Él| Daryl Dixon.

Prólogo.

"La vida no es siempre como tú lo piensas, gira tu cabeza un segundo y las cosas cambiarán".

Bar de Atlanta. Tres años antes de la pandemia.

- Dixon, tu hermano esta afuera esperando por ti- El cantinero avisa al menor de los hermanos, el chico asiente tomando la última copa y se para de rápidamente.

Se tambaleo para todos lados pero logra salir, se sorprende a ver que todo esta oscuro, si mal no recuerda el entro al bar cuando habían grandes rayos de sol.

-Súbete nenita, no tengo todo el tiempo del mundo- El mayor de los Dixon protesta y su hermano sube a la camioneta sin quejarse. -Debes dejar de ir a tomar, ella ya se fue, supera eso- Merle dice cabreado.

Daryl siente como una parte de el se ablanda, maldición la extrañaba mucho.

-Soy un idiota- El chico ríe amargamente apunto de llorar, el alcohol y la culpa lo tenían en mal estado.

-Eres Daryl, un idiota por naturaleza- Merle realmente no ayudaba a su hermano quién estaba ahora totalmente destrozado. -Ahora hablando en serio ¿Porqué la hermosa y sorprendente no prostituta italiana se fue?- Su hermano pregunto y el menor ahogo un grito de frustración. Ambos siempre se enrollaban con prostitutas.

Daryl no respondió, Merle no quiso seguir jodiendo a su hermano a si que solo se digno a manejar hasta dejarlo en su departamento. Inmediatamente Daryl al ver que estaban llegando suspiro, ese departamento lo compartía con ella. Pero ahora solo estaba vacío con algunas cosas que ella olvido, por ejemplo un álbum de fotos de ellos dos. Si, que casualidad que lo haya olvidado.

-Merle- Daryl susurro cuando su hermano estaciono el auto, El mayor lo miro con una ceja alzada esperando que este siga hablando. -La engañe- Responde abrumado, en el momento comenzó a recordar la gran pelea que termino separandolos.

-¿Y por eso se fue?- Su hermano pregunto con gracia.

Quién diría que por algo así la italiana se iría. Cuantas veces Merle engaño a sus parejas, si mal no recuerda a la única que no engaño fue a la chica Christine, amiga de la italiana que estaba con su hermano. Ella se fue sin decir nada, solo desapareció.

Merle no sufrió, una más o una menos no era algo que le doliera.

-La engañe tres veces con una tipa a quién ni recuerdo, estaba borracho, siempre que peleaba con ella me iba a tomar y me encontraba a esta mujer hasta que un día estaba más pasado de la cuenta, nos acostamos y las otras dos veces que volví ella estaba ahí- Daryl explicaba y Merle simplemente lo miraba sin expresión. -La mujer se entero que estaba con ella y le mando fotos mías en su cama- El menor de un momento a otro comenzó a lloriquear.

Merle río un poco sin que su hermano lo note, luego de eso puso una mano en su hombro.

-Recuerdame nunca más dejarte tomar cuando estas depresivo, o recuerda tú mejor no meterte con una italiana nunca más- Decía y su hermano lo miro con mucha frustración. -Daryl, ahora hablando muy enserio. Ella se fue hace un mes, no puedes seguir sufriendo no quiero ser mal hermano pero si tanto la querías deberías haber pensado en lo que hacías o hace tiempo debiste haber buscado donde ella esta ahora, si ya volvió a Italia o si esta aquí- El mayor Dixon comento y el menor asentía escuchándolo.

El chico se bajo del auto sin decir nada, con las llaves del departamento en sus manos entro a su casa y se lanzo al sillón, estaba tan cansado por todo, pero su hermano mayor tenía razón; o eso el cree.

Después de todo, el no la quiso tanto, por lo que si esta llorando por ella es culpa del alcohol... y seguramente también porque extraña tener sexo con la italiana, si, es eso.

Tratando de convencerse Daryl cerro los ojos dispuesto para dormir, mañana tendrá una horrible jaqueca pero el lado bueno es que estuvo un mes acostumbrándose al dolor.