Destino inexorable.

Por poco.

Corrieron hacia la puerta como si se encontraran a kilómetros. El primero en salir fue Tim y le dio con tanta fuerza que repicó en la pared y casi se la estrella a Derek en la cara.

En el lobby se encontraba Amanda. Estaba transpirando y tenía la cara pálida. Tim y Derek la vieron y se preguntaban qué había sucedido. Cuando saltaron el pequeño muro divisor y ya estaban en la gran sala de nuevo, se acercaron lentamente. Amanda miraba hacia cada extremo del lugar. Su arma oscilaba peligrosamente en dirección a ellos. No había señales de locos cerca, sin embargo, ella miraba a todos lados como si el lugar fuera una gran trampa que se cerraba sobre ella. como si estuviera perdida.

—Amanda —Dijo Tim acercándose a ella.
Derek se escabulló por la parte trasera y pretendía ubicarse al otro lado de la chica para que esta quedara en medio de los dos.
—¡Amanda! —Repitió Tim elevando el tono.
—¡¿Qué?! —Bramó ella ladeando la cabeza hacia el techo, como si no pudiera verlo ni pudiera percibir el punto de origen de su voz pero aún así pudiera escucharlo.
—Amanda...Soy yo, Timothy... Tim... —Decía mientras se acercaba lentamente con una mano en alto.

Derek ya se encontraba del otro lado de espalda a la puerta principal y también se estaba acercando sin hacer ruido.

No hacía falta que se dijeran nada, los dos ya estaban seguros de que se trataba de la 'Droga' en el agua.
—Está bien... Es la droga. Cálmate... —Dijo en un intento de calmarla.
—No puedo ver nada... —Dijo ella y unas lágrimas empezaron a bajar por sus mejillas —No puedo ver nada, Fabián, pero puedo escucharlos acercándose... —Dijo mirando hacia una pared donde no había nada fuera de lugar.

¿Y ahora quién mierda es Fabián?

Derek se encontraba a unos pasos de ella cuando le hizo una seña a Tim de que iba a proceder a quitarle el arma.
—Amanda, no...

Se escuchó un fuerte golpe.

—¿Pero qué...?

Su posición cambió. El arma paso a estar sostenida por una sola mano la cual apuntaba hacia el sitio de donde provino el estruendo: la puerta justo detrás de Derek.

El sonido de la detonación hizo retumbar la sala. Derek se lanzó al suelo instintivamente al prever la reacción de Amanda, pero aparentemente no lo suficientemente rápido; un hilo de sangre se divisó en el aire y Tim no supo que estaba pasando. Corrió y tiró a Amanda de un empujón lanzando el arma por los aires.

Un cristal se había roto.

—¡Qué mierda está pasando!  —Gritó mientras caía sobre ella.

Tim se recuperó rápidamente y notó dos cosas al instante, a Derek maldiciendo en el piso y un gran hueco en el ventanal de la puerta hecho por una bala impetuosa. Del otro lado podía verse en el suelo la figura distorsionada de un cuerpo.

Miró a Amanda para ver como se encontraba y la descubrió inconsciente entre sus brazos. Se levantó y corrió rápidamente hasta donde estaba su amigo caído, pero se alegro al ver que aparentemente no había sido una herida mortal, ni siquiera grave.

—Qué quede algo claro —Empezaba a decir Derek mientras apretaba su brazo izquierdo—. Desde éste momento ella llevará la palanca y yo la pistola.
Tim rió y sintió ganas de abrazarlo, pero sólo lo ayudó a ponerse en pie.
—Duele como el diablo y eso que apenas me rozó... —Dijo mientras se apretaba la herida— Ahí entran varios puntos, ¿Qué fue toda esa mierda?
Tim no dijo nada, estaba viendo fijamente detras de Derek, éste siguió la pista de su mirada y volteó. Tirado en el suelo del otro lado de la puerta, yacía el cuerpo inerte de un hombre al que desde ahí no podían identificar.