When I learn to FLY (METALLICA)

Capítulo 7: Tutoría.

Los días siguientes nos seguíamos juntando en los recreos, nos llevábamos muy bien, la verdad. Seré breve con esta parte de lo que yo llamo "mi diario mental", en donde recuerdo las cosas que me suceden, es algo así como una consciencia aparte a la mía, no sé si me entienden...

Es que realmente no he podido controlar mi mente, me daba pena por mi misma que aún así después de abandonar a mis falsas amigas superficiales, yo sigo con mi actitud superficial con Lars... sólo con él, sólo con él puedo ver tanta belleza, tanta perfección sin sentirme enferma en un mal sentido, con el arte me siento enferma y aterrada, con Lars me siento enferma y contenta.

¿Alguien que me explique eso?

No era de indagar mucho al respecto, me atrevo a decir que hasta busqué en internet el temita de sentirme así con un chico y la respuesta fue tan obvia que me dio vergüenza negarlo tanto en un principio:

Amor. Sí, estoy "enamorada" o quizás sólo sienta una gran atracción, quiero confiar más en lo segundo, hacia Lars, el profesor en práctica, mi único amigo... Si es que puedo ser tan estúpida aveces, porque como le confiese mis sentimientos, la amistad acabará y no tendré a nadie más, eso es muy malo porque no sabría con quién más hablar en ese caso.

Jamás comprenderían lo humillante que resultó para mi enamorarme de alguien como él, digo, no es pedofilia porque yo ya soy mayor de edad pero de todas formas, ¿por qué él tendría que fijarse en mi?

Lo único en que parece estar interesado en mi es una cosa: en que estudie. Más allá de discutir acerca de que si X pintura es bonita, cómo la interpreto o que ambos dibujemos alguna cosa, desde que le mencioné mi gran flojera que causa graves problemas académicos, me ha demostrado ser... una persona muy culta, que sabe de varias asignaturas, de vez en cuando me pide que le cuente que materia vemos en cualquier asignatura y me habla del tema.

Hasta el punto en que el acabó dándome su número telefónico y yo le di el mío, ¿para? No malinterpreten, para juntarnos algún día a estudiar... Sí, puede que nadie se lo crea pero él parecía muy convencido con eso.

El muchacho era tan amable que estaba dispuesto a perder parte de su tiempo libre para ser mi "tutor", nada mal para ser sincera. Así aprovechaba de presentárselo a mis padres y compruebo si lo ven como un buen partido para mi.

Esperen... ¿En serio yo dije esa mierda? Dios, que mal estoy.

Amigos. Sólo eso somos. Y mi miedo al arte no es miedo, sólo me quedo muy anonadada, sí, eso es. No hay necesidad de comerme tanto la cabeza con ese tema.

...¿o sí?