Capítulo 7

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¿Es que todo el mundo es infiel? ¿nadie puede simplemente respetar a su pareja? Me sentía tan culpable al ser cómplice de Bruno para engañar a Melissa y ella también lo engaña, y peor, y quién sabe desde cuándo.

Me cubro los ojos dándome la vuelta y diciendo ''lo siento, lo siento, lo siento, lo siento''. Mel se incorpora y se cubre con una sábana.

-Aly... No, no es lo que...

-¿¡Ah no!?

-Fue un...

La interrumpo.-¿Sólo lo viste una vez en la plaza y ya te metes con él, él se mete contigo, se mete en ti ¡aghhh!

-¡Alicia! Necesito que te calmes, ¿bien?

-¿Cómo fue que...-No termino de formular la pregunta y miro al buenísimo tipo tendido en su cama.-¿Sabes tú que ella tiene novio?

-Sí, lo sé...

-¡Agh!-Lanzo las manos al aire.

-Alicia cálmate, ¿quieres? Él es sólo... Un amigo.

-¿¡Un amigo con el que tienes sexo!?

-Y es increíble en eso...-Susurra.

-¡Oh por Dios! ¡no quiero saber los detalles de cómo te penetra mientras tú tienes...

Me cubre la boca.-¡Shh!-Un tono nos desconcentra y miramos en dirección al chico, quien contesta su teléfono.

-Hola princesa... Sí, lo sé, lo siento, tuve que salir... ¿mañana?... Bien, bien... Estoy eh... con mi hermanita... Oh, no, no te puede saludar, está jugando, ya sabes cómo es pero yo le digo que su cuñadita la extraña... Perfecto, nos vemos... Te amo mi amor.-Eso último lo susurra al teléfono cubriéndose la boca.

Mi boca forma una O y ahora sí ya he dejado de creer en el amor por completo.

-No puedo creer nada de esto.

-Aly, tienes que prometer que no se lo dirás a nadie, en especial a Bruno.

La miro con los ojos entrecerrados.-Oh no, tú se lo dirás, si es que tienes el valor... Y tú...-Me dirijo al ''bombón''.-Ojalá que ''tu princesa'' se dé cuenta pronto de que su novio se acuesta con la primera que ve en el estacionamiento de una plaza.

Y me voy.

Pienso en tomar un taxi de regreso pero prefiero caminar hasta la parada para tomar el autobús. Al llegar a la parada me recargo en un poste. Me paro derecha y me vuelvo a recargar. Y otra vez. Y otra. Y otra. No puedo estar tranquila así que decido caminar. Quiero contarle esto a alguien, explicarle cómo me siento, lo que pienso, lo que quisiera hacer, pero no hay nadie. Mi única amiga es, era ella y me acaba de provocar náuseas. Y luego está Bruno, y no puedo decírselo a él, ¿o sí? Justo ahora me siento tan sola.


Y lo peor no es saber que me siento sola, sino saber lo estoy.

Llego a mi casa y mamá me saluda. La saludo por obligación y me voy a mi cuarto, necesito una sesión en la azotea. Subo y llego justo a tiempo para contemplar la belleza del sol metiéndose. Cuando empiezan a salir las primeras estrellas de la noche me recuesto en el piso (que en realidad es el techo) y me pierdo en la inmensidad.

Imposiblemente destinado TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora