrir un trauma como este.

-Tory ¿me estas escuchando? -preguntó Spencer, yo lo mire con una sonrisa apenada- te decía que los cambios atmosféricos afectan más allá del clima si pensamos en...-

-¿Spen?-

-¿si?-

-¿puedo contarte algo, pero juras que no me darás luego un sermón? -esto lo llevaba pensando todo el viaje al FBI, yo había suplicado por volver a mi puesto de forense-

-claro que si -aseguró el castaño, fruncio y ceño luciendo confundido-

-quiero trabajar en una unidad -solté de golpe sin esperar una buena reacción por parte de el, lo conozco y se que no sólo no se lo tomara bien, sino que también no le importaría ir en contra de su palabra sólo para hacerme recapacitar-

-Tory ¿te escuchas a ti misma cuando hablas? -preguntó el claramente molesto, yo lo mire mal antes de suspirar pesadamente y mire de nuevo el camino- no te debes enojar conmigo, sabes que lo hago porque...-

-¿por que no te callas y conduces? -Murmuré la pregunta con amargura, tanta que sabía que aquello le había dolido más de lo que me dolió a mi decirlo, nunca en todo este tiempo había mandado a callar a Spencer, se sentía mal, e incluso más al ver de reojo su rostro triste-

No hubo más conversaciones, yo baje sin esperarlo y en vez de ir por el ascensor tome las escaleras... No fue del todo una buena idea pero al menos me salte la parte del silencio incómodo y de mi arrepentimiento. No había mucho trabajo que hacer en el laboratorio, así que una vez termine de hacer unos informes fui directo al último piso, por el ascensor esta vez, no cometería el mismo error dos veces. Dentro los agentes iban y venían ajetreadeados, eso sólo significaba algo, un nuevo caso.

Con cuidado de no chocar con algún agente fui a la sala de reuniones, ahí estaban todos menos JJ y Spencer, Morgan la verme sonrió amable al igual que los demás.

-hola, Tory -Garcia me abrazo fuertemente- ¿que te trae a la boca del lobo?-

-pues... -dirigí otra mirada a la puerta, la cerré a mis espaldas y todos parecieron interesados- quería hablar algo con ustedes, creó que es buen momento aunque no este JJ-

-se te olvido tu querido Spencer -trató de burlarse Emily, pero al ver mi semblante serio dejó de sonreír-

-es justamente lo que quería, hablar con ustedes sin que este el-

-no entiendo a que quieres llegar -Rossi parecía como siempre, demasiado controlado para parecer real-

-quiero entrar a trabajar en la unidad-

Mi confesión rápida hizo que todos se callaran así que tome aire para continuar.

-Spencer este enojado por eso, pero el no puede impedir que yo haga lo creó correcto y...-

-Tory, acabas de pasar por algo muy difícil, es sólo algo del momento, piensalo un poco -empezó a decir Hotch pero lo mire dolida-

-dejen de hablarme así, soy perfectamente capas de entrar a trabajar en una unidad, estoy bien -aunque no sabia si eso era del todo correcto- puedo disparar, soy buena en el campo, tu mismo lo dijiste... Puedo hacerlo, sólo deben dejarme de tratar de esa manera-

-¿de que manera hablas? -preguntó Garcia, quien parecía algo afectada con toda la discusión-

-como si fuera débil, cosa que NO soy, no soy una niña que no puede enfrentarse a las cosas que hay ahí afuera, yo puedo hacerlo, y yo quiero ayudar a las personas, quiero detener a todos los malditos como Ian y ponerlos en una cárcel hasta que se pudran -incluso a mi me sorprendió el tono furioso en que hable-

-¿que tal si lo piensas un poco? -sugirió Morgan-

-dejame ayudar, por favor -le pedí a Hotch- soy capas de hacerlo, tu mismo lo dijiste-

El líder del grupo lo pensó por un momento, si decía que no, era por lo ocurrido con Ian, si decía que sí era porque realmente el pensaba que había superado todo aquello, fuera cual fuera su respuesta, la espera ansiosa.

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¿que le dirá Hotch? ¿Donse están Spencer y JJ? ¿Garcia será una chica demasiado bella? Descubranlo en el siguiente capítulo de Criminal Minds... Okay ya xD voten y comenten, que se agradece :)

Criminal Minds |Specer Reid| (Por Editar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora