Destino inexorable.

¿Hacia dónde?

Los tres hombres caminaron hacía afuera cuando ya la lluvia había parado por completo y sólo quedaba un suelo mojado y lleno de pequeñas ramas en el exterior.
Tim aún no había dejado de pensar en la experiencia de hace un rato, sin embargo, una parte de él estaba convencida de que todo había sido un...

«Un horrible y satánico viaje onírico»

El humor en sus pensamientos eran la única forma de sobrellevar las emociones.

—No solemos tener visitas en esta época del año, por eso ven todo tan desolado —Comenzó a decir Janson a medida que caminaban—. Sin embargo, hay aproximadamente 10 huéspedes registrados contándolos a ustedes.
—¿Sólo 10? Pero si cada bloque tiene tres pisos y los pasillos son casi infinitos —Dijo Derek exagerando un poco— ¿Qué ocurre con las luces del bloque donde despertarnos?
Tim se sintió aliviado de que su compañero llevara la batuta en la conversación. No tenía muchas ganas de hablar.
—Las lluvias —Dijo Janson de manera concisa—. Las malditas lluvias han hecho fallar las luces de los 4 bloques —Dijo mientras se pararon un poco más allá del estacionamiento, en un punto donde el asfaltado terminaba y daba pie a una enorme extensión de pasto que se perdía en las montañas—. Ustedes están en el bloque C, pero el problema es en todos menos en el A que es donde está el lobby.
En ese momento Tim cayó en cuenta de que no había reparado en la extensión del hotel.
—El bloque B está justo atrás del A y el D atrás del C —Dijo Janson al adivinar los pensamientos de Tim mientras encendía un cigarrillo largo y escuálido.
—Bueno... Sobre los mensajes que me dijeron... —Empezó de nuevo.
Tim lo miro amenazante, él no le había dicho nada de eso, sin embargo luego se tranquilizó.

«Seguro fue Derek»

—Ustedes definitivamente no llegaron solos, anoche los recibí en el lobby en horas de la madrugada y venían acompañados de unas señoritas, seguro fue una broma de parte de ellas.
Derek miró a Tim asombrado y fue éste último el que habló ahora.
—¿Usted dice que llegamos juntos? 
—Eso es lo que digo, señor Todd.
La cabeza le dolía y sólo quería largarse de allí, sin embargo, no sabía como, dedujo que los autos que se encontraban más temprano era de alguna de las chicas.

«Ya no están»

Vi a una salir en su auto más temprano, pero la otra se quedó dando vueltas por el hotel, quizás la encuentren en alguna de las salas de entretenimiento.

«Sólo una se fue en "su auto", por lo tanto el otro no era de las chicas»

—¿Alguna idea de donde es eso? —Dijo Derek mirándolo y sacándolo de sus pensamientos.
—Ni idea.
—En cada bloque hay una, creo haberla visto dirigirse al bloque B —Dijo Janson tirando la colilla al suelo.
—Bueno, al bloque B será —Concluyó Derek.