Sweet spell.

Epílogo.

Diez años después...

-¿Mamá como conociste a papá?.

-Sí, tu nunca nos contaste como se conocieron.

Me giro para ver a los dueños de esas preguntas y suelto una carcajada al ver a mi hija.

-¿¡Hija que te ocurrió!?., exclamo- pareciera que un arcoíris se estrelló contra tu cara.

Ese comentario hace que mi hijo rompa a reír mirando a su muy maquillada hermana.

-¡No se rían!, tía Liv me regalo el maquillaje pero no me explico cómo usarlo.

Haciendo pucheros se sienta en una de las sillas, sus ojos color ámbar maquillados con un violera chillón y sus labios pintados de rojo y un muy fuerte rubor en sus mejillas la hacen parecer un payaso.

-No te rías de tu hermana Dex, ella está muy linda así.- digo lanzándole una mirada a mi hijo mayor que disfruta de burlarse de su hermana.

Con ojos igual a los míos y cabello igual a su padre mi hombrecito es todo un galán, igual a su padre.

-No respondiste a mi pregunta.- se queja Isis.

-Porque la historia de la tía Liv es muy poco convincente.- dice ceñudo Dexter.

-¿Qué dijo ella?.- pregunto mientras vuelvo a lo que estaba cocinando.

-Dijo que ella, tío Dex y tu hicieron un hechizo de un libro y papá apareció de la nada.- dice Isis mirándome emocionada con sus enormes ojos del mismo color que su padre.

-Eso es muy poco convincente.- refunfuña Dexter.

-Eres igual de escéptico que tu tío Aden.- respondo.

-Él es el único cuerdo de la familia.- murmura mi hijo.

Un ruido me alerta y apagando el fuego voy hacia el cuarto de los bebés, me acerco a la cuna y no veo al pequeño que debería estar ahí.

-¿Ewan?.- salgo del cuarto y voy hacia nuestra habitación.

Me detengo en la puerta para ver la escena más tierna del mundo.

A mi esposo junto con nuestro par de gemelos de solo un año y medio jugando en la cama.

Los gemelos que salieron con los ojos ámbar de Ewan y el cabello claro de mis hermanos parecen unos angelitos.

Jesabelle y Silver son los bebés más risueños que eh conocido.

-Veo que se divierten.- mi esposo levanta la mirada y sonríe agarrando a Jess para evitar que se caiga.

-Ya no tiene ganas de dormir.

Me uno a ellos a la cama y agarro a mi hombrecito haciéndolo reír.

-¡Oigan!, yo también quiero abrazos.- Isis entra corriendo a la habitación y se sube a la cama reclamando el brazo libre de su padre.

-¿Qué le ocurrió a tu cara hija?.- dice Ewan al ver la obra de arte que tiene en el rostro.

-Es su intento de maquillaje.- dice Dex subiéndose también a la cama.

-¿Tú también quieres cariño?.- digo tirando de él para abrazarlo e impidiendo que se escape.

-¡Mamá!.- exclama cuando Silver babea su cabello.

-Papá tu si me dirás la verdad, ¿no?.- dice Isis jugando con el cabello de su padre.

-¿Sobre qué cielo?.

-Sobre cómo se conocieron tú y mamá.- dice Dex alejándose de las mojadas manos de su hermanito.

-Ah eso.- Ewan me mira y sonríe.- Yo la conocí en la pastelería.

-¿Así?, ¿sin nada de magia?.- dice Isis decepcionada.

-En realidad tu padre no es de esta época, él era un guerrero celta del año mil quinientos e iba a ser rey de un enorme castillo y por capricho del destino fue traído a esta época y para que su vida no acabara en la próxima luna llena luego de su llegada tenía que quedar embarazada y es así como llego este muchachito de aquí.- estrujo una de las magillas de mi hijo ganándome una mala mirada del mismo.

-¿En serio?.- dice Isis sonriendo.

-¡Claro que no Isis, eso no existe!.- exclama Dexter.

Antes de que Isis pueda protestar el timbre de la casa suena y mi pequeña salta de la cama.

-¡Esos deben ser los tíos!.- grita corriendo por el pasillo.

-Dex ve a ver quién es.- digo.

Refunfuñando como siempre mi hijo sigue a su enérgica hermana dejándome nuevamente a solas con mis gemelos y mi esposo.

-¿Crees que es hora de contarles todo?.- pregunta Ewan levantándose de la cama con Jess en sus brazos.

-No lo creo, dejemos que crezcan un poco más.

[...]

Miro a mi alrededor y noto que la mesa se ha agrandado en estos años.

Ada esta de pareja con uno de sus compañeros del ejército, Aden está en algo pero nada serio. Liv sigue con su locura del ocultismo y está esperando a su primer hijo con nada más ni nada menos que Merlin. Al parecer toda la experiencia del secuestro e investigación sobre Ewan los hizo hacerse más cercanos. Dexter, mi héroe, mejor amigo y padrino de mi hijo con su mismo nombre sigue igual de loco y divertido que siempre. No quiere contarme nada pero intuyo que tiene una novia y ansío conocerla. En cuanto a Tamila supe que tuvo que pasar un tiempo en prisión por ser cómplice involuntaria de Rob.

Mis padres babean por sus nietos y están felices de tenerlos para ellos solos todos los fines de semanas.

La familia reunida, las conversaciones y peleas contantes hacen que mi vida parezca perfecta.

Esa mancha oscura que fue Rob me dejo marcada de por vida.

Según se por Aden, Rob fue llevado a un hospital psiquiátrico y diagnosticado con Limerencia. Una enfermedad mental que explica el porqué de su obsesión hacia mí. Por más mal que me haya hecho no puedo estar enfadada con él, porque si no fuera por nuestra separación jamás hubiera conocido a Ewan; la experiencia del secuestro y toda la locura que hizo me ayudaron a darme cuenta de lo corta que puede ser la vida. Que en un momento podemos estar con los que más queremos y al siguiente ya no estar más, el haber vivido la casi muerte de mi mejor amigo y el amor de mi vida me hizo dame cuenta de que debo darle más importancia a las cosas más pequeñas de la vida. Como las tontas peleas, los momentos a solas o simples sonrisas, esas cosas hay que disfrutarlas al máximo y siempre ser feliz.

-Silencio,- me levanto de la silla seguida por mi esposo- queremos dar una noticia.

Todos en la mesa nos miran ansiosos incluso mis hijos que no sospechan nada.

-¿Qué ocurre hija?.- dice mi madre haciendo rebotar en sus piernas a Jess quien ríe contagiosamente.

Miro a Ewan que me sonríe y toma mi mano dándome un apretón.

-Queremos anunciarles que dentro de siete meses habrá un integrante más en esta familia.- dice Ewan sonriendo a mas no poder.

El silencio se hace presente en la sala, cosa que termina cuando el chillido de Isis nos hace hacer una mueca.

-¡Otro hermanito!.- salta de su silla y viene a abrazarme.

El resto de la familia sale de su sorpresa y comienzan a felicitarnos y a quejarse de que parecemos conejos.

Pero todo eso es parte de lo que conlleva la familia, yo soy feliz a pesar de todas las adversidades y el poder crear otra vida que es mitad yo y mitad del hombre que más amo es lo más maravilloso de la vida.

Y de eso se trata, de crear vida y momento felices. No dejarse opacar por las cosas feas de la vida.

Solo vive y se feliz, lo demás no importa.