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 Toque el timbre nerviosa, no me había demorado tanto en llegar ya que la casa de Samu quedaba a unas pocas cuadras del instituto.

 Una mujer castaña... muy bella abrió la puerta.

-¿Estará Samuel?-pregunte rápidamente.

 Ella me miro sorprendida y asintió.

-¿Tu eres..?

-Amanda, su mejor amiga.-conteste segura de mi misma.

 Ella abrió un poco más la puerta y me dejo pasar. Las paredes tenían un color azul muy bonito y muchos cuadros cubriéndolas.

-¡SAMUEL!-grito la mujer a mi lado.

 Pegue un saltito y reí levemente por mi acción. 

 Mi mejor amigo bajo las escaleras corriendo y miro a su madre sin darse cuenta de mi existencia.

-Tu amiga te busca.-dijo seriamente sin mirarlo a los ojos y desapareció por una puerta.

 Samuel me miro con sus ojos rojos de tanto llorar y me sonrió calidamente. Corrí a abrazarlo, lo necesitaba tanto como él.

-¿Qué haces aquí chiqui?-pregunto en mi oído.

-Vengo a cuidar a mi mejor amigo como él ha hecho conmigo.-le dije sonriendole.

 Subimos a su habitación y nos sentamos en su cama.

-Cuentame entonces... ¿qué paso?

 Bajo su mirada y vi como una lagrima caía hacia sus manos.

-Mis padres... ellos no me aceptan, ellos quieren tener un hijo perfecto, que sea hetero.-dijo llorando.

 Posicione mi mano en su hombro haciendo que él me mirara.

-Es injusto que en este mundo al ser diferentes a los demás te tomen o te vean como la oveja negra. Nunca cometas el error de ser igual a tus amigos o a cualquier otra persona porque ya no eres tu, ya eres otro más en el montón. Y solo quiero que recuerdes algo, ser diferente es ser original, y ser original te hace único y tu... Samuel, amas a alguien que te hace ser único, que te hace ser la persona que tu ya eres.-le dije con todo mi corazón.

 Los dos llorábamos y nos mirábamos a los ojos.

-No dejes que.... no dejes que tus padres traten de cambiar tus decisiones, porque tu ya eres perfecto a tu manera.

 Samuel me sonreía entre todas esas lagrimas que caían por su mejilla.

-Nunca me dejes Amanda, y nunca dejes que ese chico Rubén te destruya, porque tu te mereces a alguien que sepa valorar a la persona... al ángel que tiene delante de sus ojos.-cuando él termino de decirme eso me abrazo fuertemente, me abrazo tratando de que mis piezas se juntaran, tratando de que sus piezas se juntaran.




Todo por ti -rdg-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora