Eres mío y de nadie más.

-Capítulo 11-

★★★

Sábado 03 de Enero, 9:03 a.m.

Era una mañana soleada, las aves circulaban por el cielo y mi piel estaba caliente a causa de la luz solar.
Estaba tranquilamente concentrado en mis pensamientos cuando de pronto soy interrumpido por el golpe de una pelota.

-¡Oye niño ten cuidado!- le grito enfurecido al niño inquieto que se encontraba a lado de mi.

Uno ya no puede estar tranquilo ni el la playa...

Oh si, me encuentro en la playa, vine para distraerme un poco del trabajo y de esta vida tan solitaria que llevo ahora.
Le he estado marcando un montón de veces a Gina y nunca las acepta.
Los chicos no me han respondido los mensajes, supongo que han de estar ocupados...
A quien quiero engañar, ¡nadie me quiere!

-Oye- la voz de un chico me saca de mis pensamientos de nuevo.

-¿Qué?- le contesto pesadamente.

-Oye tranquilo, solo quería saber si me podías dar un poco de tu bloqueador solar- me dice sonriendo. Tiene una linda sonrisa. Una conocida sonrisa.

-Oye, ¿te conozco de algún lado?

-Pues si de pequeño veías la serie iCarly puede que me conozcas de ahí- me dice riendo.

-Cierto! Eres ese chico... Freddie, no?

-El mismo Freddie Benson, aunque mi nombre real es Nathan Kress- se sienta a mi nivel y se rasca la nuca.

-Si, lo sé- le digo riendo.

-Entonces... Me lo vas a prestar?- dice señalando la crema.

-Oh claro que si! Disculpa soy un poco distraído- me tapo la cara con las manos, no tengo necesidad de que ande viendo mis sonrojos.

-Tranquilo- se me queda mirando pensativo.

-Pasa algo?- le pregunto preocupado.

-No, lo que pasa es que- se queda callado un tiempo y noto su desesperación por lograr que salga alguna palabra de su boca.

-Estas bien?- le pregunto acercándome un poco.

-Si, todo excelente pero, ¿crees que me puedas ayudar a untar bloqueador en la parte baja de la espalda? Es que no alcanzo- me dijo agachando la cabeza.

-Claro que si, no hay problema- tomo el bote de la crema con mis manos removiéndole los restos de arena que se le habían pegado por la humedad- Y dime, qué haces por acá? Como es que la gente o los paparazzis no te están molestando?- pasó mi mano por su espalda. Dios que espalda.

-Amigo mío, estás en Los Angeles, ya es costumbre encontrarte a alguna celebridad por estos lugares, además, mi tiempo de fama ya pasó un poco.

-Oye disculpa, llevo apenas dos años aquí, no es como que me haya acostumbrado aún- comienzo a hacer círculos con mis manos en su espalda.

-Oh, l-lo siento, no sa-sabía- me dijo tartamudeando, de seguro le incomodó mi acción.

-Ya está- le digo acomodándome de nuevo en la arena recostándome.
Creí que se iría pero para mi sorpresa se recostó a mi lado.
Me quede esperando a que dijera algo, pero al ver que no daba señal de querer hablar volteo hacia el y me le quedo mirando.

-Que pasa?- me dice volteándome a ver el también.

-Que pasa de que?- le digo un poco desesperado.

-Pues tú dime qué pasa.

-A que te refieres?

-No lo sé, tú dime a qué te refieres- me dice con una sonrisa burlona.

-Olvídalo- me volteo de nuevo con vista hacia el cielo.

-Oye- me dice causando que dirija mi vista de nuevo hacia el.

-Que pasa?

-Que pasa de que?- me dice riendo.

-Oye ya basta!- le digo riendo y golpeándole levemente el hombro.

-Hey Nathan!- escuchamos un grito.

Ambos volteamos para ver de quién provenía esa voz; era un chico de estatura mediana de tez morena.

-Disculpa, me tengo que ir- al levantarse se sacude la arena de sus bermudas.

-Si, no hay problema- me levanto instintivamente.

-Cuídate amigo- me jala de un tirón para darme un abrazo.

-Tu también Nathan- le digo correspondiéndole el abrazo.

-Por cierto, ¿cuál es tu nombre?- dice separándose de mí.

-Christian Hoffman.

-Entonces, fue un gusto conocerte Chris- me dice sonriendo- me pasas tu numero de teléfono?

-Claro, solo dame tu teléfono para que pueda registrarlo- tomo su teléfono y anoto mi numero- ya está, nos vemos- me despido de él con la mano.

-Te mandare un mensaje en cuanto pueda- me grita mientras se aleja corriendo. Yo solamente me quedo observándolo hasta donde mi vista me lo permite.

Estaba a punto de acostarme cuando vibra mi celular. Me río inconscientemente pensando en que podía ser Nathan.
Pero no.

"Christian no nos marcaste ni siquiera en año nuevo, ¿Está todo bien?
Tu padre y tu hermana están haciendo las maletas, pues decidimos ir para allá un tiempo, nuestro vuelo sale a las 12:00 pm, llegamos en unas horas.
Besos.

-Mama"

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