El corazón de Max se detuvo por un segundo mientras miraba a toda la audiencia, trataba de buscar en los rostros de las personas que allí estaban alguna señal de que esto fuese real, fue entonces cuando en la lejanía pudo a ver a Joice, la madre de Chloe quien abrazaba con todas sus fuerzas a David, su esposo mientras sonreía, ambos estaban felices por qué finalmente se estaba haciendo justicia, por qué Nathan iba a pagar en la cárcel. Pero Max.. Max sentía como parte de ella moría, su corazón latía fuertemente de solo imaginar todo lo que Nathan estaba sintiendo en ese momento. Sus sentimientos hacía él, hacían que sus pensamientos racionales se nublaran, pero en el fondo de su racionalidad Max sabia que Nathan debía pagar por todos los horribles errores que había cometido pero su corazón se negaba aceptarlo.
Max pudo sentir el peso de una mirada mientras trataba de levantarse del asiento, era Victoria quien mantenía sus ojos llenos de furia sobre ella, tratando casi de penetrarla con la mirada. Victoria estaba consolando a una chica de cabello claro que tenia facciones parecidas a las de Nathan, al parecer era su hermana, Kristine, de la cual Max solo había sabido en la otra linea de tiempo, la chica lloraba desconsolada apoyando su mano en el hombro de Nathan quien permanecía con su mirada en la nada para luego dirigirla hacia Max mientras tomaba la mano de su hermana.
Max trataba de desviar su mirada de la de Nathan, se sentía tan mal, tan culpable por todo lo que le estaba haciendo vivir al él y a su familia, ella nunca había querido que todo terminara así, pero era así como todo había sucedido. De pronto a lo lejos pudo ver como se llevaban a uno de los testigos del caso, era Jefferson quien iba caminando sonriente con dirección hacia donde estaba Max, las cadenas amarradas a sus pies y las esposas que llevaba presionando sus muñecas provocaban un ruidoso sonido que se escuchaba en todo el lugar, de pronto hizo una pausa en su recorrido y se detuvo un momento frente a Max.
- Hola Max.. solo quería agradecerte por tu declaración.
Le dijo Jefferson giñandole el ojo para luego seguir caminando hacia la salida, Max lo siguió con su mirada hasta que desapareció al fondo de la sala, la había dejado con un sabor amargo, seguramente todo este tiempo él había estado esperando que esto sucediera y como siempre había manipulado a todos para llevar a cabo su plan. algunos comentarios se escuchaban en la primera fila de la audiencia llamando inmediatamente la atención de Max.
- El va sonriente por que lo van a dejar libre después de su buena conducta y su reprochable conducta anterior..
Dijo una persona refiriéndose a Jefferson.
Fue entonces cuando Max comenzó a sentir como un dolor inmenso mezclado con rabia comenzaba a apoderarse de ella, era un sentimiento extraño pero no desconocido que se desarrollaba en su interior, sentía la necesidad de cambiarlo todo y sabia que ella era la única capaz de hacerlo, aunque se había prometido a si misma jamas volver a retroceder en el tiempo, era la única forma de hacer verdaderamente justicia.
- Lo siento Joice..
Dijo Max levantando su mano retrocediendo en el tiempo, haciendo que todo lo que recién había vivido se borrara de un minuto a otro, La enfermiza sonrisa de Jefferson, el llanto de la hermana de Nathan, el abrazo entre Joice y David, el veredicto contra Nathan y finalmente su declaración.
- ¿Jura decir la verdad y nada más que la verdad?
Dijo el jurado del juicio haciendo que nuevamente Max respondiera afirmativamente..
- Si, lo juro.
Mientras que con su mirada buscaba los ojos de Nathan para mirarlo mientras juraba.
- Señorita Maxine Caulfield, estuvo usted en el momento en el cual Nathan Prescott asesino a Chloe Price?
Dijo el abogado caminando de un lado otro, tal cual como lo había hecho antes.
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Una segunda oportunidad (Caulscott fanfic <3)
FanfictionDespués de todas los fenómenos que han sucedido en la vida de Max ella debe comenzar desde cero, en una nueva cuidad, un nuevo hogar, una nueva escuela, un nuevo amor? Pero siempre habrá algo que le recuerde a su pasado, siempre habrá alguien que la...