Eres mío y de nadie más.

-Capitulo 1-

"Si tan solo hubiera tomado otra ruta, si tan solo hubiera llegado más temprano al trabajo, tal vez así, no lo hubiera conocido, no estuviera con estos pensamientos en mi cabeza, intentos de suicidio. Tal vez y así, me hubiera ahorrado todo este sufrimiento..."

-----------365 DÍAS ANTES-----------

Miércoles 31 de Dic. 7:24 am.

Me había levantado con un ánimo demasiado positivo para mí, pues suelo levantarme casi siempre con un humor de perro.
Antes que todo, me llamo Christian, Christian Hoffman, pero todos me dicen Chris. Tengo 17 años y estoy por terminar la High School.

Como sabrán hoy en la noche es cuando todos encienden sus velas, prenden el asador y cuentan desde el 10 hasta el 1. Así es, hoy a media noche se festeja Año Nuevo.
No es que no me agrade, simplemente que no vivo con mi familia, me mudé acá a L.A. Apenas cumpliendo los 15 años. No estoy peleado con ellos, claro que no, simplemente que por mi promedio académico se me presentó una oportunidad de venir a estudiar aquí, y la aproveche.
Ellos ahorita se encuentran viviendo en Oklahoma City, cada fin de semana me comunico con ellos, ya sea con mis papas o con mi hermana.

Ahora, en este momento me encuentro yendo hacia mi trabajo, que es un restaurante reconocido de aquí; "Canter's Deli". No queda muy lejos del departamento donde vivo, así que casi siempre voy caminando.

Estaba parado en el semáforo esperando para cruzar la calle, cuando de pronto unos tipos enmascarados llegaron apuntándome con una navaja.

—¡Dame todo tu dinero niño!— grita uno de ellos apuntándome aún con el objeto filoso.

Inmediatamente le di mi cartera, mi reloj, mi anillo y estaba a punto de darle las llaves de mi departamento para que no me fuera a hacer daño, cuando comenzaron a reírse.

—¿Cuál es la gracia?— pregunto un poco molesto pero con miedo a la vez.

—Tranquilo, perdón si te asustamos mucho, ten toma tus cosas— me dice riendo uno mientras se despojaba de su máscara.
Si antes no entendía nada, ahora menos. Pero cuando se deshicieron completamente todos de sus máscaras, me di cuenta de quienes eran y entendí todo— no te molestes, enserio, es solo una broma que le estamos gastando a la gente mira, allá están grabando— dice Cameron Dallas señalándome la otra calle.

—Oye, enserio perdón, tal ves nos pasamos un poco contigo, debido a tu reacción. Por cierto, me llamo Matthew Espinosa, y tú?.

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