Sweet spell.

Capitulo 5.

Bajamos de auto tranquilamente, ninguno de nosotros dijo ni una palabra mientras regresábamos a mi casa. Liv está sospechosamente pensativa y lee atentamente uno de los libros que seguramente le dio Merlin.

Ewan no muestra ninguna emoción luego de la escena en la biblioteca.

Abro la puerta de la casa y escucho una inconfundible voz.

-Vanellope es mi única esperanza de tener bisnietos antes de morir.

-¿Abuela Yuyu?.- pregunto entrando en la cocina.

La anciana de cabello rosa furioso corto unos diez centímetros arriba de los hombros al igual que yo se gira al verme.

La abuela Yohan sonríe haciendo que sus preciosos ojos verdes brillen.

-Mi niña pro fin llegas.- me abraza fuertemente como lo hizo siempre.

La abuela Yoahn o Yuyu, como prefiere que la llamen, es madre de mi padre; ella nunca fue el tipo de abuela que se quedaba en casa para hacer galletas o tejer. Me gusta llamarla "abuela aventurera", luego de que mi padre que casara con mi madre ella y mi abuelo Forest decidieron vivir nuevamente y viajar por todo el mundo. Siempre hace todo tipo de locuras, teñirse el cabello de colores locos, tatuarse, hasta para su cumpleaños número sesenta se tiro de paracaídas. Una abuela con la que nunca te aburrirías.

-Feliz cumpleaños reina.- mi abuelo aparece detrás de ella.

Él también no es un abuelo común, siempre llama la atención de la gente por el simple hecho de tener perforaciones en las orejas y un piercing en la ceja izquierda.

Nunca abandono la moda de los ochenta, estilo rockero a la antigua. Vistiendo como motociclista, con una abundante barba blanca por la edad y un mohicano, igual de blanco, un poco menos llamativo que el que usaba de más joven; me sorprende ver a mi padre y a ellos. Mi padre es el tipo de hombre más hogareño que prefiere no llamar la atención en cambio mis abuelos son todo lo contrario. Con más de cuarenta años juntos son los abuelos más "cool" que puedan existir.

-¡Abuelo!.- me abraza y me levanta sin esfuerzo, de aquí vienen los genes de la altura que heredaron mis hermanos pero decidieron no venir en mí.

-¿En qué momento han crecido tanto ustedes dos?.- saluda Dex y Liv y se detiene cuando ve a Ewan quien la mira fijamente extrañado.- A ti no te conozco.

-No señora, mi nombre es Ewan.- dice inclinando la cabeza en un saludo.

-Yohan pero dime abuela Yuyu.- dice ella sonriendo.- Él es Forest mi esposo.- se gira para mirarme.- Veo que al fin sacaste a la rata de tu casa.

-Abuela...- ella no tiene filtros a la hora de hablar, nunca le agrado Rob y lo hizo notar cada vez que tuvo oportunidad.

-¿Qué?.- dice con aire inocente- Digo la verdad.

-Sera mejor que vayan pasando para el comedor antes de que a mamá enloquezca.- dice Ada.

-Vayan, yo quiero hablar un momento con Ewan.- digo acercándome a él.

-No tardes.- dice mi abuela, nos sonríe a ambos y nos dejan solos.

-Tu familia es un poco...- piensa algo que decir.

-¿Intensa?, ¿loca?.- respondo.

-Unida.

-Si, son un poco intensos pero los quiero.- un pensamiento se instala en mi cabeza- ¿Te llevabas bien con tu familia?.- ni bien digo esa pregunta sus ojos se apagan de cualquier emoción y me arrepiento de haber hablado.