She is Bad

Capítulo 18: Gracias, Ryan.

RYAN'S POV.

Sus ojos estaban hinchados y rojos de tanto llorar,me acerqué más a ella y la envolví en un abrazo.  Ella, sorprendentemente me correspondió, envolviendo sus brazos alrededor de mi, tan fuerte como si nunca la hubiesen abrazado.

Después de consolarla, se secó los ojos y me miró, observándome con esos bonitos y delineados ojos llorosos, me miraban intentando decir algo que no llegaba a mi comprensión.

- Gracias, Ryan. - agradeció en un susurro, pero lo suficientemente fuerte para que yo lo oyese. Mi corazón dio un vuelco al repetir en mi cabeza lo que ella había dicho, no solo me había dado las gracias (que para las personas orgullosas como nosotros, era mucho) si no que, por primera vez me había llamado por mi nombre.

Una corriente recorrió mi cuerpo, volviéndome a erizar los pelos. Me arrodillé frente a ella y la miré, la miré como nunca antes había mirado a una mujer.

- No hay de qué, Brooks. - vi como una débil sonrisa salió de su boca y sentí como si hubiera esperado toda una vida para ver su sonrisa, aunque fuese de esta forma.

¡Mierda! ¿que cojones estoy diciendo? Quiero pegarme un golpe yo mismo contra la pared.

Me levanté, incómodo por mis propios pensamientos y le tendí la mano.

- Será mejor que vayamos a buscar a tus hermanos. - le sugerí, ella lo pensó un rato y negó.

- Como me vean así, se pondrán furiosos buscando a quién lo hizo, prefiero ir a casa. - respondió con un poco más de fuerza en la voz, yo asentí y le abrí la puerta de la habitación.

- Te llevo, no hace falta que te niegues. - ella asintió lentamente y salimos de la fiesta.

Durante el trayecto en coche, no nos dirigimos la palabra, yo estaba más concentrado en todos mis nuevos sentimientos y pensamientos que me provocaba ella, mientras ella simplemente miraba por la ventana sumida en su mundo.

BROOKE'S POV

No sé si estar feliz de que él haya sido quién me haya ayudado o cagarme en mi existencia por haberle mostrado más puntos débiles con los que joderme. Pero, no puedo negarlo, hoy se ha portado muy bien conmigo y puedo jurar que en el momento que se arrodilló frente a mi, mirándome con esos profundos y preciosos ojos, se me hizo eterno.

Y debo añadir que a gran parte de mi ser, no le hubiese molestado estarse media hora contemplándole. Él tiene algo, algo que hace vibrar cada parte de mi cuerpo, algo que me atrae como un imán, algo que me tienta a conocerlo, algo que me tienta a amarle.

Espera, stop, paren el mundo. ¿ACABO DE PENSAR ESO? ¿DE VERAS QUE LO HE PENSADO? Por todos los dioses, que alguien me mate antes de que cometa alguna estupidez.

Entre que intentaba eliminar rastro alguno de mis anteriores pensamientos y descubría sentimientos extraños, me di cuenta de que habíamos llegado  a mi destino.

- Gracias por traerme. - agradecí, era lo mínimo que podía hacer. El asintió y pude notar su mirada clavada en mí hasta el momento en entrar a mi casa. Después de eso, oí el rugido de su motor alejarse por la calle.

No más entrar me dirigí al baño de arriba. Me sentía asqueada y sucia del momento tan desagradable que había vivido. Me saqué la cazadora de Hunter y el resto de tela que quedaba de mi vestido - ya que rompieron mi vestido- miré la cazadora e inconscientemente la olí. Y joder, como olía.

Tenía un olor peculiar, que estaba segura que recordaría cada día; era una mezcla entre un perfume dulce y fresco junto a pura masculinidad. Y os prometo que era una mezcla exquisita.